Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo

Javier Fesser es un visionario, y uno de mis directores preferidos. Aunque ahora voy a incidir en lo primero, si a bien tienen.
Cuando en 2003 estrenó "La gran aventura de Mortadelo y Filemón", todos pudimos darnos cuenta de que el film llegaba con años de adelanto para lo que se hacía en España. Ahora en 2014, más de una década después, vuelve a repetir la jugada. Fesser estrena "Mortadelo y Filemón contra Jimmy el cachondo", otra obra que, esta vez en el terreno de la animación, llega con sus buenos años de adelanto. Lo dicho. Javier Fesser, un visionario.
"Mortadelo y Filemón contra Jimmy el cachondo" no solo no tiene nada que envidiar al mejor cine de animación internacional, con sus Pixar y sus Ghibli, sino que muy posiblemente sea la mejor cinta de animación del año. Ale, ya me he calentado.
Y es que todo en la película es pluscuamperfecto. Su apartado visual es inmejorable, con un diseño de escenarios y personajes con el que todavía estoy asombrado. En lo argumental y narrativo la película respira a la perfección ese espíritu de los cómics de Ibáñez. Todos los gags, con el slapstick de ritmo alocado como principal bandera, funcionan con precisión milimétrica. Esto lo sabremos apreciar, sobretodo, los que hemos devorado aventura tras aventura de los dos agentes. Público al que especialmente va destinada la cinta. Un aspecto, el argumental y narrativo, en el que Javier Fesser subsana los defectos de "La gran aventura de Mortadelo y Filemón".
Solo un par de cosillas he echado de menos en "Mortadelo y Filemón contra Jimmy el cachondo". Por un lado, hubiera necesitado más presencia de secundarios como Ofelia o Bacterio. Y por otro lado, al igual que se aprovecha a Rompetechos, hubiera estado muy bien que otros clásicos de Ibáñez también hubiesen tenido su pequeño cameo, como Pepe Gotera y Otilio, por ejemplo. Y máxime cuando había evidente hueco para ellos. Pero en fin, se que Fesser es avispado y se guarda estas pequeñas cosas para futuras secuelas, que ojalá recibamos. Yo los brazos abro desde ya.
En definitiva, "Mortadelo y Filemón contra Jimmy el cachondo" es la cumbre, a día de hoy, en lo que a adaptaciones cinematográficas de esta pareja de burricalvos aparecidos por primera vez en 1958.

Simplemente espectacular, si te gustan los tebeos de Mortadelo y Filemón esta es tú película, si eres un niño te lo vas a pasar bomba (nunca mejor dicho) y si ya eres un adulto volverás a la infancia reviviendo aquellas momentos que pasabas leyendo a la pareja más increíble de agentes secretos.
Se nota que Javier Fesser es un enamorado de los personajes de Ibáñez y recrea todo su universo de una manera magistral, están todos, desde el súper Vicente, la señorita Ofelia, el doctor Bacterio, la TIA, Rompetechos, pasando por toda una galería de malos auténticamente desternillante, donde destaca Jimmy el Cachondo que guarda cierto parecido sospechoso con el Marty Feldman del jovencito Frankenstein.
Lo dicho, sièntate, ponte las gafas y adèntrate en el universo de Ibáñez. Vuelve a ser un niño, dejate llevar.

Bueno, ha sido como ser un crío otra vez, y meterse de lleno en los comics de Mortadelo y Filemón, ver al tonto del jefe llevarse todas las hostias posibles, al listillo de Mortadelo con sus disfraces saliendo bien parado (aunque no siempre), el Súper con su mal genio, Ofelia con su gran aportación, el cegato de Rompetechos...
Ha sido una aventura completísima, digna de Ibáñez. Me han saltado las lágrimas en alguna ocasión, es un humor totalmente mortadeliano: muy absurdo y muchos golpes. Pero no puedo pedir más. La escena de la persecución es simplemente sublime, tienes que dejar a un lado los complejos de que la sala esté llena de buenos padres de familia con sus niños y soltar la carcajada que te sale de lo más profundo.

Quizás si en tu vida has tocado un comic de Mortadelo y Filemón esta peli no te guste, como es su día le ocurrió a mucha gente con la película de animación de Tintin, pero creo que vale la pena arriesgarse de todas formas, si te sale bien la jugada vas a pasar un rato muy entretenido.

Gráficamente me ha gustado mucho, he leído por algún lado que es digna de Pixar, y así es, muy muy buen trabajo. La verdad es que personalmente creo que luce mucho más una película sobre este par de agentes tarados en animación que con actores de carne y hueso, sin punto de comparación.

Espero que saquen una segunda entrega, y que siga siendo tan fresca como esta!

