La piel del deseo

Cuando uno ve al oscarizado Anthony Hopkins actuando, enseguida piensa en el Dr. Hannibal Lecter del film “The Silence of the Lambs” (1991), es imposible sacárselo de la mente. Al igual que en su personaje de Hannibal, en este film está lleno de intrigas y misterios, tiene un pasado secreto como en la película “Hannibal” (2001) y tiene que lidiar con personas a las que el desprecia como en el film “Red Dragon” (2002),

Ahora la parte del film que más llama la atención es la relación amorosa del personaje de Anthony Hopkins con una mujer bipolar y mucho más joven que él, nada menos que Nicole Kidman, y que le traerá serios problemas con el violento de su ex marido. Por lo demás el film es aceptable porque goza de un buen mensaje, vivir en la mentira y el secretismo acarrea problemas. La película tuvo un presupuesto de $30 millones y generó por la venta de taquillas la cantidad de $20 millones, además recibió seis nominaciones a diferentes premios en festivales de cine.

Esta historia, algo mórbida, quiere presentar la redención de un hombre y de su pasado a través de una relación sexual tan pasional como improbable. A pesar del fastuoso reparto, la película es confusa en el tratamiento de sus propuestas, insatisfactorias y ambiguas. Lo más interesante, que se refiere a la trama del secreto que Coleman guarda desde pequeño, se ve eclipsado por la fuerza erótica de la trama de Nicole Kidman, que desequilibra la historia hacia su lado más banal. Ahora, eso sí, la película está muy bien rodada, interpretada, iluminada, y por tener, tiene hasta una buena banda sonora. Pero ya saben, el guión es el guión.
Un melodrama con todas las de la ley, realizado de manera formal y académica como es habitual en el cine de Robert Benton.

Tenía muchas ganas de ver esta película por el tema que trata y por el gran reparto que tiene, pero debo decir que después de verla he descubierto que me ha decepcionado bastante.
El tema que trata es bueno, y la verdad es que hay que ir con pies de plomo para exponerlo. Y es como las palabras pueden ser ofensivas para algunos colectivos, aunque dichas palabras se hayan dicho sin ninguna mala intención. En esta ocasión la palabra que desencadena todos los hechos es "oscuro". Una palabra empleada sin ninguna maldad ni prejuicio, pero que al sacarla de contexto crea un efecto dominó que acaba demoliendo la vida de un hombre con un pasado oculto.
La historia se balancea constantemente entre el pasado y el presente del protagonista interpretado por el gran actor Anthony Hopkins. Indicar que la historia del pasado es muy interesante, y es lo único salvable del film. Toda la trama del presente resulta aburrida y la verdad es que sin ningún interés. No acaba de convencer y en cierto modo resulta aburrida.
Nicole Kidman acompaña a Anthony Hopkins, a Ed Harris y a Gary Sinise en esta historia del presente. Un buen reparto que no consigue levantar una trama que pierde el interés conforme van pasando los minutos. Es más; los personajes no convencen y uno no siente ningún interés por lo que les suceda.
En cambio, Wentworth Miller interpreta al personaje protagonista en esa etapa del pasado. Su trabajo resulta más interesante ya que la trama sí que llama la atención, y uno desde su asiento muestra interés por cada hecho que le ocurre al personaje.
No entiendo muy bien el motivo de porque la historia está dividida en estas dos partes, y una de la otra tienen tanta diferencia de calidad. No sé porque una de las tramas narra algo que no atrae el interés, y que en cierto modo se encuentra un poco desconectada de la historia del pasado.
En fin, "La mancha humana" expone un planteamiento muy interesante y en cierto modo peliagudo; pero luego no es capaz de mantenerse en pie; o al menos en una de las partes temporales. Así que nos encontramos ante un film que decepciona más que atrae, y que cuenta con dos historias bien diferenciadas que tienen muy pocos nexos en común.

Una película decepcionante por completo, de principio a fin. Un desperdicio de reparto increíble para un guión sin pies ni cabeza y que en ningún momento consigue convencer ni conmover al espectador. Desde la propia historia de amor entre el gran Hopkins y la aséptica Kidman, que no hay por dónde pillarla, hasta el supuesto "misterio" que se encuentra detrás de la vida del decano. Es todo de un forzado y un artificial que atufa a la legua.

Yo no diría tanto como algunos a los que les ha parecido soporífera o insoportable, pero sí totalmente anodina, plana. Creo que Kidman hace el peor papel de su vida, no se lo cree ni ella. Y Hopkins, el brillante Hopkins haciendo de viejo verde que pierde el culo y parte de la cabeza por una tarada, por favor! Y en fin, hay cosas que claman al cielo, como el diálogo final entre Ed Harris y Sinise. ¿Es posible ese diálogo? ¿Alguien se ha enterado de algo escuchándolo? Qué es exactamente lo que se están diciendo?

Y bueno, por no hablar de qué pinta en la película Gary Sinise. ¿Qué sentido tiene su personaje? ¿Es una comparsa, es un testigo imparcial, es una rosa o es un clavel? ¿Alguien entiende con qué fin está ahí ese tío? ¿Había algún problema en que la historia la narrara el propio Hopkins o un simple narrador omnisciente? ¿Era necesario incluir a un personaje tan absurdo?

En fin, prescindible de principio a fin.

Debo confesar que no la vi entera. Pudiera darse el caso (rarísimo en cine) de que la primera media hora no fuera representativa del resto de la película, pero a mí no me quedó ni la curiosidad por comprobarlo.