Haz click aquí para copiar la URL

La chica danesa

Drama. Romance Drama basado en la verdadera historia de una pareja de artistas daneses, Einar y Gerda Wegener. La vida de este matrimonio dio un giro cuando Einar sustituyó a la modelo femenina que su mujer, Gerda, tenía que pintar. Cuando los retratos resultan ser un éxito, ella anima a su marido a adoptar una apariencia femenina. Lo que comenzó como un juego llevó a Einar a una metamorfosis inesperada. (FILMAFFINITY)
<< 1 2 3 4 10 32 >>
Críticas 156
Críticas ordenadas por utilidad
16 de enero de 2016
30 de 37 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Por qué se le niega a este drama preciosista y de ritmo pausado la transgresión?. ¿No es una relación tan compleja y hermosa como la de la pareja protagonista un ejemplo del amor que evoluciona, que se rebela contra toda norma o cliché?

"The Danish Girl" se sirve de una fotografía espectacular para contar la historia de dos chicas Danesas. Una de ellas cambió y se adecuó a su género físicamente, mientras que otra vive una transformación más hermosa y difícil, la que lleva a alguien la lealtad incondicional y al amor más puramente destilado.

Vikander borda la oda a esa es gran mujer que ha sido reivindicada por encima de la gran Lilly Elba, que Redmayne hace suya. La verdadera magia de este cuento real esta en la maleabilidad del amor.

Así que yo sí me quedo con el relato y si me he sentido conmovido por el resultado que veo en el cuadro.
funambulista
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de enero de 2016
20 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
La nueva película de Tom Hooper toma un caso verídico sucedido en los primeros años del siglo XX, el de la primera persona sometida a una operación de reasignación de sexo, en la búsqueda de su identidad y estabilidad emocional.

Eddie Redmayne es quien da vida a Einar Wegener/Lili Elbe, un pintor de paisajes que descubre su preponderante lado femenino al atender una solicitud de parte de su esposa Gerda, Alicia Vikander en un rol excepcional, también pintora quien le solicita se calce las ropas de una modelo que no ha acudido ese día a su cita, lo que genera en Einar sensaciones que darán paso a una lucha interna por defender su verdadera identidad.

Lo que empezó como un simple juego entre la pareja, pronto dejará de serlo cuando Gerda descubre que la personalidad de Lili es ahora la dominante por sobre Einar, dando paso a una lucha por combatir ineficazmente la verdadera naturaleza de su esposo.

Con una historia por demás poderosa y con un sinfín de posibilidades narrativas, el director inglés se decanta por evadir los riesgos y recorrer una vereda conocida al dotar a su película de un exceso de situaciones melodramáticas que la emparentan con el lenguaje narrativo de las telenovelas, sin sutilezas y un grueso trazo en la construcción de sus personajes.

Como es ya habitual en su cine, el academicismo se postra por delante en un desfile interminable de bellos planos perfectamente encuadrados e iluminados, en un exceso de preciosismo que atenta contra una historia que se torna plana y repetitiva, y que ante un conflicto que exigía mayor profundidad en su tratado, termina por apenas presentar un esbozo descuidado de la problemática en pantalla que no termina por emocionar nunca.

Mientras que el trabajo de Eddie Redmayne en su composición del atribulado marido que posteriormente sólo dará cabida a la mujer que vive en él, se siente en el límite de la sobreactuación y con recursos que se agotan muy rápido para después volverse simple repeticiones de gestos y posturas y poco introspectiva, en cambio el de Alicia Vikander como la sufrida y comprensible esposa es mucho más profundo y emotivo que el de su par, dejando cojo al relato y con pocos alcances.

