Star Trek (Serie de TV)

Dios quiera que haya escrito bien el título...

Star Trek tiene una característica que el tiempo no podrá borrar: Es la serie menos maniqueísta que he visto. Esto es algo que los jóvenes de hoy no identifiquen claramente, pero Star Trek, lejos de pintar un mundo en blanco y negro procuraba exponer la mayor gama de colores posibles.

Primero he de hacer una declaración: Los clásicos jamás envejecen, se añejan para el disfrute de los paladares más exquisitos y esto es lo que ha sucedido con esta serie ¿Detenerse a criticar los "pijamas"? Extrañamente, hasta en la serie Cosmos 1.999 se utilizaban ropas ceñidas al cuerpo, con más o menos aspecto de pijamas pero todas del mismo estilo ¿Por qué razón?porque en el año que se filmaron era "lo moderno" pero ciertamente, en Star Trek se demuestra que no es el hábito lo que hace al monje ¿Por qué detenernos entonces, precisamente, en eso? ¿Por qué no resaltar que en la época de la Guerra Fría, solo unos pocos años después de la crisis de los misiles, se presentaba a la Tierra como habitada por una civilización integral e integrada, donde no tenía cabida el dinero, donde no era el ansia de riqueza, sino de conocimiento, lo que empujaba al ser humano hacia las estrellas?

Una serie para la cual ni klingoons ni romulanos eran mala gente sino, quizás, extremadamente desconfiados y algo belicistas, donde el problema base era llegar al entendimiento y donde los problemas surgían de la incapacidad de entenderse.

Y si seguimos su historia vemos claramente el propósito de Roddenberry: Hacernos entender que la Tierra es, al fin y al cabo, una nave espacial perdida en el cosmos.

Propuso la idea de una tierra unida en los sesenta, sin telones de acero, sin KGB o CIA, Promocionó el principio de no intervención en los noventa, con The Next Generation, una época en la cual los EE.UU. estaban en pleno auge intervencionista. Intentó, en Deep Space Nine, hacernos ver que la mejor manera de ayudar es ayudando, pero no imponiéndose a cambio de dar ayuda (Tal el papel de Cisko, si no me equivoco).

Antes de eso el extraterrestre malo e invasor, que venía a destruirnos y apropiarse de jnuestros recursos (que reflotó Emmerich), las historias de ciencia ficción que más parecen una historia de cowboys e indios tuneadas, donde el malo es muy malo y el bueno muy bueno y entonces llegó E.T., un extraterrestre bueno, y Encuentros Cercanos y Cocoon que, casualmente, coincidieron con una época de distensión , de apaciguamiento de la Guerra Fría.

Indudablemente esta visión no se ha conservado en las nuevas películas de la saga que aunque espectaculares en sus efectos van a la pata coja con la filosofía pero claro, Gene había muerto y otra mano gobernaba el timón de la Enterprise.

Esto más que una crítica parece un panegírico pero es que no deseo que se olvide que en la serie Star Trek original se mostró el amor interracial, a rusos, estadounidenses y japoneses trabajando juntos, a una mujer (para "colmo" negra) siendo un miembro importantísimo de la nave y a un hombre verde (Spock tenía de ese color la sangre por lo que podemos presumir que el tono de su piel no era sonrosado precisamente) siendo el segundo al mando (¿Qué más extranjero que un extraterrestre?) y, la guinda del pastel, el contrapunto entre Spock y McCoy, que parecían ser las dos conciencias, la emocional y la racional, del capitán Kirk que escuchaba a ambos antes de decidir que hacer.

Porque eso es lo que ha de hacerse ¿No es así? Equilibrar lo emocional y lo racional para llegar a decisiones correctas ¿O daremos la razón a quienes sostienen que hay un número de bajas aceptables? ¿O nos guiaremos por puras estadísticas, olvidando que cada índice representa a seres humanos?

Esa es la característica de Star Trek que no ha podido borrar el tiempo, de hecho actualmente estamos casi como en los sesenta, porque aunque creamos que la amenaza nuclear es algo ya pasado, aunque creamos en el triunfo del capital y la bonanza de él surgida, aunque creamos en el "ellos malos, nosotros buenos", todo indica claramente que estamos equivocados ¿En qué me baso para decir esto?

Pues, en que EE.UU., Rusia y China poseen un nutrido arsenal nuclear listo para ser usado, en que más de la mitad de la población mundial no sabe lo que es comer todos los días, en que la xenofobia, la homofobia y otras fobias están reapareciendo con fuerza y que el etnocentrismo parece regir las relaciones internacionales.

Y que existe un afán increíble por crear nuevas fronteras y por hacer cada día más difícil el poder atravesar las viejas.

Como si el mundo, en lugar de compararse con una nave espacial que surca en soledad la inmesidad del cosmos se semejase a un puñado de chatarra generado por cada una de las ideas que en él circulan, ideas que en lugar de confrontarse para alcanzar el entendimiento se enfrentan como si de autos chocadores se tratase.

Paz y prosperidad... nos hace falta.

Para realizar una crítica objetiva a esta serie es imprescindible situarse en el contexto de la década de su emisión: los 60. Si la comparamos con otras scifi previas -Perdidos en el espacio o Viaje al fondo del mar-, Star Trek resulta brillante en todo: guion, actuación, puesta en escena, efectos especiales, … y tanto es así que las secuelas han perdurado más de medio siglo y todavía sus seguidores (“trekianos”) se cuentan por decenas de miles. Los personajes, y los primeros actores que los encarnaron, generaron tan fuerte empatía que en las siguientes series, aun con otros actores, sus aventuras se disfrutaron igualmente. Una de las características de mayor relevancia a lo largo de todas las series es su evolución, siempre paralela al progreso social y tecnológico. Tripulación y tecnología suelen simular el funcionamiento de una pequeña base militar americana (para mí el único defecto). Y es por ese motivo que la crítica a la serie original debe realizarse en contexto, porque de lo contrario podríamos verla como una serie carca y nada más lejos de la realidad. La sociedad estadounidense de los 60 era machista -personajes femeninos con minifaldas y serviciales o sumisas-, esclavista laboral -trato despótico del capitán a sus subordinados- y violenta -constante agresividad del capitán ante peligros-. Por aquella época, los ordenadores eran inmensos y con memorias irrisorias de algunos megas (los más grandes) y con pequeñas lamparitas de funcionamiento y aun así, en la serie, su pequeño transmisor sirvió de modelo (forma de activar al levantar la tapa) a los futuros fabricantes de móviles. Y sería el carismático Sr. Spock, encarnado por el ya fallecido actor Leonard Nimoy, quien representaría el poder de la lógica y de la ciencia frente a las adversidades y la brutalidad. Asimismo, el teletransporte -artimaña del guion para reducir costes de efectos especiales- resultó un completo éxito. Otra característica a tener en cuenta es que la serie no presenta excesivas batallas galácticas, a pesar de la violencia social de entonces derivada de las tensiones del “telón de acero” y se enfoca más a las aventuras espaciales. Por último, la variedad de alienígenas resulta tan amplia que es difícil imaginarse uno completamente diferente a los presentados en la serie. Una buena diversión consiste en fijarse con detenimiento en los detalles de mando militar, civil y tecnológico de los diferentes capítulos. Maravillosamente moderna.

En el siglo XXIII, el Capitán James T. Kirk y la tripulación del U. S. S. Enterprise ,que representa a la Federación Unida de Planetas exploran la galaxia y defienden la Federación Unida de Planetas (incluida la Tierra) en una misión de cinco años en el espacio exterior para explorar nuevos mundos, buscar nueva vida y nuevas civilizaciones. Star Trek es una franquicia de ciencia ficción estadounidense creada por Gene Roddenberry, que comenzó con la serie de televisión homónima de la década de 1960 y se convirtió en un fenómeno mundial de la cultura pop. Desde su creación, la franquicia se ha expandido a varias películas, series de televisión, videojuegos, novelas y cómics, y se ha convertido en una de las franquicias de medios más reconocibles y de mayor recaudación de todos los tiempos. Roddenberry pretendía que la serie tuviera una agenda política progresista que reflejara la contracultura emergente del movimiento juvenil, aunque no fue completamente comunicativo con las cadenas al respecto. Quería que Star Trek mostrara en qué podría evolucionar la humanidad si aprendiera de las lecciones del pasado, más específicamente poniendo fin a la violencia.

La franquicia comenzó con Star Trek: The Original Series, que debutó en los EE. UU. el 8 de septiembre de 1966 y se emitió durante tres temporadas en NBC. Se transmitió por primera vez el 6 de septiembre de 1966 en la red CTV de Canadá. La serie siguió los viajes de la tripulación de la nave estelar USS Enterprise, una nave de exploración espacial construida por la Federación Unida de Planetas en el siglo XXIII, en una misión "para explorar nuevos mundos extraños, buscar nueva vida y nuevas civilizaciones, yendo con valentía a donde ningún hombre ha llegado antes¨. Al crear Star Trek, Roddenberry se inspiró en la serie de novelas ¨Horatio Hornblower¨ de C. S. Forester, la novela de Jonathan Swift de 1726 ¨Los viajes de Gulliver¨, la película ¨Forbidden Planet¨ (Planeta prohibido) de 1956 y westerns televisivos como ¨Wagon Train¨(Caravana). El Enterprise está al mando del apuesto y atrevido capitán estadounidense James Tiberius "Jim" Kirk (William Shatner). Kirk es asesorado por sus dos mejores amigos, el comandante Spock (Leonard Nimoy) (apellido impronunciable para los humanos), el oficial científico mitad humano/mitad vulcano y el primer oficial ejecutivo (es decir, segundo al mando) de la nave del planeta Vulcano y el director médico estadounidense, el Dr. Leonard H. "Bones" McCoy (DeForest Kelley). Spock usa la lógica para resolver problemas, pero como es mitad vulcano no tiene emociones, mientras que McCoy le da consejos a Kirk con sus sentimientos emocionales humanos. Kirk toma la lógica de Spock y las emociones de McCoy las utiliza a ambos en su toma de decisiones. Al trío se une una tripulación de aproximadamente 430 personas, incluido el timonel asiático-estadounidense, el teniente Hikaru Kato Sulu (George Takei), el navegante ruso, el alférez Pavel Andreievich Chekov (Walter Koenig), el oficial de comunicaciones suajili, teniente Nyota Uhura (Nichelle Nichols), el jefe escocé, ingeniero teniente comandante Montgomery "Scotty" Scott (James Doohan), la enfermera Christine Chapel (Majel Barrett) y Janice Rand (Grace Lee Whitney).

