Prison Break: Evasión final (TV)

A estas alturas poco cabía esperar de este final comercializado directamente para DVD, no emitido siquiera por la televisión, cuando lo que cuenta es lo más importante de la serie se podría decir: el destino de su protagonista.

Ya todo suena a excusa barata para seguir haciendo leña de un árbol que cayó hace tiempo. y aún así esta suerte de cierre a la serie va un paso por delante de lo que ha sido toda su última temporada: aunque, desgracidamente, un paso por delante de nada es nada.

Pero no te queda la sensación de que te timan, ves que la serie llamada "Prison Break" termina con una huída de prisión, tal y como empezó, y ves que el destino de Michael Scofield encuentra su final en el sitio donde empezó: en una cárcel.

Porque las películas carcelarias siempre nos han aportado emoción sin límite y tensión extrema, y porque "Prison Break" sorprendió con una primera temporada brutal, habría merecido quedarse ahí. Aún así, y si se dispone de una hora y media y se han seguido las pobres desventuras de estos dos hermanos y grupo de reclusos una vez lejos de las murallas de Fox River, vean este "Final Break".

Somos libres al fin. Libres de esta estafa que se empeñaron en seguir llamando "Prison Break".

¡Qué bien, un final largo en el que seguro que te explican todo lo que ha pasado! Eso es lo que pensé yo cuando me enteré de la creación de esta película, “Prison Break: The Final Break” y creía que por fin daban un sentido al sinsentido (valga la redundancia) en que se había convertido esta serie desde hacía tres temporadas (o sea, desde que acabó la primera) dándole una terminación medianamente digna, en vez del último capítulo, que no sirvió más que para reenredar todo y dar más dolores de cabeza al espectador que deseaba que ya se acabase. Un final demasiado acelerado, por cierto.

Sin embargo, aquí lo que tenemos, no es más que una excusa para crear un nuevo “Prison Break”, una temporada completa… reducida a 80 minutos donde solo ocurre más de lo mismo, y todos sabemos cómo va a acabar. Las situaciones son similares a las ya vistas, solo que todo ocurre mucho más rápido, lo único que tiene cabida es la acción pura y dura y, por supuesto, todo está mucho menos desarrollado.

Eso sí, al menos es entretenido, muy ágil y con alguna sorpresa, aunque lo sorprendente realmente sería que no hubiera sorpresas, dejaría de ser Prison Break. Esto es lo que le salva el aprobado, pero vamos, que si se lo hubieran ahorrado, no hubiera pasado nada.

297/17(26/09/11) Esta serie debió morir con la segunda temporada, de hecho estaba muerta, pretendieron hacernos creer que la 3ª y 4ª era la misma pero a mí no me engañaron, el muerto solo se estaba pudriendo, no lo respetaron, lo profanaron, estuvieron jugando con él como si fuera una piñata a ver si atraían a incautos que la confundieran con un vivo, pero su descomposición y fetidez no se podía ocultar, y cuando por fin parecía que le habían dado sepultara, aunque muy, pero muy tardía, habían dado un final cuasi-místico a Michael Scofield, pues van y lo desentierran para darnos este pusilánime broche espero que final para lo que fue un soplo de aire fresco para la pequeña pantalla. El guión es un sinsentido desde el principio, el modo tan chusco y forzado con que meten a Sara entre rejas es patética la falta de ideas, luego sin juicio ni nada es metida en, oh casualidad, en la misma que Gretchen, T-Bag y El General, un despropósito que atenta contra el más mínimo sentido común, luego el presidio está repleto de tópicos, incluso da la impresión de confusión, pues al principio parece que la banda de la lesbiana son malísimas, luego Sara no se sabe porque se une a ellas, tanto es así que se marca a fuego su símbolo, para después enemistarse con ellas, un insulto a la inteligencia, es como si un guionista no hubiera sabido lo que hacia el otro y llegaron hay que unir las partes, y si no encajan da igual, el público son unos omnívoros que se lo comen todo, voy más allá´, sospecho que este telefilm está hecho con elementos basura descartados para la primera temporada, y aquí sin vergüenza alguna le han dado salida, después viene el caricaturesco plan de fuga, donde el nivel mínimo exigido de calidad es brutalmente meado y cagado las trampas y las lagunas son la historia interminable donde crees que el absurdo no se puede superar pues sí, lo que viene después lo supera, la previsibilidad de los personajes es risible, coronado todo con un final sensiblero-manipulador mil veces visto en cine. Es un film que prostituye el gran recuerdo de la 1ª y 2ª temporada. Recomendable a los incondicionales de la serie. Fuerza y honor!!!

Prison Break: The final break es un innecesario intento de rematar la serie. Para ello han hecho este telefilm que se sitúa en el tiempo entre el final de la trama de la cuarta temporada y el epílogo que cuatro años cierra definitivamente la serie.
Cuando parece que todo ha acabado Sara es detenida y encarcelada acusada del asesinato de uno de los personajes de la cuarta temporada de la serie. Lógicamente Michael Scofield idea otro plan para sacarla de la cárcel. Esta vez no solo se trata de su novia, sino también del hijo que esperan.
Esta película de escasos ochenta minutos, aunque entretenida, ya ha perdido completamente el pulso, que incluso en sus peores momentos tenia la serie. Es una película mecánica, eficaz y que por lo menos nos da una visión diferente de ese epílogo que cerraba la serie. Es quizás este su mayor punto de interés.
Con The final break nos despedimos definitivamente de unos personajes que durante cuatro temporadas hemos seguido con interés decreciente, pero que siempre han conseguido mantenernos atentos a la pantalla, incluso en sus momentos mas bajos.

Positivo: Las dos primeras temporadas de la serie.

Negativo: Críticando a los dos últimos capítulos de la serie, veo que el directo Kevin Hooks a buscado la manera más fácil de acabar la serie que es, engañando al espectador. Tras cuatro años viendo la serie, veo una verguenza como ha tenido que acabar, con una americanada que les gusta a Hollywood. Esto es una falta de respeto a todos los espectadores que han estado cuatro años de su vida viendo la serie para que acabe así.