ATM

La película es un sin sentido total, mira que pongo pocas malas notas pero es que de verdad es malísima y eso que la idea tiene su aquel, de ahí que la viese. Paso directamente a spoiler

“ATM” no es ‘Automatic Teller Machine’ sino una ‘Absurda Tontería Monumental’. Contar con un guión de Chris Sparling (“Buried”) es tan peligroso y afilado si todo se convierte en una spoof-movie con asesino en serie y cajero automático en vez de socorrido gañán y ataúd. Que tres JASP queden encerrados en un cajero automático en una gélida noche tras volver de la fiesta de Navidad de su empresa con un psicópata sin rostro, puede dejar puertas abiertas para una revisión de “La trampa del mal” o un carrusel hitchcokiano con conspiración de fondo. Y aparente parecía así… con un triángulo y demasiadas casualidades para no pensar que una venganza o plan maquiavélico estaba siendo plasmada por ese asesino que abre los títulos de créditos y estudia meticulosamente los planos del lugar del crimen. Nada de nada, este ATM es una ‘Absurda Tontería Monumental’ y olvídense de cualquier distintivo de originalidad o brillantez.

David Brooks ha perpetrado una de las peores películas de 2012, tan estúpida como desconcertante con una estrategia criminal que no sabemos identificar. O el asesino en serie es el hombre con más suerte del planeta o es el propio guionista de la película. La gracia de dejar al villano oculto y alejado de ellos como suspense se pierde en la incapacidad de disponer de mecanismos convincentes y un guión con tantas lagunas que repasarlas se convierte en obligación. Para empezar, ¿por qué cojons aparcan a tomar por culo una fría noche de invierno si tenían todo el aparcamiento para ellos? ¿Y el tema de los móviles? ¡Y eso que estamos en la premisa...! Podríamos proseguir con tantas, tantas y tantas objeciones que finalmente nos daríamos cuenta de que todo el guión es un gran agujero negro defecado en un cajero automático y donde el billete lo ponemos nosotros.

No importa, “ATM” es una ‘Absurda Tontería Monumental’ en la que nada tiene sentido y con una moraleja aterradora: un asesino en serie sigue suelto y con una policía tan idiota usted puede ser su siguiente próxima víctima. ¡Y no le van a creer por muy convincente que sea su historia! ¡No le van a creer! ¡NO! Aquí el espectador consigue también sentirse atrapado entre una gélida y estúpida trama que nunca entiende y de la que no puede escapar vivo... o con alguna neurona a salvo.

Hay dos formas de ver "ATM": una es interesándose por su guionista, Chris Sparling, artífice de esa bomba de relojería llamada "Buried", y otra es queriendo ver durante 80 minutos a Alice Eve atrapada en un cajero automático. En cualquiera de los dos casos la experiencia es decepcionante porque la película rara vez vuela alto y ya desde su soso inicio deja claro que aquí no vamos a descubrir nada especial. Sin embargo Sparling hace una cosa muy bien y es no humanizar al villano en ningún momento, a pesar de que el film abre con una secuencia en la que vemos cómo prepara su plan macabro, de espaldas. No sabemos quién es ni el porqué, sencillamente somos partícipes de su obra (consistente en atrapar a tres personas dentro de un cajero automático en una zona remota, sin dejarles salir) sin que haya motivaciones ni un happy ending, por así decirlo. Desde ese punto de vista la película es meritoria porque sin crear un icono del género, al menos tampoco abraza lo convencional en este tipo de propuestas. Esto, por supuesto, en lo referente a la creación de ese villano.

Por lo demás, "ATM" es la película de siempre. Lo que pasa dentro de ese escenario no deja de ser un poco increíble (otras películas recientes como "La trampa del mal" lo arreglaban añadiendo un elemento sobrenatural), y a pesar de ciertas cosas esto resulta pelín inverosímil. A pesar de todo puede decirse que entretiene, sin despuntar, y que a veces, de tonta, hasta tiene su chispa. Los actores principales no son muy allá, la dirección tampoco destaca precisamente, aunque aprovecha ese espacio de la forma que más o menos puede, por lo que al final queda un producto que no perdura pero que tampoco molesta mientras dura. Sus últimos 5 minutos confirman que Sparling sabía cómo acabar su historia pero no cómo rellenar la parte intermedia. Total, que se puede ver y Alice Eve está muy buena, pero es una tontada que difícilmente podría recomendarse y que, desde luego, parece indigna del guionista de la tensa e inteligente "Buried". Está por encima de la mierda genérica que deja el género y de las producciones baratas de videoclub, algo es algo.

Dentro de lo típica que puede llegar a ser, la película de David Brooks es buena. No es un ejercicio de originalidad ni de un cine muy espectacular, pero es mejor que la mayoría de slashers que vemos en pantalla.

Los minutos iniciales sobran, sí, todos esos de la fiesta donde lo único que se consigue es que los protagonistas caigan realmente mal. Alice Eve en cambio cae mal durante toda la película, porque su personaje es de esos incompetentes que estorban más que ayudan y sacan de quicio a todas horas. La otra pareja de protagonistas, la masculina, lleva el peso de la narración, la cual sería bastante sosa de no ser por el asesino que les acosa.

Y es sin duda ese asesino el que hace de ATM una experiencia más enriquecedora de lo que cabría esperar. Una mezcla entre la cabina de Antonio Mercero y la película de Los Extraños de Bryan Bertino. Tiene evidentemente más de la segunda que de la primera, aunque no llega a transmitir tanta angustia y tensión como los primeros minutos de la buena película que nos dejó Bryan Bertino.

El final es de esos que pretenden ser diferentes y originales pero la verdad es que es bastante malo. Desmerece un poco al resto de la película, que sin llegar a ser una muy buena película al menos no te deja con la sensación de tirar el tiempo a la basura. Buena, pero no tan diferente como para destacarla.

Dentro de lo que ya es un subgénero del terror en sí mismo: "atrapados sin salida", después de haber visto las vicisitudes que tantísimo gustaron al público y la crítica en la sobrevaloradísima Buried donde Reynolds las pasa putas putas y más recientemente en esa mini cinta de ínfimo valor auspiciada por MNS en un ascensor, tocaba "atrapados en el cajero".
Chico colado por chica la invita a una cena y se ofrece a llevarla a casa después de numerosos intentos de acercamiento.
Chica accede, en el fondo el chico le mola.
Chico 1 tiene un colega plasta de esos que todos tenemos y nos amargan las noches de ligue, el chico2, que se apalanca en el coche con ellos y decide que hay que parar en un cajero.
Antes hemos visto que un zumbado, muy abrigadito, eso sí, prepara algo malo en dicho cajero.
Dicho y hecho, están en el ATM y el zumbado fuera.
A partir de aquí todo son malas decisiones, ideas de retrasados y fuegos de artificio ridículos.
El final, una patata.
Lo mejor: Su primera mitad promete.
Lo peor: No cumple lo prometido.
Pseeee...