La pornografía tiene muchos recovecos y si bien Girlhouse es solo un slasher, durante los primeros 40 minutos nos muestra todo, los empresarios, las chicas, los usuarios, interesante ver como tantos son capaces de pagar muchísimo dinero solo por ver un show privado de esas chicas, de hecho la industria del porno y todas sus vertientes, se han convertido en toda una industria en auge que se ha sabido aggiornar mucho antes que lo que el cine comercial, la televisión y la música, pudieron hacerlo, pero bueno acá se analiza un slasher, no un documental sobre el porno virtual.
Como slasher, es bastante mediocre, tiene todos los clichés, psicópata habilidoso, muertes violentas y de una extravagancia absurda, mujeres desnudas corriendo, incluso está la clásica escena de la chica siendo perseguida por el asesino enmascarado por el bosque.