La chica de las bragas transparentes

El gusto de Jess por el noir está desde el principio de su carrera con La muerte silba un Blues o Rififí en la Ciudad con toque de mayor belleza formal y corte más clásico. En La Chica de las Bragas Transparentes, mucho mejor el título español y menos gratuito de lo que parece, vemos porque le gusta tanto a Jess obras como The Long Goodbye de Altman, un noir posmoderno con un detective implicado más en los azares de la investigación que en un trabajo meticuloso y lógico a lo Sherlock Holmes (Ese detective de Altman podría ser también el Doc Sportello de Pynchon y P.T. Anderson en Inherent Vice), Así el detective franquiano Al Crosby (en este caso el apellido no es Al Pereira, el recurrente detective de Jess aunque el nombre sigue siendo Al) es un "chuloputas" con una conciencia y un método particular que vehícula una peli erótica donde el sexo y sus escenas son las principales protagonistas.

En los ochenta con poco dinero y notándose su peor calidad formal pero con una libertad cada vez mayor, el bien más preciado de Jess, te saca de la manga unos temas modernos, queer y muy abiertos de mente y de "piernas". Otra peli cíclica que termina como empieza muy del gusto de Jess al igual que El Sexo está Loco