La prueba beta

Personal y sin duda ambicioso film de Jim Cummings y PJ McCabe, que tiene una idea pero que muy interesante, que no desarrolla como conviene para convencer finalmente.
Tiene un prólogo deslumbrante, inquietante y verdaderamente terrorífico, con gran fuerza dramática, que hace concebir grandes esperanzas, pero desgraciadamente el resto del filme es otra cosa o continuación, vale, pero con otro tono bien diferente, que carece de la misma calidad.
El argumento se torna cada vez más alambicado y el misterio y suspense, que sí existen, se ven malogrados por unas situaciones que en mi opinión no están bien narradas por lo confusas que aparecen en pantalla.
Se constata el gran esfuerzo interpretativo de Jim Cummings, pero, salvo la parte final, cuando sabemos de qué va todo (se puede adivinar sin grandes esfuerzos) el resto de los elementos de la película, interesantes de por sí, carecen de coherencia interna y resulta su visión bastante dispersa, empequeñeciendo su interés.
Creo sinceramente que es un film en gran parte fallido, que está por debajo de sus posibilidades, aunque la fábula y sátira social que manifiesta es clara. Y es que, en estos tiempos donde podemos fácilmente obtener datos sobre cualquier cosa debido a los adelantos de las tecnologías, el ser humano está solo en el fondo, siendo infeliz al tener todo supuestamente, pero encontrarse vacío y no conformarse con lo bueno que ya tiene y querer algo más que le saque de su fría existencia vital.

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Sátira sobre el mundo de los agentes en Los Ángeles hasta el punto de engullirlos en pura banalidad traviesa. El personaje de Cummings ve desbordada su pasión con una infidelidad, sin saber quién es ella. Su enfoque cambia en el trabajo y en su vida personal, ya que la curiosidad lo convierte en una montaña rusa de emociones. Ahí Jim Cummings saca a relucir un manual de histrionismo paranoico conforme avanza el film. Sus estallidos se radicalizan en los diálogos. La imagen está conectada a la decadencia social en una película tóxica y oscura.

Un inicio perturbador da paso a momentos miserables bastante sombríos, de trasfondo extravagante. Necesita mostrar osadía, diferenciándose... y a mi entender lo que logra es sumirse en una especie de inmundicia absurda.

Jim Cummings la dirige e interpreta, es por ello que la responsabilidad se dobla... Al entender lo que no iba a conseguir en ella, la he visto como espectáculo visual donde el engaño y la búsqueda paranoica de una respuesta, son la base argumental concluyendo en la nada.

El título lo he obtenido de un diálogo de la propia película.

El tercer largometraje de Jim Cummings es una película incatalogable, es un thriller erótico, un neo-noir, una sátira, un romance bizarro, una comedia negra y una película Made in Cummings.

Cummings sorprendió y no dejó indiferente con su magistral debut, 'Thunder Road', haciendo película una canción de Bruce Springsteen. Y sinceramente, The Beta Test es una película que no te va a dejar indiferente, no te va a parecer normal, o la vas a odiar o te va a encantar.

En un año donde la decepcionante 'No mires arriba' se ha ensalzado con la etiqueta de ácida crítica a la sociedad capitalista pagada por la productora del momento, Cummings y McCabe se cuelan por un callejón para traerte una película con 4 duros y actores desconocidos dónde a través de la cara B de la fama Hollywoodiense te pone en tela de juicio el frío mundo de Internet, las relaciones, el éxito y la vida a través de los ojos de alguien que quiere ser algo que en el fondo detesta.

Una película tachada de exagerada, poco realista, fantasiosa, sin gracia ni brillo y que no va a ningún lado. Para mí todo lo contrario, puedo entender las críticas, pero creo que hay que mirar que hay una intención tras ese fantasioso hipérbole de la realidad de los datos y la privacidad que nos deja desnudos y con el culo en pompa para los que quieran. Quizá nos moleste que nos digan las cosas de una manera tan cruda y con ese 'humor' tan sumamente basado en dar vergüenza ajena y transportarte a un prisma en el que miras al protagonista con asco y lástima por el ridículo payaso circense en el que se está convirtiendo. Perp es la sociedad de los datos, es así, contando elavado a infinito, pero es así en cierto modo.

Para mí, los cretinos extraños de Cummings, que causan repulsión viendo como coquetean con la autodestrucción y la violencia psíquica, me encantan, por lo que no me molesta su personaje como a otros. Una película para ver, aunque te vaya a parecer un 0 o un 10.

Aunque tiene un inicio desgarrador e impactante, al final me ha parecido enteramente una comedia negra.
Mantiene cierta intriga y consigue enganchar lo necesario sin tampoco estar demasiado ilusionado, mucha crítica social, tecnológica y comportamiento humano que realmente no lleva a ninguna parte, un maquillaje para relatar el verdadero tema del que trata y que comento en spoiler.
Jim Cummings es el auténtico protagonista del film, de hecho pocas son las escenas en las que no aparece, me ha llegado a estresar con sus paranoias e histrionismo.
El terror es inexistente, al contrario, me he reído más que cualquiera otra emoción personal.
Realmente es algo rara, de esas que o te encanta o la odias.