Boss (Serie de TV)

En el punto en que estamos en el mundo de las series, tenemos que preguntarnos dentro de las 'tops', qué aporta cada una. En este caso tenemos que preguntarnos qué aporta Boss que no haya mostrado ya en su día The Wire, Los Sopranos o incluso Boardwalk Empire. ¿Y por qué esta pregunta? La temática es nueva, la política en su profundidad, pero lo importante de verdad es el planteamiento. Me explico: cuando vemos Homeland, la idea de la serie es clara, un thriller intenso. Pero Boss carece de este aspecto: a veces se adentra bien en la trama política, otra veces parece un drama mafioso y otras veces un drama familiar. Es decir, no hay un tema vehicular capaz de juntar los diferentes temas de la serie lo que conlleva a lo largo de los capítulos carencias en el guión y sobre todo una gran previsibilidad, ya que lo que deberían ser giros geniales son sucesos que se veían venir.

Dicho esto, no todo es malo en Boss: hay una excelente fotografía, hay elegancia y porte en los personajes, y sobre todo hay un gran actor llamado Kelsey Grammer que es el que sujeta a una serie buena pero no 'top'.

Si te gustan las series de TV, la política y Kelsey Grammer (el Dr. Frasier Crane de carne y hueso) estás obligado a ver BOSS, pero con que te guste una de tres, ya es suficiente para ponerla en tu which list.

Dicho de otra forma, si alguna vez trataste de entender las pujas de poder en el conurbano bonaerense, BOSS es un manual Kapelusz para convertirte en un Barón y no morir en el intento (o sí). Imaginate que sos el alcalde de Chicago, por décadas amo y señor de cada ambición que se despierte en la ciudad del viento, sin herederos, sin lealtades a tu alrededor (incluyendo a tu familia), sin una moral que soporte inventario, y en el primer capítulo del cenit de tu gloria te enterás que tenés una enfermedad degenerativa incurable, que en cuestión de meses de hará alucinar hasta disolver tu mente como un puré. ¿Vos, qué harías?

Además de la enorme actuación de Kelsey Grammer, que le mereció el Globo de Oro en el 2011, tenemos que destacar un elenco femenino de lujo con Connie Nielsen y Kathleen Robertson. Y sigamos a su creador Farhad Safinia que debutó con esta joyita. Una de las tres mejores series políticas del momento

¿A quién le gusta una serie de política? A pocos, supongo. A mí la política no me gusta absolutamente nada. Y soy de los que se duermen cuando oigo una conversación con tantos términos políticos que desconozco. Pero "Boss" es más que eso. Primero porque tiene personajes bastante interesantes, empezando por el protagonista, quien no tiene escrúpulos en hacer lo que sea para conseguir sus objetivos. Tiene tramas principales y secundarias bastante interesantes, porque a parte de oir esos términos políticos que casi todos odiamos, también nos enseña de manera que podamos entenderlo todos, los tejemanejes que se cuecen detrás del telón. Una cosa son las frases bonitas de esperanza y las buenas caras que ofrecen esas sabandijas de corbata en nuestras televisiones (y que nadie se cree) y otra muy distinta, sus verdaderas caras y chanchullos en los despachos.

Por todo eso "Boss" merece la pena verse. Sobornos, amenazas, chantajes, idilios y traiciones harán olvidarte de todas esas palabras que pocos entendemos.

Saludos, quiero decir que esta serie me atrapó desde un primer momento, la historia del alcalde de Chicago Tom Kane (Kelsey Grammer), duro, inteligente, decidido, dispuesto a hacer de todo con tal de lograr el poder, el objetivo.. ¿qué es la moral? La moral es relativa, en esta serie no hay buenos ni malos. Un alcalde enfermo, destinado a morir en unos 2 o 3 años, es lo que se nos muestra al inicio, para luego dar paso a su trama.
A Kelsey Grammer lo vi y recuerdo mucho por Fraiser pero nunca logré asociarlo con otro personaje, es más, me molestaba que haga papeles nuevos ya que no lo podía separar de Frasier.. pero.. ahora es diferente, en el primer capítulo pensé en Frasier dos minutos y luego.. Kelsey es Tom Kane, ¡es él!.. una actuación extraordinaria, excelente, debe ser el ganador del Globo de Oro este año (al que fue nominado), debe ganar el Emmy, debe ganar todo..
Por otro lado la serie es muy buena, en mi opinión superior a muchas de HBO, y para los que les apasione la política, o el manejo gerencial, o esten metidos en la administración pública, les parecerá simplemente excelente.