Haz click aquí para copiar la URL

Calvary

Drama El Padre James Lavelle (Brendan Gleeson) se esfuerza por conseguir un mundo mejor. Le preocupa ver la cantidad de litigios que enfrentan a sus feligreses y a la gente de su parroquia, y le entristece que sean tan rencorosos. Un día, mientras está confesando, recibe una amenaza de muerte de un feligrés anónimo. (FILMAFFINITY)
<< 1 2 3 4 10 19 >>
Críticas 93
Críticas ordenadas por utilidad
10 de marzo de 2015
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
De la verde y católica Irlanda, y sustentada en la portentosa actuación de Breendan Gleeson, llega «Calvary». Una poderosa reflexión vital acerca del destino, la redención y el perdón, modélicamente respetuosa con sus personajes.

La segunda realización del británico J. M. McDonagh presenta un inolvidable protagonista decididamente fiel a sus convicciones, aunque nunca empecinado. Alguien cuya actitud le da la vuelta a aquel cuento de las mil y una noches en el que un jinete huía al galope de la muerte, escapando hacia la ciudad donde esta lo esperaba.

La figura interpretada por el excelente Brendan Gleeson, uno de los grandes actores europeos de siempre que ya dejó su sello en «The tiger’s tail», vive un calvario casi literal durante los ocho días como ocho pasos sin caída, que cubre el metraje. Acompañándolo en su trabajo diario, seremos testigos de sus dudas, y del recuento de los hechos trascendentes de su existencia, sin ahorro del reconocimiento de errores cometidos.

Su carácter de sacerdote que tomó los hábitos después de enviudar, le permite al director entrar en los hogares y los lugares de reunión de los habitantes de Sligo, ciudad costera del noroeste irlandés, a quienes llegamos a conocer con gran intimidad. De esta forma, McDonagh elabora un espléndido fresco sobre la población de la comarca.

La cinta parte de una inquietante cita de San Agustín, según la cual cabe esperanza porque uno de los ladrones se salvó, pero no demasiada porque otro pereció. Y este clima de incertidumbre y peligro inminente se mantiene hasta la caída del telón, creando un desasosiego muy estimulante.

«Calvary» está absolutamente inmersa en nuestra actualidad y trae a colación tanto el pelotazo financiero como los desahucios y recortes posteriores que culminan el saqueo. Tanto el radicalismo islamista como los casos de pederastia perpetrados por elementos del clero o el sensacionalismo.

Y destaca con sobresaliente en el reflejo del terror sufrido por un niño. En su contextualización de crímenes incomprensibles. En el retrato de la hostilidad que sufre un inocente por pertenecer a un determinado colectivo y de la perplejidad con que la recibe. Mientras mantiene el timón tan fuerte como sabe en la dirección que cree adecuada.

«Calvary» trata de venganza, perdón, redención... De la necesidad de recibir afecto expresado con claridad. De la cadena que convierte a quien sufre abuso en posterior verdugo, de víctimas colaterales. De la difícil relación entre religión y justicia civil o entre ejército y pacifismo. De envejecer en soledad, de afanes artísticos incomprendidos, del debilitamiento de los recuerdos, de inmersiones excesivas en el propio dolor… Temas fundamentales abordados por esta obra…

Agudamente reflexiva. Sensible, turbadora… Bellísima.

Inaki Lancelot
Inaki Lancelot
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
16 de marzo de 2015
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tal y como sucediese en la magistral obra de Gabriel García Márquez, "Crónica de una muerte anunciada", la película cuenta con un arranque desgarrador que marcará el ritmo y el tono de todo el relato. El escenario no es otro que una pequeña iglesia de un diminuto pueblo irlandés, lugar en el que se produce una confesión tan abominable como despiadada que acaba con una sentencia de muerte hacia el párroco.

Sabedor de que va morir en una semana, la historia nos cuenta el calvario que vive el Padre James Lavelle, quien bajo la sombra de esa agobiante y mortífera amenaza, intentará arrojar algo de luz sobre los vecinos de su pueblo, sumidos en un sin fin de traumas y depresiones irreparables.

Convertida ya en uno de los mejores ensayos cinematográficos actuales sobre la culpa, el perdón y la fe, "Calvary" nos introduce en un mundo que se torna cada vez más turbio, en el que los paisajes crudos y violentos se convierten en un fiel reflejo del mundo interior de los habitantes del pueblo, quienes pese a los esfuerzos del cura, poseen cargas tan pesadas que solo ven en él a alguien contra quien descargar sus tormentos.

