En nombre de la justicia

Ni el solvente Guy Pearce (en horas bajas) salva este engendro que pretende pasar por thriller violento con robo a furgón blindado con pastizal a go go...se nota la lamentable falta de presupuesto, en una historia criminal más vista que el tebeo; penosa la resolución de las patéticas escenas de acción.
Destinada al pase por la tv los domingos a las 5 de la tarde, no da más de sí. Altamente prescindible.

Una película para pasar el rato y no la he encontrado tan mala.
Se pasa rápido y tiene que me he reído con alguna escena absurda e impensable.
El guion no hay por donde cogerlo ni las interpretaciones son nada del otro mundo pero sus diálogos son para echarse unas risas.
Es cortita y va la grano desde que empieza y eso es de agradecer al igual que su duración.
Me entretuvo y por eso le pondré un pasable(5).
Besitos y saludos.

Un telefilm para rellenar los canales de TV. eso sí con un producción más que correcta como corresponde a este tipo de productos USA, de usar y tirar. El envoltorio bonito que no falte, que lo de dentro ya se lo tragarán,
La dirección ha intentado mantener el tipo y no hacer mucho el ridículo y lo consigue. No ha sido vulgar y ha tenido algún que otro momento interesante. Si no fuera por ella hubiera sido mucho peor.
La historia, pues qué decir. Una trama vulgar y ausente de ideas. Pero menudo gazpacho de personajes típicos que han montado: el muchachito, que no se despeina ni se arruga en toda la película y que no tiene nunca prisa; el compañero del muchachito, que desobede sus órdenes; el malo cruel y malísimo, el malo arrepentido, el alcalde pusilánime pendiente de las elecciones; la muchachita de potentes pectorales, con caballo y todo; la mala malísima también de potentes pectorales y camiseta blanca de tirantes, y unos cuantos más malos. El elenco de personajes no tiene desperdicio, sólo ha faltado Rin Tin Tin.
De los protagonistas qué decir, a mí me han recordado a la serie del Equipo A. Los diálogos son casi inexistentes. Creo que estaban muertos de risa mientras rodaban.
Resumiendo: un subproducto para el simple entrenenimiento.

Lo mínimo que se le puede pedir a un policial de bajo presupuesto es que sea entretenido, esta ni eso.
No sé por qué intenta tomarse en serio a sí misma cuando no le da, todo queda pretencioso, solemne y tampoco es que sea verosímil.
Lo peor: pretenciosa, aburrida, con pésimos diálogos, acartonada.
A los malos les sale todo bien durante casi todo el tiempo.
Tiene demasiados villanos, para mí más de 4 es al pedo es meter demás porque no podes desarrollar un marco narrativo en menos de 90 minutos en un thriller si tenés más antagonistas, porque si no pasa lo que acá, que son como 10 (si no conté mal, quizás me faltó alguno) y más de la mitad solo sostienen armas y pegan unos disparos o son asesinados, carne de cañón, apenas dicen si dicen una frase en toda la película. Al resto no es que le dan un gran desarrollo, solo a Diablo y el ex Marine.
Otra cosa, los criminales son expertos en explosivo, pero el comisario también.

A veces hay que pensar las cosas antes de hacerlas. Es así de simple si se quiere tener medianamente un trabajo bien realizado. Con ‘En nombre de la justicia’ hay algo muy serio y muy importante a tener en cuenta, y es que realmente hay que hacerlo con bastante desgana o poca habilidad para conseguir que un thriller con acción, algún nombre decente en el elenco y mensajes morales correctos termine resultando tan superficial, soporífero e insípido. Un ejercicio que transita entre escenas de acción sin ton ni son, un ritmo que pretende ser rápido pero que termina enfrascándose en una narración lenta que a su vez no está acompañada por ninguna línea de guion decente que transmita nada más allá de la vergüenza ajena y unas interpretaciones que distan mucho de ser siquiera decentes.

Demasiado convencional y con cero ápice de sorpresa, ‘En nombre de la justicia’ está enfocada en la historia del jefe de policía de un pequeño pueblo que no tiene ningún tipo de apego por las armas, hasta que una banda de motoristas con un plan de robo le obliga a empuñarlas de nuevo. Vale, teniendo esto como premisa, el hecho de que ‘En nombre de la justicia’ sea medianamente entretenida debía ser cuanto menos una obligación; pero no consigue enganchar ni mantener la tensión en el espectador en ningún momento durante toda la película, algo que termina resultando incluso cargante y frustrante ante una historia con cierto potencial a pesar de ser poco original.

Guy Pearce ya debiera de ser un golpe de efecto en un elenco sin demasiada categoría, pero quizás estemos ante una de sus interpretaciones menos acertadas; y es que el celebérrimo intérprete de ‘Memento‘ o ‘Prometheus‘ genera más ansiedad que regocijo cuando ves como van sucediéndose los instantes de ‘En nombre de la justicia’ y no levanta el vuelo interpretativamente hablando. Sus compañeras y compañeros en el reparto generan lo mismo, sin llegar a dejar empatizar o sentir creíble nada de lo que van contando y/o realizando.

En definitiva, no hay mucho por donde coger ‘En nombre de la justicia’, ni nada dentro de ella que invite a un visionado más allá del que te encuentres por casualidad y dejes. No hay tensión, ni credibilidad, ni acción bien ejecutada ni un guion que nos deje o mantenga durante su visionado con algo de interés. Genera incluso un poco de rabia admitirlo, pero es una película mala, en ocasiones absurda y muy predecible.

Crítica para MagaZinema
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