El mentalista (Serie de TV)

Un tipo muy listo e ingenioso cuyos métodos son cuestionados (como house), una serie de policias, de investigación de crímenes (como CSI) pero con la particularidad de resolver los crímenes con el "ingenio" o "el poder mental" del protagonista.

No es que el mentalista sea una mala serie es que el argumento y la tipología de los personajes en la actualidad están ya muy trillados. En definitiva, hay muy buenas series mucho mejor que esta y más originales que esta, mejor perder el tiempo con otras.

Si algo puede resolver, lo resolverá

Corolarios:

1- Todo se soluciona tan rápido como el mentalista quiera.
2- Todo lleva el tiempo que crea necesario el mentalista.
3- Si cabe la posibilidad de que varias cosas salgan mal (véase el caso de que van a matarlo y se salva con un mísero teléfono móvil), el mentalista lo solucionará todo llamando a su compi guay para que lo salve.
4- Si el mentalista intuye lo que hay detrás de una puerta, está en lo cierto , son grafitis, al momento aparecerá una cara sonriente pintada de rojo.
5- Cuando las cosas se dejan a su aire, el mentalista resuelve las cosas con el rabo.
6- En cuanto el mentalista se ponga a hacer algo, eso será la correcto, y da igual que haya incumplido normas gubernamentales por las que podría ir a la cárcel, él es más sabio que Yoda.
7- Cualquier solución es correcta para el mentalista.
8- Es inútil hacer cualquier cosa a prueba del mentalista, es tonto, y los tontos son muy ingeniosos.
9- La situación siempre está de lado del mentalista.
10- El mentalista crea las situaciones

Filosofía del mentalista:

Bájate los pantalones que te la meto mientras resuelvo un par de casos.

Qué grima da este buen hombre. Es innenarrable lo repelente que resulta. En un mundo normal sus compañeros le odiarían porque a su lado ellos parecerían totalmente retrasados, y porque aparenta, y es, directamente, gilipollas. En la serie dichos compañeros son, en efecto, totalmente retrasados, pero en este caso adoran a su líder, El Mentalista, un Ser Supremo omnipotente y omnisapiente cuyo repertorio de poses, miraditas, muequitas y sonrisitas puede producir cáncer con ver un solo episodio. La forma en que este Ser analiza los lugares y las personas, con ese aire de suficiencia burlona y engreimiento, bastaría para detestarlo...
El problema de fondo reside en que, con excepciones muy honrosas ("Big Love", "Los Soprano"...) las series de televisión estadounidenses están diseñadas para la América paleta. La edad intelectual de esa gran masa de norteamericanos que creen que España es un estado mexicano, entre otras divertidas ocurrencias, corresponde en Europa a la de los niños de no más de 11 años, o como mucho 13 si ven habitualmente las televisiones generalistas españolas en horario infantil, cosa que produce un pequeño retraso en el desarrollo cognitivo.

Típica, tópica, absurda, cargante, mal hecha, pesada, cansina, etc, etc, etc.
Sí, como yo, estás hasta los mismísimos de seriales USA policíacos calcados unos de otros: ¡HUYE DE ESTE BODRIO INSENSATO!. No tiene absolutamente interesante. Más de lo mismo, y mal hecho.
Insoportable.
Lo incomprensible (¿o no tanto?...), sus cifras de audiencia...
¡Puffff!...