Así, Tom Hooper es incapaz de aprovechar una rica historia al ponderar lo estético por sobre lo narrativo, al no saber delimitar a su actor protagónico, con un guión que aprisiona las emociones y desborda un sentimentalismo edulcorado, dando como resultado una película con un destacado diseño de producción pero falta de alma e incapaz de conmover.

http://tantocine.com/la-chica-danesa-de-tom-hooper/
Quique Mex
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
17 de enero de 2016
20 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando empecé con el blog, allá por el 2007, recuerdo haber publicado una noticia sobre La chica danesa… con Nicole Kidman y Charlize Theron como protagonistas. Desde entonces, el proyecto ha ido dando tumbos, con constantes cambios de director e intérpretes, hasta que por fin se ha materializado en largometraje, tal vez gracias a que es ahora, por fin, cuando el tema de la transexualidad está empezando a derribar tabúes y a ganar visibilidad, con producciones de calidad como 'Transparent' o casos tan mediáticos como el de Caitlyn Jenner. 'La chica danesa' llega en el momento oportuno, pero ojalá fuese una película más sugestiva que la que ha firmado Tom Hooper.

El director de 'El discurso del rey' y 'Los Miserables' hace lo que se espera de él, vistos los antecedentes: cuidar la escenografía, enfatizando el preciosismo con encuadres cortacuellos y esquinados marca de la casa. Encaja perfectamente con un guión completamente academicista, que trata, eso sí, con elegancia y respeto el tema de la transexualidad, pero sin profundizar en él, dejando que unos diálogos muy explicativos hagan todo el trabajo; se contenta con enfatizar la feminidad de Lili y su buen gusto para el vestuario, que por otra parte es exquisito y viene firmado por el nominado al Oscar Paco Delgado. Sin embargo, el mayor problema del guión proviene de su enfoque: dirigir el foco de empatía hacia la esposa, Gerda, en vez de a Lili. Tal y como está concebida la película, se siente más lástima por esa esposa que asiste a la desaparición de su marido sin retirar nunca su apoyo incondicional, que por este último, al que se retrata como una persona muy confundida y desdichada, sí, pero también muy egoísta, que nunca tiene en cuenta los sentimientos de la persona que más se preocupa por él.

El problema de empatía se subraya ante el trabajo de la pareja protagonista: la interpretación de Eddie Redmayne es excesivamente afectada, sobreactuada, haciendo uso y abuso de la amplia y tímida sonrisa, del movimiento de las manos y de la exclamación femenina. Cuando ha concluido su transformación, nunca ves a una mujer, sino a un hombre haciendo el papel de dama de principios del siglo XX. Todo lo contrario a Alicia Vikander, la falsa secundaria de la película, pues es igual de protagonista que Redmayne y hace un trabajo mucho más natural, menos forzado y más emotivo, sin tener tantas escenas escritas para su lucimiento como su partenaire. Amber Heard, Ben Whishaw y Matthias Schoenaerts tan solo son satélites en torno a la pareja protagonista con nula entidad propia.

'La chica danesa' tenía todos los ingredientes para convertirse en una de las películas del año, pero su falta de riesgo la reduce a otro plato cocinado para cosechar los premios de la temporada, impoluta en forma pero tan calculada que su capacidad para emocionar se ve mutilada, lo que repercute en que las dos horas de metraje se tornen pesadas y arrítmicas, especialmente hacia el final. La historia de Lili Elbe merecía ser contada, ésta y muchas más, pero la visiblización no debería pasar por tratar el tema como otros tantos melodramas de época, con demasiada autocompasión y escaso espíritu subversivo.
Blanch
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
15 de enero de 2016
19 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Delicado drama sobre el transgénero, basado en hechos reales, que prefiere centrarse en el amor incondicional y el eterno apoyo de una mujer hacia su pareja que en el dolor o el ostracismo que debería sentir una persona que ha nacido en el cuerpo equivocado, a principios del siglo pasado, cuando esto ni siquiera estaba reconocido por la comunidad médica o científica. De hecho, prácticamente los únicos elementos negativos del relato son precisamente los médicos y doctores que diagnostican al protagonista de esquizofrénico y pretenden encerrarlo por loco. Eddie Redmayne está impecable, otorgando la fragilidad necesaria que el personaje necesita, pero la que acaba robando la función es una pletórica Alicia Vikander, en un rol mucho más complejo que el protagónico, hasta el punto de parecer la auténtica estrella del largometraje.

