El hombre que nunca estuvo

A los hermanos Cohen se les ocurrió hacer otra genialidad, no voy a explorar a profundidad los aspectos técnicos que han estado impresionantes y que han sido abordados con amplitud, Billy Bob Thornton simple y sencillamente roza la perfección con su interpretación, "da vida" a éste barbero que no es que ésta cansado de la vida, sino que su naturaleza lo ha obligado siempre a "vivirla" desde lejos, en calidad de observador, es magistral observar a lo largo del filme las situaciones que envuelven al barbero y la forma en que éste reacciona.
He leído algunas críticas donde se esbozan comentarios de que la película deja cabos sueltos, con lo cuál estoy totalmente en contra, creo que el montaje ha sido fenomenal y logra atar a la perfección todos los cabos.
El guión ésta a la altura de toda la estructura técnica del filme, mas allá de intentar ser un film pretencioso, logra golpeárnos con ciertas dosis de realidad y de análisis social, además de lograr mezclar oportunamente dosis de comicidad.
El resto del elenco no ha desentonado, Mcdormand , Badalucco y Gandolfini han logrado preparar el marco perfecto para que el personaje de Thornton pueda desarrollarse a cabalidad.
El barbero logra analizar casi anatómicamente todas las personas que lo rodean, y a medida que la narración va avanzando nos va diciendo entre líneas que quizá el no había planeado su vida así, pero es la forma en que le había tocado vivirla, y que hay muchas cosas que se escapan de sus manos, y otras cosas que simplemente no le importan lo suficiente.
Recomiendo fuertemente éste filme cargado de originalidad, estilo narrativo impresionante, dosis de humor negro y sobretodo la brillante actuación de Thornton, que definitivamente sí estuvo allí.

... no es lo mismo que el hombre que dirigió la película “El hombre que nunca estuvo allí”.


Creo que el planteamiento narrativo de esta película no se ha captado correctamente. Se acerca a la diana alguien cuando apunta: “el análisis que hace el profesor de piano sobre la joven Scarlett Johansson podría ser perfectamente el análisis de la propia película”. Yo añadiría un matiz, sin duda, significativo: “el análisis que hace el profesor de piano sobre la joven Scarlett Johansson podría ser perfectamente el análisis de la propia NARRACIÓN Y DEL PROPIO NARRADOR de la película” ¿Que este film te resulta apático, como sin alma? Puede ser, pues el narrador del mismo es apático y como sin alma. Eso no quiere decir que realmente la película sea apática y como sin alma. De hecho no es así gracias al arte del director. Porque no hay que olvidarse de lo principal, señores, a saber: que esta película la narra en primera persona su protagonista mismo; por eso el narrador es omnipresente en el relato, ¿cómo no lo va a ser? Narra lo que ocurre en su presencia, necesariamente. No es un narrador omnisciente; el espectador, en todo momento, no sabe más de lo sabe el protagonista.


En estos dos aspectos reside, para mí, la genialidad del director y de la película (a parte de las innegables cualidades técnicas): en que el tono de la narración concuerda con el carácter del protagonista, que no director (primer nivel); y, sobre todo, en el contraste resultante de este tono con el de los graves hechos narrados (segundo nivel). A este contraste, que cada cual le ponga el calificativo que más le convenza: “sarcástico”, “deshumanizado”, “cómico”, “desesperanzador”...


PD: si la película te ha parecido aburrida e inane es que no has llegado al segundo nivel.

Junto con "Muerte entre las flores" la peli que más me ha gustado de los Coen. Una peli redonda, con un ¿estudio de personajes, se dice? inmejorable. Personajes recreados con muchísimo acierto, vivos, y cuadrados por los actores. El casting o selección de los mismos no ha podido ser más acertado en esta ocasión (algo en que los Coen no suelen fallar con esos tipos tan singulares que se buscan). Desde el propio, protagonista, su mujer, su cuñado, el timador, la chica cándida y sobretodo ¡ el abogado ! muy bien recreados y creíbles. Creo que es la peli en la que más me ha atraído la creación de personajes, claro que la voz en off ayuda bastante.

