Formula 1: Drive to Survive (Serie de TV)

Que un documental preste atención a la figura de Romain Grosjean es de elogiar. No quiero cebarme, pero Romain ha sido capaz de encadenar tal cantidad de "combos" o cabriolas que pasará a la posteridad. No sólo ha sido capaz de estrellarse tras el safety car, llevarse por delante a compañeros y rivales, sino que incluso (ayer día 12 de julio de 2019) incrustó su morro contra el muro de la salida de boxes de Silverstone nada más desactivar el limitador de velocidad. Él y Jan Magnussen... ¡Kevin! son la salsa de la F1 y solo por eso cualquier aficionado debe tragarse este documental. Yo soy de los viejos aficionados a la F1 y no puedo dejar de recomendar este mejunje de capítulos que son como un Sálvame Deluxe que podría tragarse hasta alguien que de la F1 solo sepa que son coches dando vueltas a un circuito. Tiene algo que te engancha. Y eso aún faltando la colaboración de Mercedes y Ferrari, pero no los echo de menos. Lewis Hamilton se ha convertido en una versión "cool", edulcorada y "chill-out" de lo que creí que sería en el futuro. Sebastian Vettel es aburrido por definición, y cuando deja de serlo solo lo es para quedar en evidencia por su mala leche. Bottas es... bueno, es como Kimi pero en aburrido. Y Kimi pasa de todo.

Por eso me parece perfecto que dediquen episodios a los equipos que se lo juegan todo cada año, incluso su supervivencia. Ver la pelea Ocon-Pérez y todo lo que la rodeó es divertido, igual que los comentarios del pesado de Gunther Steinert acerca de sus pilotos o del resto de los equipos. Alonso en su linea, no deja a nadie indiferente. Verstappen y Ricciardo son el huevo y el aceite. Y el pesado de Christian Horner, con esa cara de resabido que cree tener todas las respuestas. Me encanta. Ojalá el del próximo año mantenga el nivel. Documentales sobre F1 hay y habrá un montón, pero este resumen de cada temporada sería perfecto para los que disfrutamos viendo a esos fenómenos tras las bambalinas liándola con un micro delante.

Como toda obra cinematográfica, éste documental/reality show de la fórmula 1 tiene aspectos “positivos” y “negativos”. El principal lado negativo tiene que ver con lo superficial que es. Dicha afirmación se basa en 2 argumentos:
El primero es que el show habla muy poco sobre todo lo relacionado con lo “técnico” del deporte. Obviamente ningún espectador espera que la serie haga énfasis en el funcionamiento de los motores y de sus componentes, pero considerando que muchos ya saben cómo termina la historia, resultaría interesante que pudieran aprender algo acerca de, por ejemplo, como son pensadas las estrategias, que es lo que hace que las mismas varíen, quién las planea, etc. Lógicamente, la serie no debe orientar todo su enfoque en este aspecto, pero para darle un mínimo espacio se podrían quitar algunas partes que indagan en la vida privada de los pilotos y directores ejecutivos, que por momentos resultan aburridas, aunque es verdad que a veces otorgan mucho a la historia y a la conexión entre espectadores y protagonistas.
El segundo argumento es que la serie omite muchos sucesos significantes. Es entendible que sus creadores quieran darle más importancia a los equipos que batallan en la zona media, pero… ¿Realmente no va a ser mencionada la victoria de Kimi en Estados Unidos que tanto furor generó en el deporte? ¿Y la pelea por el campeonato entre Vettel y Hamilton? También es pasada por alto la temporada de Lando Norris en 2019 que, a pesar de no haber conseguido tantos puntos, merece un poco de atención, al igual que el año de George Russell. La serie ignora completamente el hecho de que el piloto de Williams haya superado en todas las qualis a su compañero de equipo, y lo mismo sucede con Alonso y Vandoorne. Esto me lleva a otra cosa importante: el show omite las magnitudes y estadísticas: no deja en claro lo desastrosa que fue la última temporada para Williams (En lineas generales, el capítulo de Williams fue de los más decepcionantes), lo mucho que Sainz mejoró al igual que Mclaren, lo mala que fue la relación profesional entre los pilotos de Ferrari, que culminó en el accidente de Brasil (otro episodio decepcionante, pues los productores decidieron que el gran premio de Austin fue el climax de la relación de ambos pilotos de la escudería), cuánto mejoró Max Verstappen en 2019 en comparación con su actuación en 2018, entre otras.
Pero a pesar de todo, la serie cumple. ¿Por qué? Fácil: es muy entretenida. Realmente logra que se disfrute cada capítulo, incluso si se sabe como va a terminar. Esto es gracias a la forma en la que está filmada y editada: consigue que parezca una película, una historia ficticia, aunque en ocasiones esto genere que la realidad se vea distorsionada. Captura muy exitosamente los momentos importantes tales como los instantes previos a una carrera, choques, etc. Hace que el espectador se conecte con los pilotos y que sienta lo mismo que ellos cuando dichos momentos ocurren, que experimenten su decepción al tener que abandonar un gran premio, su felicidad al conseguir un podio y sus nervios al esperar que se enciendan las luces.
Por otro lado, hay que destacar como el show brinda información sobre lo que sucede a lo largo de la temporada a partir de las relaciones entre miembros de un equipo y personas de diferentes escuderías. Gracias a la filmación de conversaciones entre directores ejecutivos, pilotos e ingenieros, se puede apreciar la verdadera opinión de las personas involucradas en la fórmula 1, lo que ayuda a dar un mayor entendimiento acerca de las decisiones que ellos toman. Esto logra quitarle un poco de esa "superficialidad" antes mencionada al documental.
Pero fuera de lo bueno y lo malo que pueda existir, la verdad es que casi todo lo que se ve en los 20 episodios es completamente épico y emocionante, y eso es algo que supera a cualquier crítica que se le pueda hacer a “Fórmula 1: Drive To Survive”.

