La maldición de las brujas

No conocía nada de esta película hasta hoy, que es cuando la he visto. Menuda sorpresa, ideal para ver en familia con niños, pero también puede ser vista con la única compañía de las palomitas, como ha hecho un servidor. Dicen que se trata de una adaptación de un libro. Queda pendiente hacerle una lectura a tenor de lo que he visionado.
Pues a lo que vamos; el film presenta grandes aciertos, entre los que sobresale un gran vestuario. La magia capta la atención de cualquiera al ver las peripecias de unas malvadas brujas con unas pretensiones enormes de convertir a los niños en "adorables" ratones. A destacar: el personaje magníficamente interpretado por Anjelica Huston de bruja "jefa" y su transformación, el movimiento de los ratones, la aparición de personajes simpáticos como el interpretado por Atkinson al que no solo lo tenemos porque ver en "Mr Bean" o el de la abuela, el tono amable y liviano, y por último, pero no menos importante, la sensación de que nuestro alma de niño es rescatada por unos momentos, olvidándonos de cuestiones metafísicas impuras.

Érase una vez...mis palabras favoritas para películas de fantasía.

Y es que aquí tenemos una película de esas de los noventa, de la antigua escuela, cuando la corrección política estaba lejos, muy lejos, y se rodaban historias tan mágicas como ésta en total libertad artística como esta película basada en el divertido libro superventas de Roald Dahl, "Las brujas".

Un niño, Luke, cuya abuela vive en Noruega se ve obligado a quedarse a vivir con ella al quedar huérfano de padre y madre. Será aquí cuando su abuela para distraerlo comience a contarle las pistas que debe de seguir para distinguir a una bruja disfrazada de mujer.

Al viajar deciden pernoctar en un hotel, donde se celebran la convención de brujas.
Allí es donde hace una entrada muy triunfal, Anjelica Huston, como la Reina de las Brujas, con una figura perfecta de alta dama siniestra y misteriosa, un papel muy fiel a su estilo de Los Adams.

Y es que la presencia magnética de Anjelica Huston no pasa inadvertida, su gran talento para hacer pasar a través de su propia personalidad los diferentes personajes y focalizarlos con pureza es lo que la ha hecho una de las grandes damas del siglo XX del cine, junto a una innegable elegancia.

El resto de personajes, como el pequeño Luke, el otro niño, la abuela, están perfectamente interpretados, con un Jasen Fisher niño o un Rowan Artkinson cuya cara asociada para siempre a Mr. Bean logra obtener una potente presencia cómica en este tirón de Dahl.
De igual manera Jim Carter, famoso por su papel de mayordomo Carson en "Downton Abbey" aporta como chef exagerado su granito de arena al unir la comedia más negra, con la aventura, el miedo y el enfrentamiento entre los dos pequeños ratones y la abuela para desbaratar el malvado plan de las brujas.

El maquillaje de esta película mereció una nominación de la academia, no sé si se la dieron o no, pero tanto Anjelica como el resto de las actrices que se maquillaron, hicieron con los responsables del maquillaje un trabajo insuperable, rara vez visto en otras producciones de fantasía.

Atención a Jane Horrocks, y su fugaz pero sólida interpretación.

Cualquier cosa por pasar una tarde en familia viendo esta divertida película, sobre todo si se trata de una tarde lluviosa otoñal.

Y por supuesto, una excusa formidable para disfrutar de esa gran reina de Hollywood llamada Anjelica Huston.

Roald Dahl y Nicholas Roeg unieron sus talentos para hacer una cinta que con el paso del tiempo sigue teniendo esa bella magia de lo que es el cine de entretenimiento y familiar.

Todo el reparto en general están debidamente escogidos en su respectivo papel interpretativo: Anjelica Huston, Mai Zetterling, Jasen Fisher, Jane Horrocks, Anne Lambton, Rowan Atkinson, Bill Paterson, Brenda Blethyn, Charlie Potter.

De todos ellos destaca Anjelica Huston como la reyna de las brujas, los efectos de transformación siguen siendo un asombro hoy en día.

Cine sin más pretensiones que entretener. Eso es "La maldición de las brujas" y nada más. Su corta duración y los detalles que explican de las brujas son lo mejor, amén de una Anjelica Huston que, objetivamente, es el único personaje de toda la historia. El único con posibilidades, y nadie podía hacer mejor de bruja que Anjelica Huston.

En otras manos, esta historia sería ridícula y hasta bochornosa, pero todo está tratado desde un prisma tan de cuento infantil que no causa ese efecto. Incluso la parte de los ratones no desentona. Ese es su mayor éxito: conseguir que te involucres en una historia estrafalaria con el único objetivo de pasarlo bien.

Esta cinta será siempre recordada por ser de las últimas producciones escritas de Jim Henson antes de fallecer. La fantasía se muestra claramente en esta película pero también con ese terror atávico que hemos tenido desde niños a las historias de brujas que raptaban niños de verdad. Pudo ser traumática por el aspecto terrorífico y caricaturesco pero digna de recordarla con perfecta nostalgia.