El viaje de Chihiro

Al señor Carlos Boyero y a otros tantos que sueltan comentarios ignorantes y prejuiciosos hacia la animación japonesa les diría que se preocuparan un poquito en conocer todo ese mundo antes de abrir la boca. Estoy hasta las narices, y perdonad la expresión, de que llevemos décadas vapuleando ese tipo de animación como si fuese el anticristo sin dar más razones que la cacareada violencia, lo que indica que no se entiende ni se sabe que el «anime», así como el «manga», es variado y de múltiples géneros, contenidos y temáticas. Basta ya, hombre.

En fin, que esta crítica es para hablar de «El viaje de Chihiro» y ya veis por dónde me he ido. Vuelvo en mi y a Miyazaki, quien dirige y escribe el guión de esta producción adorada por crítica y público. El punto de partida, aunque poco trabajado, se acepta: sin que sepamos por qué ni de qué forma, unos padres con su hija se adentran en lo que suponemos, ya que nadie nos lo explica, el mundo de los espíritus, donde los progenitores caerán bajo un terrible maleficio. A partir de entonces, la pequeña e inmadura Chihiro tendrá que apañárselas sola (o no tanto) para salvar a sus padres, a ella misma y volver al mundo real.

Sus máximos defensores no pueden cegarse tanto y no reconocer que la película tiene un pésimo guión. Como he dicho antes, quí no se explica nada ni se ahonda en ninguna trama en concreto, lo que es necesario para que nos inmiscuyamos en la historia y no vayamos a tientas sobre lo que ocurre, cómo ocurre, por qué ocurre y qué puede ocurrir. El Sin Cara, ¿qué aporta? Yubaba, ¿es buena o mala? ¿Qué horripilante idea es esa de que los dioses vayan a un hotelito a que les bañen?; qué forma de destruir el mito. Es más: estos dioses, según Haku, son muy peligroso al principio, así que al final, ¿a qué se debe ese apoyo a Chihiro? El propio Haku, ¿por qué se va a acordar tanto de una niña que conoció hace años, cuando seguramente habrá conocido a otros millones de niños a lo largo de su existencia? ¿Por amor? ¿Un flechazo, o qué? ¿Cuándo se le va a ocurrir a Chihiro preguntar cómo romper el hechizo de sus padres? Esta niña, ¿no se extraña o maravilla por nada? ¿Cómo sabe la solución a todo, si la película no te ha dado indicio alguno para saber, por ejemplo, quién es el dragón o de qué forma reconocer a los cerdos...?

El posible simbolismo, que no veo tan abundante como algunos afirman, queda en un segundo plano cuando lo aparente te produce tan poco impacto. Yo estaba siempre esperando que pasase algo definitivo, que la historia se centrase, que resolvieran mis dudas, que salieran del hotel, cuyas aventuras son irrelevantes y se extienden sin ton ni son, y toda la historia cobrara sentido. Al menos, podemos aprovechar el mensaje, que tampoco es para tanto, de responsabilidad y compromiso con los demás, y por supuesto la animación de Miyazaki, que es fluida y alegre.

A mi me ha sabido a muy poco.

Como nos gusta ver bichitos. Yo paso las horas muertas en el trastero de mi casa. El viaje de chihiro es como mi trastero pero más colorido y argumentado. Desde hoy guardaré ahí mis fantasías. No se la pierdan, amantes de los bichitos, porque aquí hay millones de ellos, de todos los tamaños y con multitud de movimientos, una sabrosa gama de formas y figuras en movimiento. Un 10 como una casa.

