Haz click aquí para copiar la URL
España España · Miguelturra
Críticas de Lecs
1 2 >>
Críticas 10
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
7
21 de marzo de 2023
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
En general, es una seria agradable, con guiños a la actualidad pero con la fórmula de toda la vida de "he encontrado al amor de mi vida pero se comporta como raro y no sé si siente lo mismo" que resuena mucho en este mundo de apps.

Y así, resonando con tantas otras comedias románticas, nos viene contando las historias de amor de siempre: que más vale seguir instintos infundados de una noche de pasión a pesar de los posteriores malentendidos en los que Bruno muestra siempre su lado más arisco y soberbio. Inicialmente el choque de ambos tiene bastante química, pero luego se va desgastando de tantos momentos similares, así como la historia se empeña en los paralelismos del grupo de amistades y especialmente en las parejas que Álex y Bruno por separado van construyendo, que quedan como secundarios bondadosos pero "insuficientes": El personaje de Ibra (un magnífico Cedrick Mugisha que ha hecho oro de esbozos de personaje) no merece ni que le dejen en pantalla #neverforgetnorforgive

De tanto paralelismo, los besos que vemos casuales son casi todos robados, cosa que me ha resultado incluso preocupante por no encontrar el guión otras formas de presentar el cariño o el deseo alejado del cliché del "beso incómodo".

Muy cuestionable el planteamiento de la relación de Patri y Vero, de bollodrama en bollodrama pero sin desarrollo alguno. Pinceladas de amor libre y poliamor nuevamente cayendo en que es jugar con fuego y una salida hacia delante más que una introspección real de una forma de vida. No les perdonaré montar una relación con un personaje migrante y usarlo como arma arrojadiza para un solo capítulo (me faltaron tantas cosas de la visita de sus padres y la propia historia que interpreta Giannina Fruttero queda relegada a dos líneas). Una lástima invertir tanto en Ibra y Ramón y tan poco en Patri y Vero, o la misma relación de Vero con Álex que nos regala una conversación muy amena mientras hacen la cama.

Brilla especialmente Javier/Pepón Nieto sobre todo en los primeros capítulos aconsejando y reprochando a Vero a partes iguales. Pero al final es engullido por el deseo del guión de que todo el mundo haya arreglado sus situaciones sentimentales para bien o para mal al final de la temporada, sin continuar esa relación de padre que tiene con Vero.

La crisis matrimonial de Albert y Nuria no da tiempo a que se desarrolle y viene y va sin más con extraños guiños antiwoke sobre el uso del neutro en su bebé y su forma de tratar a Najat/Yasmina Drissi la cuidadora con hijab. Todavía pensando si se suben al carro o están burlándose de ello de tantas veces que repiten lo del lenguaje neutro.

En resumen, para pasar el rato pero para no tomarla muy en serio. Pasitos que toma una forma audiovisual de hacer las cosas más inclusiva pero cayendo en tantos clichés que los detalles diversos se quedan en buenas intenciones sin verdadero compromiso, enfocando siempre a los personajes cisblancos en su búsqueda de un amor de peli romántica.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Lecs
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10
21 de marzo de 2023
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Parte de la audiencia afrodescendiente se ha alejado de esta película por considerarla se regodea en la extrema violencia del asesinato de Emmett "Bobo" Till y en la increíble necesidad de cierta parte de Hollywood de recrear violencia, dolor y brutalidad en las personas no blancas como forma de excusa moral y camino a los Oscar (véase 12 años de esclavitud, Amistad, Antebellum, etc).

Parte de la audiencia blanca ha tildado a esta cinta de melodramática y facilona en su cometido. Cuando no, le han pedido que hubiera sido "más real" y con mayor contexto, casi con la narración en off de un documental.

Y realmente esta película, que han recomendado visionar los descendientes de los familiares de Mamie y Emmett, pretende hacer un homenaje a la relación madre-hijo de sus protagonistas. A quedarnos en el dolor de esa madre y de cómo se convierte en motor de cosas grandes, inimaginables hasta entonces en los años 50 del siglo XX. Porque como dice en su monólogo de cierre, escapar al racismo y vencerlo es cosas de todos, y que nadie estará a salvo viva en el Norte de EEUU como vivía ella o en el Sur donde Emmett fue secuestrado, torturado brutalmente y asesinado tras un encuentro con la dueña blanca de una tienda de comestibles: la versión de la cinta que es la de las memorias del primo de Emmett Till en la que está basado el guión es que hizo comentarios sobre su parecido a una estrella del cine y le silbó al comprar unas gominolas en su tienda, la versión de la mujer durante el juicio fue que intentó agredirla sexualmente.

Es una película que no es apta para todo el mundo por su honestidad a la hora de explicarnos la conexión de Mamie con Emmett y posteriormente con su cadáver. La escena es larga, explícita en su deseo de acompañarnos en el dolor y la pena y la violencia que es ese cuerpo tan amado. Danielle Deadwyler está magistral en cada minuto de cámara con primeros planos que a veces reflejan la angustia asfixiante del momento. Pero para mí es la pieza central del filme y sobre la que pivota emocionalmente el resto de la película. Con su decisión de un féretro abierto y un funeral público en Chicago y con posibilidad de asistencia de la prensa, Mamie fue una mujer visionaria que consiguió acercar al mundo el silencio de la violencia racista en EEUU y concretamente en los antiguos estados confederados. Y aquello fue el principio de su activismo.

No voy a mentir: me pasé llorando la primera hora de la película, pero desde ese lugar de dolor el resto de la cinta deja de ser un melodrama para convertirse en una muestra de cómo Mamie entiende el sistema jurídico de EEUU y cómo se organiza la NAACP (National Association for the Advancement of Colored People) que lleva en marcha desde 1909 para proteger a la población afroestadounidense, para buscar y aglutinar pruebas y testigos, y para atesorar espacios de resistencia como el pueblo de Mound Bayou, ciudades donde la población negra podía vivir en paz, regentar comercios y tener asistencia médica liderada de forma exclusiva por afroestadounidenses. Algunas de esas balsas de supervivencia también fueron arrasadas como Tulsa el Wall Street Negro y el barrio de Séneca en parte de lo que hoy es Central Park... Una conversación histórica pendiente.

Si atendemos a los detalles y no olvidamos que está auspiciada por la producción de Woopi Goldberg que actúa además en el papel de la abuela de Emmett Till, y recordamos que esta historia apenas si acaba de cristalizarse en la ley federal Emmett Till del 2022 considerando el linchamiento un delito federaly por tanto, un asunto estatal y no solo de manejo en cada unos de los estados de EEUU; si recordamos que el centro del relato es la madre de Emmett, que la cámara está de forma continua a su alrededor, acompañándola, y que lo único que quiere es que "el mundo sepa de cómo han tratado a su hijo"... es imposible que uno no llore ni se emocione, en ocasiones lleno de rabia, pero al mismo tiempo entienda que dignificar a las víctimas de asesinatos racistas es humanizar a esas personas cuyas vidas fueron sesgadas por un sistema que protege la supremacía blanca.

Y en este aspecto la película recalca, que a pesar del miedo de Mamie, de esa premonición griega de tragedia autocumplida, Emmett era solo un niño de 14 años. Interpretado por un Jalyn Hall carismático e ingenuo en su retrato de Till como un chico de ciudad del Norte halagador, bromista y algo fanfarrón, alejado de los problemas de sus primos en Mississippi (la amenaza diaria de ser asesinados por sus vecinos blancos por cualquier altercado).

En otro orden de cosas, otros productos audiovisuales comienzan a elaborar esos escenarios históricos violentos y humanizar sus víctimas. Son historias contadas desde hace mucho tiempo por otras voces, y que ahora la comunidad afrodescendiente está liderando. Así como en Watchmen, Lovecraft Country o The Underground Railroad consiguen mantener el lado humano de sus protagonistas, sus familias y su comunidad. En resumen, el legado de esas personas que fueron y que gracias a ellas, somos.

Recomiendo una entrevista a su primo (que tenía 16 años en 1955) sobre Till y su legado, disponible a través de NPR
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Lecs
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
22 de agosto de 2022
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como mucha gente, no sé si quitarle más puntos por este cierre que es penoso. La puntuación de la serie cae en picado según pasan las temporadas, pero...

