Rocky III

A comienzos de los ochenta Stallone vio que lo que realmente importaba al público era la acción pura y dura. Así que eliminó el dramatismo de las primeras entregas y escribió el guión de la tercera pensando únicamente en satisfacer a la audiencia con acción pura y dura. El argumento es el de siempre, pero como he dicho, prescindiendo de la parte dramática.

Clubber Lang, un debutante Mr T, es un duro boxeador que pretende arrebatar el cinturón de campeón del mundo a Rocky. Mientras éste se dedica a participar en pachangas de lucha libre, inaugurar estatuas con su nombre y disfrutar de la vida, Lang se prepara duramente para combatir contra Rocky. Apollo Creed que se ha convertido en un gran amigo de Balboa, se dedicará a aleccionar al campeón enseñándole todos los trucos para enfrentarse al fanfarrón de Clubber Lang.

La fórmula del éxito volvió a funcionar con una entretenida película pugilística realzada con el temazo de Survivor "Eye of the tiger". La cinta gana en comercialidad pero pierde en calidad y es que hay algunas escenas bastante ridículas como aquella en la que Rocky le canta una canción a Adrian en la cama o en la que aparece saltando a la comba para un spot comercial.

Reconozco que no puedo ser objetivo con esta película, para mi la MEJOR de una saga a la que valoro de forma muy especial!
Rocky en sus inicios es la historia de un perdedor de la vida, que logra redimirse haciendo lo que mejor sabe hacer: boxear. Para luego evolucionar a una historia de un buen hombre que debe seguirse esforzando mucho para hacerle frente a los nuevos retos de la vida (sus rivales de boxeo), y finalmente vencerlos dejando valiosas lecciones de superación personal, aun cuando todo parezca perdido... "el ojo del tigre man, la mirada del tigre, no lo olvides"...
La secuela que nos ocupa quizá ya no sea tan virtuosa -artisticamente hablando- como la original, pero creo que se las arregla para reunir un poco de todo de lo que mas nos gusta a los aficionados de la buena acción: actuaciones a la altura, argumento seguible, acción emotiva, banda sonora inolvidable y momentos para la posteridad, como por ejemplo aquella trágica escena luego de la primera derrota de Rock ante Clubber, frente a Mickey... confieso que aun se me hace un nudo en la garganta cada vez que la veo, y quizás exagere pero creo que cuando Rocky le dice a su agonizante mentor que "ganó" podemos estar ante una de las escenas mas tristes de la historia del cine.

Alguna vez te has sentido "bajoneado"? que tus preocupaciones del día a día te empiezan a ganar? o con dudas acerca de tus capacidades?, te doy un consejo: cuando estés en "esos" días ponte Rocky 3, métete en la piel de Balboa y cuando llegues a ese triste momento mencionado y empiece el punto de quiebre de Rock de la mano de Apollo en aquel entrenamiento (con el aliento de sus incondicionales) y aquella "tonadita" del temazo de Survivor... levántate con el!!! ...y cuando veas a Rocky Balboa regresar al ring a plantarle cara al terrible Clubber por su revancha, mírate a ti mismo allí! plantandole cara a tus problemas, con renovada decisión!, mirándolos de frente... asi como Rock mira a su enemigo!... a mi me resulto y les digo que Stallone -ya solo por esto- merece todo el respeto del mundo... "la mirada del tigre Sly"... al menos yo lo tengo claro, cuando me vuelva a caer, ya no lo pensare dos veces!... de esas pelis que son algo mas.

A todos nos llega ciertos momentos de la vida:
-Felicidad.
-Tristeza.
-Superación.
-Caídas.
-Muertes.
-Asentamiento.
-Reconocimiento.

Todos estos conceptos está expuestos implícitamente (y explícitamente en algunos casos) en esa secuela. Pero bajo mi punto de vista, son 2 especialmente los que reflejan este film:
1. Acomodación.
2. Pragmático.

Rocky llega a su punto álgido en la segunda parte de esta saga, donde vence a Apollo. Es entonces cuando su fama sube hasta puntos insospechados, al igual que su nivel de acomodación. Después de ese gran combate, Mickey intenta protegerle con combates "fáciles" (que no amañados).

Stallone continúa dirigiendo y protagonizando la saga. No cabe duda de que la dificultad no sólo está en llegar a ser Campeón del Mundo, sino en mantenerse en ese escalón, del que te quieren desbancar múltiples púgiles por el prestigio, la fama y el dinero.

Ahí es donde aparece un retador duro, con ambición ante un Rocky acomodado, al que le lleva una cuidadosa y estudiada carrera su entrenador con púgiles tan acomodados como él. Preciosa película de superación personal, de retornar a los orígenes, de recuperar la mirada del tigre.

Destacar la soberbia actuación de Talia Shire, una gran actriz a la que conocimos como chica tímida y hermana alocada en el Padrino, siempre en papeles de secundaria oscura. Aquí, ante la incapacidad del resto de los actores, da una lección de actuación en su brillante conversación motivacional con Rocky, una actuación de diez.

Película de boxeo puro y duro. Un placer para los amantes del noble arte. Notable, 8.

La sombra de la primera entrega de Rocky es oscura, opaca y densa, poderosa, hermética, abigarrada, filosa, acerada y puntiaguda pero, sobre todo, encierra en su penumbra el germen de la destrucción.
Todo lo que viene después se resiente porque no se le puede igualar.

Por eso este tercer episodio, tratándose de una buena película, produce cierta decepción.

El argumento es bueno y la interpretación -no sólo la de S. Stallone- merece ser destacada, la combinación de elementos formales y materiales es muy correcta y la adecuación de acción y ritmo no admite reproche.
Pero, como en la vida misma, resulta casi imposible sustraerse al prejuicio de la expectativa.