Adiós, gringo

Digno spaguetti western, co-producido por no solo los dos países de rigor, como suelen ser España e Italia, sino, además, Francia.
Supongo que por ello tiene un mayor empaque técnico, con empleo a toda pantalla de una soberbia fotografía de Francisco Sempere, que realza los agrestes paisajes donde se desarrolla la acción.
Se pasa bien el rato, entretiene y aunque no deja mucha huella sí que resulta honesta por cuanto da lo que ofrece, sin rasgos tontos de humor.
Hay acción, tiros, peleas, persecuciones, atracción física (sin besos ni nada de eso...) entre la chica y el chico, y los diálogos no causan ni hilaridad ni vergüenza ajena.
Y es que el guión a cargo de ocho manos, adaptando la novela de Harry Whittington, tiene la suficiente pericia como que para el para mí desconocido Giorgio Stegani (no, ahora recuerdo que he visto también de él "Gentleman Jo"), logre al menos resultar en casi todo momento ameno.
Es irregular en su desarrollo, ritmo e interés, con un primer tercio feliz, interesante, la parte central mediocre y una parte final un tanto, tal y como van los acontecimientos, poco creíble... pero verosímil, lo de siempre.
Estimados intérpretes de carácter, tanto los españoles como el estupendo actor francés Pierre Cresoy, y la belleza sin igual de Ida Galli, internacionalmente conocida como Evelyn Stewart.
Al menos no aburre nada.

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"Ser un héroe es fácil, lo difícil es ser un hombre" Ahí queda eso.
"Ya sabes cómo es la gente..., sí..., lo sé... " Me sacas de una duda. Cosa mala.
"Quien encuentra un amigo, ha de merecérselo". Un tesoro.
Malísima pero simpática.
En los primeros cinco minutos hay como cincuenta despropósitos, y me quedo muy corto, y luego algo menos, baja un poco la vertiginosa media malsana anotadora.
- Le dice que tres dólares por cabeza y en cuestión de segundos le da un fajo de billetes de no te menees que ni ha mirado, a ojo de buen cubero (calcula las reses, muchas, y multiplica, todo ello a ciegas, a lo que salga, será por dinero, así somos los del oeste, europeo, francés, español e italiano), está claro que el protagonista (un Warren Beatty de rebajas o entretiempo, aperitivo) es un genio, también, de las matemáticas.
- Un tipejo le acusa de robarle el ganado y le descerraja varios tiros a medio metro y nada, ni una acierta, puntería rala, rompetechos. La jarana dura un buen rato y en ese mientras tanto la mujer del ya casi muerto le dice a su marido que tranquilo, que pare, que no es para tanto, que se larguen ambos con viento fresco, que cuidado, que no merece la pena, el protagonista lo mata en defensa propia y a continuación a ella, la recién viuda, le dan los siete males y le acusa rabiosa de ladrón y asesino a sangre fría y todo el pueblo inmediatamente la cree pese a lo que acababan de ver con sus propios ojos que no coincidía demasiado con la versión de ella, qué importa, al carajo. Al protagonista le rodean cientos de paisanos armados hasta los dientes con la intención harto probable de lincharle en un periquete, pues oye, el tipo que coge su pistola, les amenaza y en un ratico sale de ahí pitando y aquí no ha pasado nada, visto y no visto, tal cual, ni Houdini, silbando, jajaja, qué será, será, qué pasará, que misterio habrá, esta puede ser mi gran noche.
Ella es como Betty la fea que en eso que se cura se transforma en Susana York o Susana George, tanto monta, fría, pelirroja, hermosa, perfecta, amorosa.
Al Sheriff le lanzan una piedra como a Goliat le derrumbaba con la honda David, más vale maña que fuerza.
Lo mejor de la película es sin duda, mejorando lo presente, la dupla de actores españoles, el poli y el médico, las fuerzas vivas, el orden y el progreso, Puente y Camardiel, qué grande es el cine.
Es el pastiche remedo de un batiburrillo de millones de wésterns con el tema archirepetido y ya clásico del género del hombre rico hecho a sí mismo y sin demasiados escrúpulos que engendró a un siniestro mequetrefe botarate repugnante que anda por ahí cafremente asolando a todo el mundo a los inocentes por excesivamente haberlo mimado el padre en ausencia ominosa desgraciada de la madre seguramente prematuramente muerta.
"Dios sabe que lo daría o hubiera dado todo por pasar la vida entera a tu lado" y a mí se me abren las carnes y es que uno tiene su corazoncito (de miel).
Pasan miles de cosas en apenas hora y media, vamos con la lengua fuera, vivan los espaguetis con esa banda sonora tan Morricone padre padrone y ese villano que ríe tanto, signo inequívoco de perdición y funestas intenciones.
Esta película la hace Mann, palmo a palmo, plano a plano, y la canonizan, la sacan en volandas, a horcajadas, bajo palio, obra maestra absoluta, clasicazo instantáneo, que la sigan mamando.