El resultado puede pecar de excesivamente comercial, con una fotografía preciosista y una bonita banda sonora que acompaña a una historia que decide obviar los momentos más peliagudos y no excederse en lo melodramático para poder llegar a la máxima audiencia posible pero es que el tema se merecía una película así. Un filme diseñado para el gran público que ayude a la visualización y normalización de un colectivo que, a día hoy, no deja de cobrarse víctimas debido al rechazo y la incomprensión de parte de la sociedad.

Más críticas en www.hambredecine.com
Grima
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
24 de febrero de 2016
15 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
“Todo el pensamiento moderno es permeado
por la idea de pensar lo imposible”
(Michael Foucault)

Einar Wegener o para ser más exactos Lili Wegener fue la primera persona en relazarse una cirugía de cambio de sexo, un individuo con un notable éxito artístico y un personaje perfecto para Tom Hopper quien le encanta hacer historias biográficas “atípicas”.
A finales del siglo XIX y principios del siglo XX el género era socialmente determinado con rudeza, siguiendo a la teoría Queer actual, el género es el resultado de una construcción social ficticia, o como diría Foucault “la Homosexualidad apareció como una de las figuras de la sexualidad cuando fue rebajada de la práctica de la sodomía a una suerte androginia interior, de hermafroditismo del alma. El sodomita era un relapso, el homosexual es ahora una especie” aunque este no recura necesariamente a prácticas sexuales de penetración.
Y por su puesto, porque si parece claro y se admite la legitimidad de sentirse “otro” independiente de las características fisiológicas, para los transgenero (y habló de los que fueron, son y serán) la construcción de mujer no se desarrolla sobre la base del sexo biológico, la importancia de lo simbólico puede adquirir una nueva dimensión en la ruta de su experiencia; Einar no soñó tener senos o vagina en vez de pene, quería ser esposa, menstruar, ser mama de manera natural. En ese ámbito psíquico se empieza a replantear el mundo preguntas como ¿qué es ser mujer u hombre y en qué se basa esa supuesta identidad de género? Será que como decía Nietzsche “el sexo es una trampa de la naturaleza para no extinguirse?” entonces, ¿qué podemos decir de la sexualidad la cual no está condicionada genéticamente?
Lo cierto es que Lili seguía las ideas feministas de Haraway quien sentía un rechazo a la división sexo/genero por considerar que conduce a terribles consecuencias en la historia del ser humano, el travesti y el transgénero son agentes subversivos no necesariamente diferentes entre sí aunque la sociedad así lo quiera plasmar por el código heterosexual, social impuesto.
De esto nos habla la película, sin duda podríamos tomar sucesos y pensarnos el ser sexuado y/o sexualizado de diversas maneras ya sea dentro de la corriente feminista y sus vertientes, como su contra parte, pero entremos a lo técnico de la obra.
La película es fuerte en los recursos mecánicos, la dirección es elegante, la fotografía, el manejo de cámara, el audio, son elementos dignos y realizados sin duda por profesionales que les encanta la historia y grabar sobre ciertas épocas ya no tan remotas pero tampoco tan distantes, un encuadre del mundo moderno y sus “atributos” occidentalizados.
Lo mejor son los actores, sino fuera por una presión social que traería consecuencias y criticas difícil de curar para Hollywood, el Oscar 2016 a mejor actor se lo debería llevar Eddy Redmayne sobre un Leonardo DiCaprio, muy bueno generalmente, pero por desgracia para él siempre superado por alguien más. Redmayne muestra una mujer en todo su potencial y un hombre “como la sociedad lo impone”, un actor intachable que se convierte en uno de los mejores de esta nueva era cinematográfica, en la película es aún superior cuando los dos personajes interactúan al tiempo. Y claro, habló por Alicia Vikander quien hace de Gerda la esposa de Einar y amiga de Lili.
La historia es lenta y puede aburrir aquellos que no disfrutan de un gesto, y de un tratamiento poderoso, y aunque da mucho sobre lo cual reflexionar y aprender, el guion no es bueno y lo dificulta, aún así es propio para pensar que “la locura no se puede encontrar en estado salvaje. La locura no existe sino en una sociedad, ella no existe por fuera de las formas de la sensibilidad que la aíslan y de las formas de repulsión que la excluyen o la capturan” (Michael Foucault).
Adrián Cantor
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 10 32 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow