Cuerpo maldito

Magnifica y cuasi de culto película, dirigida por el guionista de Carretera al Infierno y Los Viajeros de Noche, (Eric Red). Jeff Fahey, como el hombre al que se le trasplanta un brazo, sin saber a quien ha pertenecido, ni por qué le esta apoderándose de él, esta inmenso. La historia es muy entretenida, tiene unos toques de humor negro cojonudos y cuenta con su correspondiente cuota se sangre. Absolutamente recomendable y referencia de género.

Siempre me gustó el guionista Eric Red. Las películas basadas en sus guiones no han tenido brillantes críticas, sin embargo para mi gusto, son de lo más interesantes. Porque sus historias están bien contadas y tienen unos argumentos claros y bien planteados. Casi todos sus guiones son obras sumamente entretenidas. En este caso dirige su propio guión en un film que supone un guiño a Frankenstein y Re-animator.

Cuenta la historia de un profesor que en un accidente de tráfico pierde el brazo. Sin embargo, una eminente cirujana se ofrece a reimplantarle un nuevo brazo compatible con el suyo. La mujer del protagonista firma la autorización sin darse cuenta de que se trata del brazo de un asesino... Poco después de la operación el profesor se recupera satisfactoriamente sin embargo, comienza a tener problemas cuando el brazo empieza a influir en su comportamiento cada vez más violento.

Debido a su corta duración, más que una película parece un episodio largo de Más allá del límite. Y aunque su argumento fuese ciencia ficción en su momento, hoy en día la idea de reimplantar brazos amputados no resulta tan descabellada sino que por el contrario es ya una realidad. Recuerdo que la crítica la puso bastante mal por lo disparatado de su argumento, pero a los amantes del cine de suspense con dosis de gore les parecerá una propuesta interesante. Lo único que no me gustó del film es su estridente banda sonora, el resto es muy digno.

La idea de la que parte 'Cuerpo Maldito' no sé si será demasiado original, pero para no soltar spoilers y simplemente resumirla de otra forma, recordaré un capítulo de la fantástica serie Los Simpsons que trata de lo mismo. En dicho capítulo, Snake/Serpiente, el preso más famoso de Springfield, es atrapado por la policía ante la mirada de Apu, Homer y Bart. Posteriormente, Homer se implanta el pelo de Snake -sin él saberlo-, y la melena toma posesión de su cuerpo, eliminando uno a uno -o intentándolo- a los causantes de su muerte -en la silla eléctrica, para más señas-. Bien, ese capítulo era fantástico, divertidísimo. Ahora, imaginad más o menos lo mismo, pero cambiando el pelo por un brazo, y mantened las carcajadas que puede provocar una situación tan ridícula, pero eh, mientras que en Los Simpsons eran aposta, en 'Cuerpo Maldito' salen solas, lo cual siendo una película de terror que se toma medio en serio pues... tela.

Ahora el brazo no es vengador, simplemente tiene un instinto asesino. Así que el protagonista, al que se lo han implantado, inicia una búsqueda que le llevará a descubrir quien era el verdadero poseedor de su miembro derecho, y a los destinatarios de las piernas y el brazo izquierdo del mismo fiambre. Divertidísimas. Pero las cosas no acaban ahí: Todo es un amasijo de tópicos que, de haberse rodado en plan coña, sería fantástico. Salvando la última media hora, que es ya una comedia en toda regla -con un final maravilloso y hasta moralina-, lo demás es flojísimo, entreteniendo lo justo como para no acordarse de la familia de Eric Red o del inexpresivo Jeff Fahey, que se limita a actuar poniendo morritos. Ains... ¡si es que no se ven ni tetas! ¿Qué clase de película de terror de serie B es esta!.

P.D: Recalcar que la escena final es brutal, con el protagonista disparando a diestro y siniestro a... bueno, da igual, ya lo veréis... si os atrevéis. Es cortita, por cierto, y al menos su calidad es superior al 80% de los capítulos de Masters of Horror o a casi todo terror americano reciente, como "El retorno de los malditos", sin ir más lejos.

A medio camino entre el gore de “Re-animator” (1985) y el cine de terror paranormal de “Shocker: 100.000 voltios de terror” (1989), se encuentra esta correcta serie B dirigida por el guionista Eric Red.

Después de una copia casi descarada de los títulos de crédito iniciales de “Re-animator”, se nos presenta a un psicólogo (Jeff Fahey) que sufre un terrible accidente en el que pierde su brazo derecho. Una eminente cirujana le implantará un brazo que resultará ser el de un sanguinario asesino, y nuestro amigo psicólogo notará cómo paulatinamente ese brazo empezará a darle problemas y a actuar por su cuenta. Pero lo terrible viene cuando descubre que no ha sido sólo él a quien le han implantado partes del cuerpo del asesino…

La película no llega más allá del mero entretenimiento. Una de sus grandes pegas es que Eric Red no se toma a cachondeo una historia que hubiera dado para una pequeña joya del humor macabro, algo de lo que se da cuenta hacia los minutos finales, sin duda lo mejor de la cinta. La trama se desarrolla como una investigación personal, sin ningún interés ni emoción, por lo que el filme presenta demasiados altibajos. Comienza de forma interesante, se hunde en su nudo y vuelve a ascender en su final.

La interpretación de Jeff Fahey resulta convincente dentro de las limitaciones de este actor, cuya mayor fuerza reside en su carisma presencial más que en sus cualidades interpretativas. Luego tenemos a una correctita Lindsay Duncan haciendo de sufrida esposa, y un pequeño papel para Brad Dourif, reconocido rostro secundario de películas de terror y ciencia-ficción.

“Cuerpo maldito” no es un filme memorable, pero cumple con su cometido de entretener. Eso sí, no le hace falta más de un solo visionado.

Eric Red (guionista de 'Carretera al infierno', 'Acero azul' o 'Los viajeros de la noche') también tuvo sus escarceos con la dirección, empezando con dos cortometrajes llamados 'Gunmen's Blues' (1981) y 'Telephone' (1986) y comenzando con los largometrajes en 1988 con 'Cohen y Tate', siendo 'Cuerpo maldito' su segunda película y la primera que veo con Red en la dirección.

No sabría decir del resto de filmes dirigidos por él, mas lo que se ve aquí es un resultado que no es altamente elogiable, aunque sí digna de mención. Desde el principio, la narración ayuda a captar el interés viendo al personaje de Bill Chrushank (Jeff Fahey) viendo como era su vida y su profesión como psiquiatra quien trabaja con un convicto antes del momento donde se suceden los acontecimientos que dan pie a la historia. Desde el accidente en adelante viene la historia de la peluca de 'Serpiente' de 'Los Simpson' en forma de brazo.

Una película que no solo sirve como cinta de terror y suspense en sí, sino también tiene de fondo una reflexión sobre el origen de la maldad, al menos la maldad en la especie humana, que no se termina explotando del todo en favor de la narración más mundana donde Chrushank pierde los estribos por su brazo nuevo cada vez que atraviesa una situación que le estresa; aún así, la narrativa de base y su fondo merecen igualmente la pena gracias a un relato que no pierde un segundo y mantiene en todo momento el interés.

Quizás con una mayor pausa y adentrándose más en ambas facetas podría haber salido un largometraje mejor; no obstante, el resultado final tiene virtudes como la banda sonora de Loek Dikker que transmite estupendamente el sentimiento de horror, las interpretaciones del reparto principal y el guion del mismo Red junto con Norman Snider basado en el libro 'Choice Cuts', de Pierre Bolleau y Thomas Narcejac. Es la primera vez que escucho de la existencia del libro, así que no sabría decir que fue mejor, si el libro o la película. Al menos, la película no ha sido un tiempo mal invertido y no desanima en seguir algún día con el resto de trabajos del Eric Red director.