Estoy sorprendido por las puntuaciones que obtiene esta película, Veamos concedido que Chihiro es un increíble desfile de personajes y de fantasía, el cuidado conque miyasaki construye sus trabajos son admirables, pero y donde esta el argumento? donde quedo la moraleja?, todo queda en ejercicios de fantasía sin sentido y con un personaje principal antipático. ....No se que paso con Miyasaki (dentro de la cultura del Anime Miyasaki es como Coppola o Kubrick).
En esta oportunidad le entrega a occidente la mas baja de sus obras y ellos le rinden pleitesía. Ah eso si son memorables ejercicios de fantasía pura, pero sin pies ni cabeza. Un ejemplo de Maestría de Miyasaki es Mononoke Hime o Tonari no totoro, o como olvidar la aun insuperable Nausicaa, del valle del viento, espectacularmente filmada y con un hondo mensaje de amor, amistad y de preservación de la naturaleza.
Para que una película sea imperecedera en el tiempo no basta q sea súperfantástica, ni que sea para superinteligentes, ni súperrománticas, ni súperefectista.....tiene que emocionarnos, identificarnos, enternecernos, ser inteligente, dejarnos huellas en el tiempo solo asi puede ser considerado un excelente film, y lamentablemente Chihiro solo se quedo en la fantasía clichera, lastima.

Lo cierto es que Chihiro me produce una sensación extraña. Se me antoja parecida en ciertos niveles a Amelie. Es decir: ella está allí, inocente y sola, en un mundo existente, pero imaginario, del que se mantiene a parte. El viaje de Chihiro es de sobra la mejor película de animación de la Historia del Cine. Olvídense de la factoría Disney porqué Miyazaki ha puesto de moda las películas de animación que realmente son para todos los públicos, es decir: para niños y adultos.

La belleza de las imágenes se acoplan a un guión perfectamente estructurado, donde la originalidad y la extrañeza se imponen por delante de la lógica, que parece esperar en el mundo del que ha sido alejada Chihiro. A partir de ahí brujas, héroes, fantasmas glotones y bebés gigantes se toparaán con la heroína en su viaje parea volver. El mensaje parece ser obvio y ñoño; no lo es. Para los ñiños ése es el mensaje: el de la autosuperación y el de la madurez de una niñita ante una adversidad. Para los adultos, la pelicula puede ser una metáfora de la vida misma, en la que cada persona está alejada de los demás, formando una sociedad donde solo unos pocos para interesarse por algo más de lo que está a más de un metro cuadrado de donde están aposentado sus pies. Eso y que a veces la realidad supera la ficción, claro.

Así pues, El viaje de Chihiro es una delicia para la vista y para el oído. Una auténtica obra maestra creada por uno de los grandes. Valoración: 10

¿Nunca habéis querido soñar despiertos? Esto es el viaje de Chihiro una historia cargada de magia, emotividad, fantasía... la pequeña Chihiro nos enseña un mundo donde todo tiene cabida y en el que muestra que las cosas que en un primer momento pueden ser terroríficas pueden acabar siendo las cosas más sensibles y maravillosas del mundo, y con las cosas bonitas puede ocurrir lo contrario. Todo esto está compactado con una magistral banda sonora y una fotografía y una calidad de dibujos impresionantes. No obstante, la cinta con pequeños detalles hace vislumbrar que estamos ante un gran film y es una historia que consigue emocionar como pocas.
La película es una de las mejores cintas en animación que se ha hecho nunca, y que además, para más mérito, ha nacido y competido en cartelera con disney y demás compañías que han dejado en olvido sus raíces de animación con tanta animación digital generada por la llegada del ordenador a este género, que abarata costes pero pierde su esencia fundamental, el dibujo. Por tanto, la animación tiene a esta película como una de las más importantes nunca creadas y cuyos creadores, los mismos que Heidi y Marco, han demostrado que no todo esta perdido en lo que animación se refiere como ya hicieron además con la anterior película La princesa Mononoke, notablemente evaluada.
En cuanto a el guión no deja de ser excepcional para tratarse de una película de este género y consigue hacer que empecemos a considerar estas películas como films más que infantiles debido a la complejidad y calidad de algunas imágenes y situaciones en si planteadas.
Un 10 película de culto sin ningún tipo de duda. IMPRESCINDIBLE DE VER!!!