Crítica, ácida y romántica a partes iguales, “Calvary” es una de esas cintas, cada vez más escasas, que logran impactar en el tuétano del espectador y batirle las tripas igual que hace la marea con las olas, chocando ferozmente contras los colosales acantilados irlandeses.
Luis Arteaga
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4 de julio de 2014
10 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
El título hace honor a la trama en esta película porque desde el principio este cura católico en la católica Irlanda le pasa de todo y no precisamente bueno. Tiene que bregar con una comunidad pequeña pero tremendamente problematica ademas de con una hija con tendencias suicidas (sí, nuestro cura se ordenó despues de haber sido padre y estar casado). Con el único con quien no tiene "roces" es con su perro. Es una comunidad que, sin saber porqué, le tiene una antipatía poco dismulada, y que parece sufrir un "colapso espiritual".

Brendan Glesson es lo mejor de la pelicula. Soporta el peso de la misma de una manera totalmente creible. Y los secundarios están muy correctos. Sobrando quizá alguno por su poca aportación a la historia o por su excentricidad.

Es claro que hay una critica soterrada a la institución católica por su papel en los casos de pederastia (aunque no sea el caso de nuestro cura protagonista). Como ejemplo, la escena inocente en la que dando un paseo se encuentra con una niña y empieza a entablar una conversación de lo mas intrascendente, pero aparece el padre y se pone hecho una furia.

No me olvido del protagonismo del paisaje irlandes, encarnado en este caso por el condado de Sligo, al noroeste del país, y extraordinariamente fotografiado por Larry Smith.

Recomendable.
PeteSalinger
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
13 de abril de 2015
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
El padre James es un sacerdote católico que en la primera escena de esta magnífica película escucha en el confesionario a un feligrés anónimo anunciarle que va a matarle el domingo siguiente. La voz le dice que lo ha elegido por ser un hombre bueno, y el padre James lo es. El trabajo que hace McDonagh con este personaje y su bondad es un ejercicio cinematográfico espléndido. Nada es banal, ni tópico, ni previsible en la bondad de este cura, en su entrega tranquila, bienhumorada y tolerante. Tampoco es innecesario nada de cuanto se nos cuenta de su miedo, su fe, su sencilla y casi torpe manera de hacer el bien, sus tentaciones, sus caídas y su determinación.

El via crucis del Padre James hacia el domingo de su anunciado asesinato es un ejercicio de suspense espléndido, en el que el personaje va creciendo hasta un final que, sencillamente, te deja fuera de combate. Entre sus feligreses está su asesino. Unos y otros encarnan diversas caras del mal, de un mal estúpido y feo. Entre ellos anida el sufrimiento, la crueldad, la desesperanza, el cinismo y la locura. Viven en un paisaje duro de la costa de Irlanda, azotada por los vientos y por la crisis. Están retratados en un tono de comedia negra que al principio despista un poco. Cuesta captar el drama que se esconde tras el humor corrosivo que impregna las relaciones del padre James con sus paisanos. “¿Por qué tienes que aguantar tanta gilipollez?”, le pregunta al cura uno de los pocos personajes puros del cuadro.

Hay un tono de cuento moral en el histrionismo de los paisanos del padre James, que funcionan como sombras que van estrechando el cerco al héroe, con una violencia cada vez menos sutil. Cada uno es detestable por alguna razón, pero, ¿es él el asesino?

No, no es esta película sobre la Irlanda rural de la crisis, ni se desprende de ella ninguna tesis sobre los pecados de la Iglesia Católica. No es tampoco una comedia negra sobre un cura con mala suerte, ni es solo el drama de una buena persona enfrentada a un destino fatal. Esta es una película sobre un hombre en toda su complejidad, retratado espléndidamente en su dimensión moral y afectiva. Ni más ni menos. La interpretación del sentido último de cuanto se ha visto queda muy abierta, pero cualquier lectura que se haga de él estará marcada por el rotundo mazazo emocional que se nos ha suministrado.

Ahora que hay tanta película con exceso de metraje y parafernalia superflua, vale la pena decir que en 100 minutos y con pocos medios McDonagh ha hecho un trabajo impresionante.
aldaraviendoleyendoblogspot
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
19 de marzo de 2019
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
A la lo largo de la primera media hora, Calvary, ofrece diálogos acerados, bien construidos, de esos que llegan y convencen. Nos encontramos ante un proyecto bien ejecutado, con la dificultad de su temática poco convencional, y pese a ello, sugerente.

A medida que el tiempo pasa, se agotan las ideas y el proyecto parece hacer aguas, atravesado por historias lejanas que entiendes poco; como si esa magia del inicio hubiera desaparecido dando paso a escenas hilvanadas, sin una consecución dramática.

El final.... en spoiler..
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
LEUGIM
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 10 19 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow