Welcome to the Rileys

He de reconocer que no he visto una sola película en la que Kristen Stewart me convenciera. Ni una sola. Personal Shopper, Still Alice, Jumper, Into the Wild..., son muchas las ocasiones en las que me defraudó como actriz. Aquí tenemos una más. Es verdad que el maquillaje que le han puesto no ayuda. Esa especie de acné pre infeccioso no le ayuda, pero debería hacer algo más por salvar su papel. Algo más además de no lavarse el pelo.
Su actuación en alguna escena es ridícula, ridícula más por sus propios méritos que por lo rebotada que sale del choque con Gandolfini. Un gigante. Con este hombre ocurre lo contrario, incluso en películas flojas como Enough Said, se desenvuelve con un empaque que hace honor a su tamaño. Un gran actor que se fue, pero nos deja aquí otro buen hacer en esta cinta de Jake Scott del que lo único que he visto ha sido el vídeo de R.E.M.

La película está bien estructurada alrededor del complejo papel que Gandolfini ejecuta con maestría. Un papel poliédrico de un personaje que no se encuentra y no sabe muy bien qué dirección tomar. Aunque sabe, y eso es muy importante, más en los tiempos que corren, hacia dónde no tirar. Con esa premisa ejecuta un sincero y dramático cambio radical que no solo le hará encarrilarse de nuevo, sino encarrilarse a quienes le rodean.
Solo un pero, lo que me ocurre siempre con las películas de profesores y chicos y chicas malotes. ¿Cómo consiguen que se conviertan en corderitos en lo que tarda un fundido en negro? Aquí me pasa igual. Pero esto no me estropea la percepción general de una historia bien contada, interesante por la evolución del personaje principal, por el minimalismo de la apuesta, incluso por su escasa banda sonora.

Tiene algo a derrota esta película, al pesimismo que se ha instalado en la forma que tienen de ver su país los cineastas independientes estadounidenses. Y esa mirada pesimista beneficia a la historia, no le beneficia tanto la sensación de que es una historia ya vista aunque contada desde otro ángulo. Legítimo en todo caso.
Un saludo. A cuidarse.

La película comienza demasiado lenta, luego parece que levanta vuelo y otra vez vuelve a caer en lo que fue en un comienzo. Si bien mientras el tiempo pasa, la historia de la familia Riley te va envolviendo dentro del film, esperas que algo pase pero eso nunca llega. Welcome to the Rileys solamente nos cuenta la historia de una pareja en crisis luego de que su hija pierda la vida en un accidente. Ellos conocerán a Kristen Stewart, una jovencita que ellos la ven como a su propia hija y querrán sacarla de la prostitución. La fotografía es correcta y las actuaciones también pero no más que eso, la verdad que no se donde salió el 6,6 de promedio en filmaffinity, quizás sea por la baja cantidad de votos que tiene esta película.
Si les sirve de algo, no me dormí al verla y tampoco me aburrí, pero para mi no pasa de esa nota, ya que esperas algo más que nunca pasa y eso te deja un sabor raro cuando terminas de verla.

La película no es totalmente mala, entretiene eso no se duda, en todo momento mantiene pendiente... pero hay algo que no acaba de convencer, y no se muy bien que es, puede ser que la historia no sea la gran cosa, puede ser que el personaje de la striper no pegue... o hasta la dos cosas jaja.

Hay buenos personajes, bien armados e interpretados... aunque a veces no convencen del todo (como que exageran), sobre todo el de "la chica vampiro" (independiente de todo no se le niega lo hermosa) que se ve a veces forzado o le falta impacto, o algo... no se mucho de actuación. La historia es como muy simple y no llega a mayor cosa, o de pronto uno espera mucho... al final uno queda como en neutro, sin saber que pensar, pero viéndolo objetivamente la película no aporta nada y da la misma verla o no, y habiendo otras cosas por ver pues seria mejor no verla, o al menos yo no la recomiendo, creo que es muy olvidable, aunque si no se es exigente de pronto guste.

James Gandolfini y Melissa Leo interpretan a un matrimonio que vive cada día el sufrimiento de haber perdido a una hija de 15 años. Ella se encierra en sí misma, y él intenta salir a flote. El hombre conoce entonces a una adolescente (Kristen Stewart) de la misma edad de su hija fallecida, que trabaja de stripper-prostituta y se propone ayudarla a organizar su vida.

Esta película tiene dos graves problemas:

1.) Es difícil creerse los personajes. Gandolfini estaba muy creíble en su papel de matón sádico en "Amor a quemarropa", pero no da el pego aquí como padre postizo. Tampoco convence en absoluto la aspirante a vampira de "Crepúsculo" Kristen Stewart en este rol de stripper. No, por muy barriobajera que pretenda aparentar ser, se la intuye demasiada clase y educación. No convence. Y por si fuera poco, falla también la supuesta química entre ambos. Se nota que en realidad no conectan entre sí.

2.) Sobra minutaje. Hay ratos en los que no sucede absolutamente nada, y la historia no avanza.

Aunque la película sea demasiado larga, pienso que se trata de una buena historia, pero les falló estrepitosamente el casting. Ni Gandolfini pasa por un maduro paternalista, ni Stewart tiene el desdén que debería tener su personaje; y Melissa Leo sobreactúa en su rol de esposa hiperamargada. Es una pena, porque con otros actores más adecuados a estos papeles, la película hubiera funcionado mucho mejor.

Recomendable solo si te interesan los dramones de buenas intenciones y no eres demasiado exigente con las interpretaciones.