Veo muy pocas críticas después del final de la serie y puede ser por varios motivos:
- resulta difícil hacer una crítica de la última temporada sin hacer spoilers
- porque la mayoría de la gente sigue en redes sociales pasmada y sufriendo por un final precipitado e indigno de estos personajes tan queridos, esta relación entre Eve y Villanelle que era un diamante en bruto que no se supo exponer en su esplendor en las dos últimas temporadas.
- que al final los guionistas tomaron una decisión quizá no sorprendente, pero dentro de lo que significa la representación de personajes en una relación sáfica interracial y valorando el compromiso de Jodie Comer y Sandra Oh con la comunidad LGTBIQ+ resulta lo peor y como tal, escribir sobre ello resulta muy difícil.

Esta temporada, que ha tardado mucho en aparecer tras la pandemia, ha supuesto una caída en picado de la calidad del guión, de la trama, y únicamente se mantenía por la pulsión de Eve y Villanelle, que aunque impresionante e igual de inquietante, queda relegada a la repulsión sin medida que siente Eve por Villanelle al principio de esta cuarta temporada, y sin aparente explicación desde el final de la tercera que terminaba en un punto mucho más calmado. Hay un salto temporal y emocional del que no nos cuentan nada.

Hay muchísimos problemas sobre la continuidad de la propia serie (el personaje de Helene brillantemente interpretado por Camille Cottin no tiene al final mucho sentido ni mueve la trama), y la relación central de estas dos mujeres queda en los márgenes. Mientras, nos cuentan la vida de una nueva asesina Pam, y la vida pasada de la misteriosa Carolyn que se halla en la búsqueda de respuestas fuera del MI6 del que finalmente ha sido expulsada. Esta última historia es en realidad un movimiento de marketing para anunciar un spin-off de la trama de espionaje y una Carolyn joven (estoy convencida nunca va a salir a la luz). Los Doce, que era la excusa cuasi de McGuffin para mantener la dependencia formal de Eve y Villanelle resulta que podría tener una serie entera mientras Eve y Villanelle no son explorados en su propia serie en toda su locura, su atracción fatal, su violencia y toda su ternura.

En un alarde de querer parecer original, Laura Neal (la showrunner de esta temporada) se dedica a meter personajes secundarios sin peso en la trama, a organizar los deseos de Eve y Villanelle lejos de ellas mismas y a prolongarlo tanto que al final el último capítulo no consigue ni responder las preguntas esenciales de la serie ni a resolver la acción que lastimosamente hemos tenido que aguantar las dos últimas temporadas sobre la realidad de Los Doce

Impecables de todas formas y a pesar de todo las interpretaciones de los de siempre Oh y Comer, Bodnia y Shaw, también la consistente Anjana Vasan como Pam, aunque lamentablemente su personaje no tiene un peso real en la trama principal pese a llevarse otra gran parte del metraje de esta temporada que necesitaba ser más directa, más concisa, puede que incluso más sarcásticamente oscura que las anteriores. Lo que hemos recibido es un humor violento edulcorado, a veces queriendo rozar lo políticamente incorrecto pero de formas manidas. Y sin la belleza de los colores de los trajes de Villanelle a veces hacían esta temporada como una especie de extraña copia de un Killing Eve que fue de las más aclamadas en sus dos primeras entregas.

AHORA VOY CON MEGA SPOLIERS DEL FINAL DE LA SERIE...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Lecs
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
22 de agosto de 2022
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
La vi de una sentada porque me encantan las series sobre comediantes, y sobre todo por tratar de forma tan maravillosa, sin resultar cansina ni impuesta, temas como el racismo, la masculinidad negra, el perfilamiento racial, la vida en la periferia de París para los franceses "de segunda" que suelen ser descendientes de aquellos venidos de las antiguas colonias francesas, los límites del humor, e incluso la que pudiera ser la trama más cliché de la niña rica que quiere ser artista, se torna un relato sobre la hiperexigencia y el cuidado de una madre neurodivergente.

La vida de estos cuatro personajes y sus redes de amigos y parejas está tan bien perfildada, que no hay secundario que sobre ni situación que resulte un lugar común de muchas producciones, incluída la trama de Jean Siuen/Bling, un humorista de bromas envejecidas que está en una crisis existencial profunda y su forma de lidiar con ello es continuar ciclos de autodestrucción y negación.

