Al son que me toquen bailo

Al son que me toquen bailo tenia buenas intenciones en ser una buena película colombiana pero lamentablemente eso no sucedió esto se debe a la historia tan bacía y mal escrita ya que se quiere mostrar una relación romántica con un estilo muy interesante pero que se pierde por completo al darle toda la importancia al estilo de baile en lugar de mostrar esa historia romántica profunda.
Las interpretaciones son bastante malas ya que ciertos actores y actrices como Variel Sanches, Cesar Mora y Maria Sinisterra hacen gesticulaciones, hablan y bailan de una manera tan exagerada que cada escena se vuelve ridicula.
Las escenas de baile resultan ser cíclicas y de tanto verlas se vuelven difíciles de ver, aunque la musca que las acompaña son bastante bailables y están correctamente sincronizadas con el baile.
La cinematografía es muy bella y llena de estilo ya que se usan colores brillantes y eléctricos que transportan a la audiencia a una verdadera parranda.

El contar la historia de una persona a partir de la música que ha escuchado a lo largo de su vida, es una idea bastante interesante, pero el resultado no es tan brillante; la historia en si, es agradable, pero si vamos un poco más allá, nos damos cuenta que busca mostrarnos un trozo de la sociedad (el más escaso), que posee una buena cantidad de recursos económicos, algo que no se apega a la realidad Colombiana, buscando crear nostalgia en quienes vivieron tales épocas, pero con imágenes totalmente distorsionadas.

La película tiene lugar en su mayoría en la capital de país, lo que da cuenta de una narración a partir de la cultura predominante y de manifestaciones culturales ligadas al baile y a la música de la ciudad principal. Si bien no cuenta muchas otras experiencias y formas de sentir y vivir la música y el baile en Colombia, es una perspectiva acerca de algunas formas de vida en la capital. En lo personal, la película materializó las historías de mis padres y mis abuelos respecto a como eran las fiestas en aquellos tiempos al recurrir a diferentes elementos que expresan la alegría generada por la música y el baile. La recomiendo en complementariedad con películas que proporcionen otras perspectivas acerca de otras formas de vida y experiencias en Colombia.