El canon de Star Trek incluye la serie original, 80 episodios en tres temporadas y otras series de televisión derivadas y una franquicia cinematográfica. También existen más y variadas adaptaciones en varios medios. Tras la conclusión de la Serie Original, las aventuras de sus personajes continuaron en Star Trek: La Serie Animada de 22 episodios y seis largometrajes. Un resurgimiento televisivo que comenzó en la década de 1980 vio tres series secuelas y una precuela: ¨The Next Generation¨, que sigue a la tripulación de una nueva nave espacial Enterprise un siglo después de la serie original; ¨Deep Space Nine¨ y ¨Voyager¨, ambientadas en la misma época que Next Generation; y ¨Enterprise¨, ambientada antes de la serie original en los primeros días de los viajes interestelares humanos. Las aventuras del equipo de ¨Next Generation¨ continuaron en cuatro largometrajes adicionales. En 2009, la franquicia cinematográfica se reinició, creando una continuidad alternativa conocida como la línea de tiempo de Kelvin; se han ambientado tres películas en esta continuidad. El resurgimiento televisivo más reciente de Star Trek, que comenzó en 2017, incluye las series Discovery, Picard, Short Treks, Lower Decks, Prodigy y Strange New Worlds, que se transmiten exclusivamente en plataformas digitales.

Star Trek ha sido un fenómeno de culto durante décadas. Los fanáticos de la franquicia se llaman "Trekkies" o "Trekkers". La franquicia abarca una amplia gama de productos derivados que incluyen juegos, figuritas, novelas, juguetes y cómics. De 1998 a 2008, hubo una atracción con el tema de Star Trek en Las Vegas , la Comic Com de San Diego y objetos Star Trek son expuestos en museos que recorren el mundo. El lenguaje construido klingon fue creado para la franquicia. Se han realizado varias parodias de Star Trek y los espectadores han producido varias producciones de fans.

Star Trek se destaca por su influencia cultural más allá de las obras de ciencia ficción. La franquicia también se destaca por sus posturas progresistas en materia de derechos civiles. La Serie Original incluyó uno de los primeros elencos multirraciales de la televisión estadounidense.

Con estos personajes, nació Star Trek, tiene un gran mérito el resultado final, viendo de lo poco que gozaban para hacerla, y se nota que es una serie hecha desde el cariño, con unos guiones en general muy bien trabajados y estructurados. Es evidente además que sin esta serie tan necesaria, no hubiesen llegado las demás, que beben de esta en sus ideas y en su visión del futuro, y que en mi opinión la superan. A veces, debido también a su antigüedad se puede hacer un poco pesada, pero si se la valora en lo que es, y en lo que será, es muy disfrutable.
Siendo la primera de todas no se podía haber hecho mejor... Con las ideas dadas, las siguientes lo tuvieron más facil, y aun así no la superan en general. Se le coge gran cariño a los personajes, sobre todo Kirk, Spock y McCoy, aunque en mi opinión y debido a la cancelación de la serie tras la tercera temporada, tienen menos profundidad que en series sucesivas... Gracias Roddenberry por la serie... y por lo que gracias a ella vino después.

Aprovechando que en Netflix tienen toda la colección de Star Trek estoy echándole un vistazo a la serie original del comandante James T. Kirk y su inseparable colega Spock la verdad es que me parece muy decepcionante. En lo que llevo de la primera temporada no he encontrado ni un solo capítulo que se pueda salvar y no hablo solo de lo mal que ha envejecido puesto que la han remasterizado y añadido CGI para dar el pego, su problema es que es una serie demasiado naif y buenista que traspasa demasiadas veces el límite de lo absurdo. Es una serie demasiado simplona para tratar seriamente ningún tema por muy profundo que lo quiera vender.