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España España · Granada
Voto de Kikivall:
8
Intriga. Thriller. Cine negro Una joven muda (McGuire) trabaja en una gran mansión como criada de una anciana enferma. Cuando un asesino en serie empieza a aterrorizar al vecindario, la señora se preocupa por la seguridad de su bella sirvienta. De este film de suspense se dijo que Hitchcock no lo hubiera hecho mejor. (FILMAFFINITY)
23 de septiembre de 2022
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Magnífica obra de arte del director de origen alemán Robert Siodmak, una angustiosa cinta perfectamente llevada con total suspense e intriga sobre una joven muda que bien podría ser la víctima siguiente de un sádico asesino que mata a muchachas con defectos físicos.

Siodmak, con la inestimable ayuda de un gran operador de fotografía Nicholas Musuraca, consigue una atmósfera extraordinaria de inquietud y zozobra que alcanza de lleno al espectador.

La cosa es así: una joven muda (McGuire) trabaja en una mansión como criada de una mujer mayor enferma (Barrymore). Un asesino en serie aterroriza a la ciudad, la señora intuye algo y se preocupa por la seguridad de su bonita sirvienta.

El excelente guion Mel Dinelli es ajustado y suena auténtico, una historia de crímenes en serie basada en la novela de Ethel Lina White, “Some Must Watch”, ambientada en una pequeña ciudad de Nueva Inglaterra en 1906. Escenarios victorianos y atmósfera gótica, con una ruidosa tormenta en la noche que dura a todo el metraje.

A su vez tiene una gran música -absorvente y angustiosa- de Roy Webb, junto a la, como decía, mágica fotografía de Nicholas Musuraca (B&W), que sabe manejar las tonalidades de los claroscuros en este filme de intriga e incluso terror, sin olvidar la solidez de los ángulos de cámara y cambios repentinos de énfasis de cámara.

En el reparto la estatura de Dorthy McGuire como personaje central, no hace sino mostrar a las claras su talla como actriz, como sirvienta privada a la vez que enamorada; un papel de muda que no resulta nada fácil. Una gran Ethel Barrymore en su rol de rica excéntrica postrada en su cama que se huele la tostada. El reparto se acompaña de un elenco de lujo: George Brent, Rhonda Fleming o Rhys Williams.

Esta historia rinde homenaje al cine expresionista alemán, con grandes dosis de compló y elementos de miedo, y un poco de psicoanálisis sencillo (la teoría del trauma único que dejó sin habla a la joven).

Otro de los grandes atractivos es como Siodmak logra que, aunque todo sea muy teatral, especialmente la unidad de espacio, el filme no pierda un gramo de fuerza.

En fin, cine de alto voltaje del cual se dijo, quizá un tanto exageradamente, que Hitchcock no lo hubiera hecho mejor.
Kikivall
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