Se puede afirmar con total seguridad que Javier Fesser es un fan confeso de los tebeos de "Mortadelo y Filemon", y desde hace muchos años ha estado empeñado en trasladar a la gran pantalla los estrafalarios personajes de Francisco Ibañez; de hecho, también se puede decir que el humor absurdo de Fesser comparte muchos lazos en común con el de la Editorial Bruguera, la cual Ibañez plasma sus entrañables tiras cómicas, sirva como ejemplo: sus primeros cortos, como "Aquel Ritmillo" (1995), o su opera prima "El milagro de P Tinto" (1998).

Primero lo intentó con "La gran aventura de Mortadelo y Filemón" (2003), que tras un esfuerzo titánico por adaptar sendos personajes de la viñeta a acción real, el resultado final contenía más luces que sombras, siendo uno de sus grandes aciertos los notables efectos especiales, que plasmaban con bastante fidelidad la estética del tebeo; sin embargo, tanto su guión como algunos personajes no estuvieron a la altura, convirtiéndola en una película fallida. Ahora, tras estar varios años trabajando hasta el más mínimo detalle, llega esta conversión a animación estereoscópica 3-D, en el que cabe decir que alberga lo mejor de los tebeos de Ibañez, con la imaginaria de Fesser, valiéndose de los aciertos que tuvo en 2003 con su adaptación de 'carne y hueso', y enmendando los muchos errores cometidos en el pasado, para realizar una adaptación mucho más fiel al espíritu original de las tiras cómicas.

Todo en ella funciona a las mil maravillas, como esa encadenación de divertidos gags constante, en el que entremezcla el clásico humor 'slapstick' (el golpe y porrazo típico del cine mudo), con el genial humor absurdo de Fesser; además, contiene un ritmo endiablado, y una factura técnica deslumbrante (a cargo de 'Ilion Animation Studios', responsables de la estupenda "Planet 51" [Jorge Blanco, Javier Abad y Marcos Martínez, 2009]) a la altura de cualquier producción de Pixar o Dreamworks. Mención especial merece la larga secuencia inicial del sueño de Filemón, que parodia a los filmes de "Iron Man" y los de la saga del único agente secreto con licencia para matar, James Bond 007; también las continuas puyas a la condición política y social (genial el gag de "El gran Fulano"); y asimismo, las hilarantes apariciones del inconscientemente torpe Rompetechos, que te arrancan de forma irremediable más de una carcajada, aunque personalmente me hubiera gustado ver también a otros entrañables personajes del universo Bruguera, como "Pepe, Gotera y Otilio", el "Botones Sacarino" y a los del "13 Rue del Percebe".

En síntesis, "Mortadelo y Filemon contra Jimmy el Cachondo" es una película divertidísima, que a pesar de que no llega a ser la adaptación definitiva de los tebeos poco le ha faltado, ya que sin lugar a dudas, es posiblemente la única en más de cincuenta años que le ha hecho justicia, y eso es más que meritorio.

Después de las bonitas incursiones de los Estudios Vara en los años sesenta y la fallida serie de televisión emitida en Antena 3, Mortadelo y Filemón vuelven a ser animados aprovechando los avances del nuevo siglo. Y verdaderamente el resultado es superior al esperado. Técnicamente la película es muy llamativa, con movimientos de los personajes muy dinámicos, efectos muy cuidados y una confección y puesta en escena superior a previas obras españolas como Tadeo Jones o Planet 51. Ello nos da pie a pensar que tenemos medios más que suficientes para no envidiar nada a Pixar ni a Disney. La cuestión del guión es algo más personal.

La película, aún conteniendo muchos aspectos propios del cine de Fesser (de entrada no hay que olvidar que son los MyF de él y no de Ibáñez) sí que ofrece muchos guiños a los cómics como los clásicos detalles de fondo. En ese sentido hay que destacar el prólogo. La historia nos divierte desde el primer momento con escenas para todos los gustos (algunas realmente frenéticas) en las que además hay simpáticas parodias de personajes famosos de la televisión. Ahora bien, también existen otras que se alargan demasiado o que son un desvarío que no acaba de entenderse bien. Ya se sabe que en los cómics muchas veces no hay lógica, pero en la película no acaban de terminar bien y por ello reducen lo que ya de por sí es una obra brillante.

La introducción del personaje de Irma es otro guiño a uno de los más recordados de la serie cómica que ya no están. Pero hubiera sido más evidente si su vestido fuese rojo en lugar de azul. Además, el que realmente estaba colado por ella era Mortadelo. De otra parte, la de Rompetechos es sin duda la más acertada. Un entrañable personaje que además está previsto que en un futuro no muy lejano protagonice una película. Y su intervención aquí es la mejor carta de presentación. En cuanto al Tronchamulas, tiene todas las características del típico matón fortachón de los cómics y si además metemos de por medio un invento del Bacterio, el resultado es aún más tronchante.

En lo que se refiere al doblaje, es un acierto contar con algunas de las voces de las películas de imagen real como son los casos de Berta Ojea (Ofelia) y Mariano Venancio (Súper).