El suspense es cuando el espectador sabe menos que los personajes, como cuando se aproxima un latente peligro y el personaje de la historia no lo capta, dándose así el antedicho suspense. El tema de La Intérprete de Sydney Pollack nos conduce hacia los entresijos del thriller más dramático y los asuntos de materia gubernamental, en este caso un dirigente extranjero es amenazado de muerte en la O.N.U. y escuchado por el personaje de Nicole Kidman en este organismo internacional. Nicole Kidman y Sean Penn se involucran en este film idóneamente con excelentes discursos y cuestiones, además con una espontánea naturalidad en sus actuaciones que proceden a subir a lo más alto esta película y mantenernos vigilantes en cada toma de segundo filmado. Pollack concibe aquí, un filme bien engendrado de prósperos y adversos sucesos que conecta apropiadamente con la exposición de los hechos, con una narración apta para el público menos atento que seguirá los acontecimientos con fácil fluidez. Por lo tanto, todo indica que el entramado del film nos costeará una gran razón para visionar esta grandiosa cinta de verídico suspense. Una película con grandes interpretaciones para analizar minuciosamente, ya que no conllevan ninguna dificultad porque estamos ante amplios actores de muchos registros y bastante bagaje a sus espaldas. El manejo cauteloso de Pollack detrás de la registrable cámara, nos muestra una ejecución fílmica con mucha astucia, que nos ofrece un plan secreto sin manipulaciones hasta el resultado final y que supone un enorme beneficio para el espectador con ganas de intriga y suspense criminal.