Maravillada con el talento de Mariama Gueye/Aïssatou los monólogos que suelta, su seguridad en su relación con su entorno e incluso la forma en que navega con los retos (y resoluciones) de su matrimonio que también podrían caer en un cliché pero donde hay espacio para buscar una relación equitativa. Es muy fresca la forma de reírse de sí mismo que tiene Younes Boucif/Nezir hablando en su monólogo de su relación con su padre y cómo la falta de una mujer en la casa (su madre) le hace ver qué significa el machismo. El padre de Nezir es carismático, gracioso, tierno, a veces un poco clown y con ideas peregrinas que hace que sea un secundario delicioso cada vez que aparece. El personaje de Elsa Guedj/Apolline, muy dentro de lo indie, es también particular en la forma que conecta con el amor y el sexo y su propia sexualidad.

Ojalá continúen sus aventuras en una segunda temporada.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Lecs
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
22 de agosto de 2022
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
La he tenido que ver dos veces, porque la película pide calma: detenerse en las luces y las sombras, los gestos y los silencios entre Irene y Clare, o Irene y Brian (su marido, un reputado médico de piel más oscura), o Irene o su criada Zu (de piel muy oscura) o Irene y sus hijos (a los que no les quiere contar la violencia que encontrarán por el hecho de ser negros, los insultos racistas o los linchamientos)

La película nos pide que acompañemos a Irene en este viaje en el que sus premisas (Abrazar y cuidar la cultura afroestadounidense), todo lo que ha construido en su comunidad en Harlem (que en la época que retrata la novela original y el film era el centro de la cultura afroestadounidense), queda cuestionado al reencontrarse con Clare, una antigua amiga del instituto, que en edad adulta se hace pasar por blanca y está casada con un supremacista blanco que "odia a los negros".

Dentro de las comunidades afro este pasar por blanca (Clare dice que lo hace por supervivencia), aunque puede ser visto desde la cultura afro como una traición en pos de acceder a una libertad prestada pero con mayores oportunidades, está y sigue presente de forma generacional un siglo después, y la propia Rebecca Hall inicia el proceso de realizar esta película hace más de una década cuando finalmente descubrió que su abuelo era afroestadonuidense de piel clara y realizó el mismo proceso que Clare.

Personalmente, la película no es sencilla de ver ni por formato ni por el blanco y negro, ni por el ritmo pausado ni por la necesidad de conocer el contexto que puede significar pasar por blanca para una mujer negra huérfana de piel muy clara(en EEUU esa categoría de mestizo no existe) a principios de siglo XX, pero es una buena forma de entrar en ese mundo que ya estaba bien establecido hace 500 años y hace 100 y del que todavía esta película puede ayudarnos a desenredar situaciones de hoy día (como la estratificación del color de piel y sus privilegios dentro de la cultura afro, la imposición de una maternidad modelo, el saber estar dentro de lo que se considera adecuado para una mujer casada de clase media-alta, la charla que los padres afroestadounidenses realizan a sus hijos para prepararles sobre la violencia policial, principalmente; el acceso de las personas blancas a lugares de celebración de la cultura afro como una especie de fetichización).

Entre Irene y Clare crece una pulsión destructiva pero maravillosa que palpita en los momentos que Irene se permite ser atravesada por lo que le transmite una Clare resolutiva, alegre, dispuesta a continuar navegando entre sus dos indentidades para ser feliz. En otros, Irene lucha por en un mundo que parece una pantomima y va resquebrajándose por todo lo que plantea Clare a su familia y su entorno amistoso. Es interesante la representación cinematográfica de Irene en sus peores momentos, llevando a cambiar el tono de la película, a hacerla aún más claustrofóbica, realmente porque ella se siente así, aunque estén en una fiesta.

La intencionalidad de lo ambiguo y lo que habitan los grises del film es lo que da al conjunto un relato sorprendente y que invita al espectador a seguir indagando en los personajes y lo que plantean. Efectivamente, la propia autora Nella Larsen posiblemente no pudiera haber sido más explícita en la relación entre las dos mujeres ni tampoco más explícita en otros aspectos para poder ver publicado su trabajo, por lo que el final abierto y la posibilidad de interpretación del relato es lo que nos queda de un excelente trabajo escrito y también de esta adaptación de Rebecca Hall

Pasmada con todo el panel interpretativo, especialmente Tessa Thomson y Ruth Negga, pero André Holland tampoco deja indiferente. Un trabajo muy cuidado y al detalle que he disfrutado navegando dentro de lo que sugiere y lo que supone esta ventanita de unos meses en la vida de Irene que comienza el día que se hace pasar por blanca para ir de compras y tomarse un refresco en una cafetería.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Lecs
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow