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Voto de Cinéfilo de mierda:
7
Acción. Intriga La vida del doctor Richard Kimble, un reputado cirujano con una bella esposa y una lujosa casa en un elegante barrio de Chicago, se desmorona el día en que su mujer es brutalmente asesinada por un misterioso manco. Kimble es acusado del crimen y condenado a muerte. Mientras lo trasladan a la cárcel, el autobús donde viaja sufre un accidente que facilita la fuga de varios presos, entre ellos el propio Kimble. El detective Samuel Gerard ... [+]
23 de junio de 2018
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Le toca el turno a una obra que puede ser considerada de culto; una de aquellas joyas que, sin pretenderlo, establece un género, una temática y un conjunto de estructuras que serán repetidas los años posteriores. Su nombre es “El fugitivo”, está dirigida por Andrew Davis y protagonizada por Harrison Ford y Tommy Lee Jones, y se puede considerar la madre de un subgénero tan interesante como el thriller conspirativo (con el permiso de “Con la muerte en los talones”, claro).
La historia empieza con el héroe clásico de este tipo de propuestas: un ciudadano normal y corriente –en este caso, cirujano- envuelto en una cuestión tan turbia como el asesinato de su mujer. El tipo será condenado a pena de muerte, pero en el camino pasan cosas y BUM! Es libre. Comenzará una huida trepidante, mientras el pobre cirujano lucha por demostrar su inocencia.
“El caso Bourne”, “Misión Imposible” (la primera y la tercera), “Old Boy”, “No es país para viejos”, “Minority Report”, “Plan de vuelo”, “The Game”, todas las putas películas de Collet-Serra… la lista es inabarcable, y el género no muestra síntomas de agotamiento. Seguro que os suenan muchos de sus tópicos: la primera aparición del antagonista que se salva por los pelos, el protagonista con recursos, la ayuda del amigo/persona turbia de los bajos fondos, la persecución entre la multitud, el giro loquísimo final… Si hay que nombrar una pionera, esa es esta obra que bien podría haber sido rodada el año pasado.
Quizá Hitchcock se le adelantara en cuanto a temática, peeeero lo que es innegable es que “El fugitivo” es el padre del thriller conspirativo MODERNO, y se puede apreciar en su ritmo, en su narrativa y en su concepto del espectáculo. La obra entremezcla la amplitud de recursos del cine clásico con el frenetismo y la intensidad del moderno, en una comunión deliciosa que es IMPOSIBLE que disguste a nadie. Es cierto que algunas de las secuencias están algo más estiradas de lo que deberían –imagino que aprenderían a contenerse después-, pero son sensaciones banales que no desmerecen a una obra que, aun a día de hoy, aguanta sobradamente.
Donde sí se puede atizar con más fuerza es en su duración, y es que la travesía del bueno de Ford es estúpidamente larga. Es cierto que cada uno de los pasos que siguen sus protagonistas asombra por su naturalidad, sin que los guionistas hayan dejado nada al azar, pero la omisión y la condensación de algunas escenas habrían hecho el visionado bastante menos duro.
En cualquier caso, es indiscutible que nos encontramos ante un clásico moderno al que no podemos hacer otra cosa que agradecer su existencia. “El fugitivo” se mantiene viva, actual, cuenta con muchas de las escenas más míticas de la historia y sabrá gustar a todo tipo de público. Aconsejo mucho su visionado.
Cinéfilo de mierda
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