Excelente serie/documental/reality sobre el mundo de la F1. El 95% de los espectadores lo podrán disfrutar, porque es una serie amena, que tiene mucho dramatismo, suspenso, y llena de momentos en los que te llevas las manos a la cabeza (prácticamente en todos los capítulos) y además nos ilustra mucho sobre esta competencia. El apartado técnico es impecable. Cámaras, edición, sonido, todo es de 10.
Para el 5% de la población que son fans y expertos de la F1, que conocen todos los corredores, todas las estadísticas, todas las escuderías, su historia, su palmarés, y que siguen todas las temporadas y todas las carreras, pues que se dediquen a su pasión y no a escribir comentarios sobre series en filmaffinity, que esto es para los que nos apasiona la cinematografía.

La Fórmula 1 no es que atraviese en esta era una etapa de oro precisamente, pero creo que este documental va a ayudar a mantener la afición e, incluso, a atraer nuevos aficionados.

Si bien es cierto que hay historias que se cuentan aquí (la lucha HAAS-Renault por el cuarto puesto de la clasificación de constructores, los pilotos españoles...) que no atraen demasiado, hay otros que sí como el cuarto capítulo que relata las tensiones entre Red Bull y Renault.

Me ha gustado sobre todo que no haya ido a lo típico de "el glamour de la Fórmula 1" y demás tonterías que no tienen mucho que ver con lo que es realmente importante, y que en estos diez capítulos muestran bastante bien como las tensiones, las alegrías, las tristezas, los trabajos en las fábricas, etc.

Si hubiese ido a historias más importantes (hubiese ayudado a que Ferrari y Mercedes se hubiesen implicado en el proceso) incluso podría haber estado mejor.

*Calentando motores

En el primer capítulo de la tercera temporada de la Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix tenemos como protagonista a la pandemia del coronavirus y todo lo que ocurrió en la primera carrera en el Gran Premio de Austria que al final como ya es sabido se tuvo que cancelar. En este primer capítulo hay mucha carga de tensión y se demuestra a través de los integrantes y las propias escuderías. Un capítulo que pone los pelos de punta por todo lo que el virus ha paralizado; la Fórmula 1 por rápida que pueda llegar a ser, lamentablemente, también tuvo que cerrar durante 10 semanas.

La Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix se compone de 10 capítulos. El primer capítulo está dedicado a cómo afectó la pandemia del coronavirus en la Fórmula 1. El segundo capítulo nos centramos en la rivalidad de Red Bull y Mercedes en la primera carrera del campeonato. El tercer capítulo habla sobre la relación con Valtteri Bottas y su papel en el equipo de Mercedes. El cuarto habla sobre Ferrari y sus pilotos. El quinto sobre Daniel Ricciardo y su nueva postura ante Renault.

Continuamos con el sexto que se centra más en Pierre Gasly que tiene cuentas pendientes con Red Bull. El séptimo de caballería se centra en la escudería Renault y su situación actual dentro de la temporada. En el octavo capítulo y va con sorpresa, tendremos al español, Carlos Sainz como protagonista. El penúltimo capítulo, habla sobre un fatídico accidente y pone el foco en dos carreras muy dramáticas. El último, y con el que se despide la temporada 3 de la Fórmula 1 en Netflix, habla sobre Racing Point y su alto nivel en la temporada.

Una temporada cargada de emociones de todo tipo. Críticas, confrontaciones, enfados, cambios de pilotos, accidentes, coches rápidos, malas decisiones, sentimientos encontrados, esfuerzo, constancia, frustración y sobre todo mucha velocidad. Además en esta temporada Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix hay muchos mas detalles técnicos que enriquecen aún mas si cabe la manera con la que el equipo técnico rueda, narra y observa la Fórmula 1.

*Buenos conocidos y nuevas caras

Vemos ya caras conocidas y nombres que empiezan a familiarizarse para los que no son fans acérrimos de la Fórmula 1. En las dos anteriores entregas de este gran documental seriado ya vimos a algunos de los integrantes de la Fórmula 1 pero en esta temporada de la Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix se extiende para con los mas grandes además de analizar mucho mas en profundidad a cada uno de los equipos y la función que ejercen en este campeonato.

Tenemos a los directores ejecutivos de las escuderías más importantes e influyentes de la Fórmula 1 como lo son, Christian Horner, Toto Wolff o Mattia Binotto. Los tres son los mejores dentro de la competición con sus respectivos equipos que demuestran año tras año estar al máximo nivel. Además también tenemos a la dupla de Mercedes, Lewis Hamilton y Valtteri Bottas, que se unen este año para participar en la serie de Netflix y poder hablar largo y tendido de sus logros y frustraciones.

Todos nombres conocidos de las dos temporadas anteriores y todos teniendo su momento y protagonismo dentro de los distintos capítulos de Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix. Renault, Racing Point, Hass o Ferrari son otros de los equipos mas protagonistas en esta tercera temporada. Otra de las buenas noticias es que la duración de los capítulos ha aumentado considerablemente con respecto a sus predecesores. Rondan una media de unos 38 minutos. Una buena media para contar historias mas compactas donde haya un mayor recorrido narrativo por los distintos equipos y pilotos. Esto es mucho mejor que en las dos temporadas anteriores. Hay mucha mas narrativa visual y sonora. ¡Mucho mas drama, historia y adrenalina!

*Pura adrenalina y a toda velocidad

La edición se ha enriquecido mucho mas en base a las dos temporadas anteriores. En esta ocasión Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix se ha intensificado el esfuerzo y se nota mejoría en hacer bloques imponentes donde el montaje es en todo momento increíblemente poderoso, rápido y dinámico. Añade tensión, emoción y ganas de conocer mucho más de cerca lo que se cuece en torno a la Fórmula 1.

En esta temporada tenemos nuevas cámaras y ángulos donde ver mas de cerca lo que sienten los pilotos en la carrera. Perspectivas únicas dentro del coche para subirnos aunque sea digitalmente a un coche de la Fórmula 1. ¡Pura adrenalina! El sonido es impecable a pesar de ser inmensamente complicado por las diversas situaciones que se dan en cada carrera pero sin embargo aprovechan dicha vía y potencian aún mas el ambiente sonoro como parte fundamental y clave para que esta temporada 3 sea la mejor de todas.

La música, otra parte básica e importantísima, es mucho más “rompedora” haciendo en ocasiones de transición o poniendo el clima y atmósfera correcto para poner más o menos gravedad en lo que se está contando. ¡Un gran trabajo! Las entrevistas también son otro punto fuerte donde poner el foco de atención dado que se establecen muy bien narrativamente en el transcurso de la serie, Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix, para dar un hilo conductor con una buena trama que enganche. Tiene que haber drama, tensión y pura velocidad. ¡Eso es lo que nos gusta!

*Conclusión

Sin duda es increíblemente fantástica esta tercera edición de Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix. No hay nada malo que decir. En cada una de las tres temporadas han centrado la mirada en diversos aspectos y cada uno de ellos resueltos de forma diferente dando riqueza y soltura a lo que se cuenta.

No obstante, en este caso y centrándonos en la tercera parte de la serie documental, Fórmula 1: La emoción de un Grand Prix, narran nuevos puntos de vista con nuevos recursos visuales y sonoros. Se nota y mucho, que año tras año van teniendo mas confianza en cómo contar todo lo que sucede en la Fórmula 1.

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Escrito por Cristian Urriaga