Entretenido spaghetti western, cumple con eso, sin mayores pretensiones reflexivas, profundización psicológica de personajes ni un guión muy elaborado. Para eso veo alguna obra maestra de Ford o Hawks. Tampoco una dirección estilizada y enfoque neorrealista, convirtiendo al cine western en una notable experiencia sensorial. Para eso veo otra obra maestra, esta vez, de Leone.

Entonces ¿Qué tenemos en esta película de Stegani? Una historia sencilla y bien ambientada, con un buen Giuliano Gemma, que se muestra como un pistolero ágil y hábil con el revólver y puños, incluso cuchillos. Similar a su simpático personaje de Ringo, aunque aquí sufre más y le borran la sonrisa del rostro. Sale airoso de todas las situaciones difíciles, en ocasiones algo exageradas. En cuanto a las peleas a puño limpio, creo que Gemma es uno de los mejores exponentes del spaghetti western, por su agilidad y técnica (el italiano practicó boxeo y actividades circenses en su juventud).

Esta cinta tiene buenos tiroteos y peleas, con una trama y enfoque más parecido al western estadounidense clásico (por ejemplo, ¨El último tren a Gun Hill¨), que a un spaghetti. Guardando las distancias con la notable película de Sturges por supuesto. Me refiero solamente a cierto aspecto de la historia que se cuenta, del jovencito mimado hijo del ricachón y casi dueño del pueblo, que se ha metido en líos con sus malas juntas, y que no es "tan bueno" como lo creen. Incluso aquí tenemos un final inesperado y quizás apresurado.
Vemos un sheriff correcto y moderado, lo mismo que el médico del pueblo, lo mejorcito entre secundarios más bien planos. Ambos ayudan al héroe. Tenemos unos villanos regulares en su papel, hay uno por ahí que abusa de las risotadas, hasta en su momento postrero. Varios personajes menores pueblan la película, y tenemos una historia de amor con la chica rescatada por el bueno de Gemma, que encuentro deslavada, le falta nervio. Más que nada por la ausencia de carisma y fuerza del personaje femenino, una bella Ida Galli.
En resumen, está claro que no es de los mejores productos en su género, pero es más que digno y sale airoso en su objetivo de entretener.

Trama y desarrollo = 4.0
Personajes secundarios = 6.0
Gemma = 8.0
Música = 6.0
PROMEDIO = 6.0

Western de los primeros de Giuliano Gemma que realmente no paso a la historia y que podría decirse sentó las bases de lo que luego sería la saga de Ringo con el mismo protagonista pero de una calidad superior a esta. La trama cuenta como un vaquero compra ganado a un amigo, que resulta ser robado, lo que lo involucra en la muerte del dueño de los animales. A partir de allí intentará salvar su nombre encontrando al verdadero culpable e involucrándose con otros malvivientes y una mujer. Hay acción, algunas peleas y persecuciones pero las actuaciones son muy pobres, con un guion muy básico y de poca lógica. Para ver si no hay otra cosa que hacer.

Este es un buen S.W. con mucha acción, tiroteos, emociones y peleas. Es un western emocionante con un enfrentamiento impresionante entre el protagonista Giuliano Gemma contra el desalmado Peter Cross, su hijo Massimo Righi y sus subordinados como Nello Pazzafini. Trata de un vaquero llamado Brent Landers (Giuliano Gemma) es engañado por Gil Clawson (Nello Pazzafini) tras producirse un conflicto en el que muere un hombre llamado Stan Clevenger (Germaino Longo). Engañado durante una compra de ganado robado, Brent huye por un asesinato que no cometió. Landers intenta limpiar su nombre y por poco evita ser linchado. Brent va a Nuevo México donde espera encontrar una persona que pueda exculparlo. En su camino por el desierto de Las Mesas encuentra a una mujer herida (Ida Galli o Evelyn Stewart) que ha sido secuestrada, torturada, atada frente al sol, el la libera y luego prepara su venganza. La dejaron cruelmente cocerse bajo el ardiente sol del desierto después de haber sido agredida sexualmente por tres hombres que robaron su diligencia. Tex Slaughter (Jesús Puente), el sheriff local, está más interesado en entregar a Brent por la recompensa de 5.000 dólares por su cabeza, por lo que Landers tiene las manos ocupadas protegiendo a Lucy en su recuperación y llevando a los hombres ante la justicia, mientras intenta mantenerse con vida por mucho tiempo. Llegan a un pequeño pueblo llamado Sage Crossing donde gobierna un rico propietario llamado Clayton Ranchester (Peter Cross o Pierre Cressoy) y su hijo (Massimo Rhigi ó Max Dean). Aún buscado, persigue a los verdaderos ladrones de ganado y se hace amigo del médico del pueblo (Roberto Camardiel) y del sheriff (Jesús Puente).

