Cuatro años tenía yo cuando surgió esta serie. Seguramente mis recuerdos son posteriores, en alguna de las múltiples repeticiones que se hicieron. Recuerdo con nitidez como Curro a lomos de su caballo con sus bandoleros corría aventuras por la Serranía, también aquellos Pistolones, pero sobre todo rememoro con cariño al Algarrobo comiendo sin compasión aquellos enormes bocadillos de pan redondo que abrían el apetito a cualquiera. Son imágenes de una buena serie que por siempre quedarán impresas en los que seguíamos esta emocionante serie.