Reykjavik Whale Watching Massacre

Islandia pasó de ser el tercer país pescador de ballenas, después de. cómo no, Japón, a convertirse en un país en el que se sustituyó la pesca por la contemplación turística que evidentemente deja mucha menos pasta.
Partiendo de esta premisa controvertida, el tal Kemp nos plantea un slasher clásico, con un gore suave y sufrible y unos protagonistas bastante decentes, ambientado en un barco ballenero convertido en hogar de una familia disfuncional y desequilibrada como no podía ser de otra forma.
Un grupo de turistas, tres alemanas de mediana edad, un matrimonio japonés y su encargada, una rubia en viaje de novios solitario tras la muerte de su novio, un francés borracho y un chico negro-y gay- sobre el que recaen todos los estereotipos habidos y por haber, pero que no puede tomarse en absoluto en serio, pierden al capitán de su barco en un accidente-muy a La profecía-y son rescatados por la familia chunga, que tiene otros planes para ellos.
No esperen cine de lujo.
Ni terror espeluznante.
Pero sí hora y pico de entretenimiento puro y duro.
Yo, no pido más...

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Júlíus Kemp conocido por «Veggfóður: erótísk ástarsaga» o «Blossi/810551» dirige con guion de Sjón Sigurdsson —poeta con apellido superislandés y además colaborador habitual en su momento de Björk— «Harpoon: Reykjavik whale watching massacre», una película sobre un grupo de turistas que va a ver las ballenas en Islandia y sufren un accidente por lo que son rescatados por unos maníacos homicidas. En los papaeles protagonistas tenemos a Phila Vittala conocida por «Mi familia italiana» o «Hansel y Gretel: cazadores de brujas» o Nae conocida por «Cartas desde Iwo Jima» o «Gakko» que interpreta a la traductora de unos japoneses.

Se trata de un «slasher» cuya particularidad más grande es que se desarrolla en Islandia, lo que tiene es que en vez de aprovechar los paisajes islandeses casi toda la película se desarrolla dentro de un barco en medio del mar por lo que de Islandia vemos más bien poco. Sí que tiene un poco de comedia de terror pero es bastante poco.

Los actores dan lo mejor de sí y hay hasta favoritos que quieres que se salven y otros que más bien te dan igual o quieres que se mueran lo antes posible.

No tiene metascore pero sí dos críticas en la tomatá, una positiva que dice que reinventa el gótico sureño como una saga sangrienta nórdica comparando a su director con Tobe Hooper; la negativa dice que es xenófoba y comparándola con «La matanza de Tejas» además dice que no es tan mala como cabía esperar pero tampoco tan escandalosa como parece. A mí me pareció una película de estética muy sucia y que la verdad es que sí que la esperaba mejor y mucho más oscura encontrándome con un producto divertido aunque al menos no te aburres.

De verdad, las he visto malas, pero no tanto como ésta. Me llamó la atención principalmente por su país de procedencia, Islandia, nada experto en la realización de películas de terror y menos slasher y pensé que podría prometer y que además aparece Gunnar Hansen, el eterno "Leatherface" de "La matanza de Texas" original. Pero no os engañéis Gunnar Hansen sale solo 5 minutos al principio y no hace nada que influya en la trama, si es que a lo que hay se le puede llamar trama, porque sólo queda un devenir de situaciones tan absurdas que dan auténtica PENA, con personajes irrisorios y patéticos a más no poder y un final que corona una de las grandes y mayores mierdas del año. En serio os digo que la película es un auténtico BODRIO, nada recomendable más que para haberla quemado y evitarnos a algunos su visionado...