Agradable Chorizo-Spaghetti Western coproducido por España, Italia y Francia y sigue más los modelos americanos que el estilo Sergio Leone. Este western es algo superior a otras entradas porque muestra emociones, disparos, peleas, intrigas, la consabida vendetta y muchas otras cosas más. Hay mucha acción en la película, lo que garantiza algunas tomas o acrobacias cada pocos minutos. La película es una historia de justicia y venganza, en la que un pistolero busca a un hombre en un pequeño pueblo fronterizo y también encontrar los torturadores de una mujer mientras intenta limpiar su propio nombre. La trama básica es la típica historia del spaghetti western, pero lo que hace que esta película destaque es su estilo. El protagonista llamado Brent está magníficamente interpretado por Giuliano Gemma. Giuliano está muy bien, el arrasa la pantalla, salta, golpea y corre. Gemma como una pistolero valiente y bravo está estupendo, posteriormente desempeñaría papeles similares en otros Spaghettis. Gemma, junto con Anthony Steffen, George Hilton y Gianni Garco, y el español Jorge Martín, resulta ser una de las más grandes estrellas del género Spaghetti. Gemma en sus inicios trabajó como especialista, practicó muchos deportes en su vida, boxeo, gimnasia, como está bien demostrado en la película. Luego el director Duccio Tessari le dio el primer papel como protagonista en la película "Los titanes (El Titani)" y las primeras películas de spaghetti western donde trabajó frecuentemente bajo el nombre de Montgomery Wood, interpretando Westerns como ¨Una pistola para Ringo¨, ¨La regreso de Ringo¨ y otros como ¨Adios Gringo¨, ¨Arizona Colt¨, ¨El precio del poder¨, ¨Día de la ira¨ y posteriormente ¨California¨. Sin embargo, su primera gran oportunidad llegó con el importante director italiano Luchino Visconti en ¨El Gatopardo¨ a esto le siguieron papeles importantes en "Angélica", ¨Tenebre¨, ¨Young Lions¨ y ¨El toque maestro¨. Luego interpretó sus papeles más significativos en ¨Il Deserto Dei Tartari¨ y ¨Il Prefetto Di Ferro¨.

En la película aparecen actores secundarios habituales como españoles: Roberto Camardiel, Frank Braña, Antonio Iranzo, Jesús Puente como actores italianos tal como Massimo Righi, Jeff Cameron como matón, Germano Longo y por supuesto, Nello Pazzafini y el francés Pierre Cressoy. Es una coproducción hispano-italiana y rodada en locaciones de Manzanares Del Real, La Pedriza y Colmenar Viejo (Madrid). Hay buenos técnicos y una profesional dirección, un excelente diseño de producción y una cinematografía atmosférica de Francisco Sempere, que crea un escenario magnífico del pueblo, el rancho y al yermo aire libre, paisajes agrestes bajo un sol tenue. La música original de Benedetto Ghiglia compone una bonita banda sonora de Spaghetti y un leitmotiv bien dirigido y francamente atrapante; está lleno de sonidos agradables y partituras emotivas, incluidas evocativas canciones al principio y al final.

La cinta fue bien dirigida por Giorgo Stegani, bajo el pseudónimo George Finley, aunque sin mucha originalidad porque toma elementos de otros films. Este escritor y cineasta italiano mezcló tan consistentemente lo bueno con lo mediocre que resultó casi imposible saber qué esperar de él a continuación. Escribió varias películas Westerns e intrigas. Es un experto escritor de Giallo y Western como ¨Blood of a silver dollar¨ y ¨Más allá de la ley¨ y ocasionalmente director de westerns, tal como ¨Adios Gringo¨, ¨Más allá de la ley¨ y ¨Gentleman Jo¨. Calificación : 6 . Western aceptable y pasable que atraerá a los fans del Spaghetti porque está lleno de acción, emoción, intriga y fuego cruzado.