No se hace larga, es cine negro en estado puro, la ambientación perfecta y la elección de la música al piano muy original (creo que no he llegado a escuchar ningún saxo a pesar de los cigarros, las humaredas y los planos a contraluz). Giros de guión habituales, estilo Coen en algunos largos silencios ( pero sin abusar como en otras de sus pelis), cierta irrealidad de la atmósfera del protagonista, de su vida y un argumento fatalista redondean una cinta muy recomendable.

Si no la han visto, la recomiendo.

Realizando un verdadero esfuerzo para que los párpados no vencieran y reprimiendo, una y otra vez, los impulsos de mis zarpas para alcanzar el mando a distancia y marchar a cualquier otro lugar. Pero no, aguanté como un campeón hasta el término y, como premio por tamaño sacrificio, me preparé un copazo bien frío y bien cargado que luego tuve que quemar en el gimnasio. Así que para nada...

No negaré la valía de los señores Coen para crear historias y atmósferas, ni para hacer fotografías apabullantes ni mucho menos para clavarnos a un protagonista excelente, muerto en vida. Tampoco negaré su ímpetu por ir un paso más allá, o retroceder varios, según se mire, hasta regresar a las épocas cuando el cine era (más) cine, ni tampoco el hecho de rodearse de un reparto singular, mejores McDormand y Jenkins que Thornton y Gandolfini, que vistos una vez, vistos todas. No negaré nada de eso pero tampoco que "El hombre que nunca estuvo allí" es tan divertida como ver crecer la hierba. Eso siendo benevolente.

Goza de un inicio prometedor que luego decae de forma dramática hasta volverse en algo infumable, carente de absoluto interés. La broma deja de tener gracia, hablando en plata. Si la película hubiese finalizado a la hora y diez la hubiese alabado, pero esos minutos de más mataron cualquier atisbo de celebración, y es que "El hombre que nunca estuvo allí" luce como un trabajo de final de curso de unos alumnos que estudian cine, del que los profesores valorarían con vehemencia porque verían el potencial. Verían un puñado de posibilidades, de buenas ideas y de grandes cualidades técnicas, pero que falla en su ejecución.

Mira que lo intento con los Coen, y a veces me gustan, y siempre quiero que me gusten pero hay veces que lo hacen imposible, no sé si ahogados en su vanidad o presos de su mediocridad.

Es una pélicula muy interesante y visualmente muy sugerente. Al final no ocurre nada significativo en consonancia con el título de la película "el hombre que nunca estuvo allí" tal es el grado de desapego con el protagonista que vive su vida, como si la cosa no fuera con él.
Los personajes aparte del protagonista, que hace gala de una notable aunque limitada lucidez, son todos muy mundanos aunque dan la impresión de que son armas cargadas que van a hacer algo extraño en cualquier momento (como de hecho hacen). Esta particularidad hace que la trama se suceda sin demasiada "importacia" es decir, no son los hechos que se suceden lo interesante sino la actitud de los personajes que tiran de ti manteniendote en constante alerta, mosqueado.
Visualmente es muy sugerete ya lo he dicho. Es una comedia que juega a ser una película de cine negro ya que las situaciones nunca se resuleven tal y como se supone que deberían hacerlo. Ademas se "intercalan" situaciones muy cotidianas que una verdadera película de cine negro se omitirian (es como si Bogart se fuera a mear). Tiene además el mérito de no resultar recargada ni excesiva. Los personajes son aproximaciones a los arquetipos pero finalmente no se comportan como tales dejando al espectador permanentemente desorientado.
La escena de la viuda en el porche es un buen ejemplo de lo que digo y estéticamente esta muy conseguida.
Al final subyace una cierta sensación de "¿para esto tanto?" pero terminas por darte cuenta de lo bien que lo has pasado en tanto duraba la película.