American Gun

Esta fue la última película de James Coburn antes de su muerte de un ataque al corazón en noviembre 18, 2002. La película narra la historia de Martin Tillman (James Coburn), un veterano de la Segunda Guerra Mundial que viaja por diferentes estados de la nación americana para rastrear el origen del arma utilizada para matar a su hija Penny (Virginia Madsen).

Lo peor que le puede pasar a un padre es perder a su única hija, si además de eso morir de un disparo durante un robo. Martin no puede dejar de pensar en la muerte de su hija, entonces se propone dar con el asesino y sigue la pista de la bala que salió de un “Mágnum” 357. Se inicia como un hombre en búsqueda de la verdad y termina como la verdad acerca de un hombre.

El veterano James Coburn, ganó el Oscar (1997) dando vida a otro padre con problemas, el de Aflicción. La película presenta a un Coburn anciano y con sus nudillos visiblemente distorsionado por la artritis. Coburn todavía tenía una presencia innegable en la pantalla.

De entrada puede parecer una película de sobremesa para dormir, pero según va pasando la película se convierte en una gran historia que esconde un crudo final.
La desesperación de un padre tras la muerte injustificada de su hija le lleva
a recorrer por todo el país la pista de el arma que mato su hija, esto nos conduce por un montón de historias por las cuales ha pasado dicha pistola, todas, historias con finales de muerte tal como lo que le pasado a su hija, esto hace interesante la historia, a la vez que le da una razón para vivir al protagonista, mandarle esas cartas a su hija contándole las historias que surgen de su búsqueda.
Todo se aclara al final tras encontrar a su nieta y se desvela la cruda realidad de la noche de la muerte de su hija… de te deja frio, desolado… pensado que bien está escrito el guión, llevada la historia y bien hecho el montaje.

Una historia bien contada, para ver tranquilamente y dejarse llevar a trasvés de ese viaje.

- 'Ahora solo me dan miedo los demonios de mi propia mente'.

Tenía unas ganas enormes de ver esta película porque me atraía mucho su trama. En muchas ocasiones había intentado verla, pero siempre me surgía algo que me lo impedía.
El otro día pude verla y descubrí la tremenda decepción. Me encontré con una realidad que no me esperaba para nada, y se me cayó un film que tenía mitificado haciendo que la decepción me inundara de tal forma que se transformara en una rabia al descubrir su calidad.
Y es que debo decir que me cabrea bastante cuando uno descubre una verdadera tomadura de pelo. Y no lo digo porque a uno le guste más la historia o menos; o porque tenga más o menos calidad. Lo digo sobre todo porque cuando uno está viendo una trama y observa que todo se enfoca desde un punto de vista, y luego cambia todo para ofrecer un enfoque totalmente diferente que cambia radicalmente la historia; pues sinceramente sienta mal porque uno se ve engañado.
Debo decir que la historia resulta pesada y muy aburrida. Uno espera ver una trama bastante atrayente haciendo que uno se inmiscuya en una crítica fuerte hacia el problema de las armas que existe en Estados Unidos. Uno espera una historia que sobrecoja y que impacte; pero que lo que produce es pesadez y frustración al ver que no engancha en nada.
La dirección de Alan Jacobs es bastante mediocre presentando un enfoque nada acertado de una trama que funciona muy bien en el papel, pero no en la realidad. Su visión de la trama es totalmente errónea, y hace que uno no conecte en ningún momento. Parece que todo está hecho por un chico que está estudiando en el instituto, y ha cogido una cámara casera y rueda sin ninguna experiencia.
Por otro lado, el trabajo de caracterización de los personajes del momento actual de la historia, y del años pasados cuando la joven se encontraba en el instituto; hay que decir que es más que nefasto. No existe ninguna diferencia de edad, y solo cambia el color de las imágenes.
En fin, "American Gun" es una película para olvidar o para no ver. Este film es el último trabajo del gran James Coburn, y por él no le doy la nota más baja. Su trabajo es lo único salvable de una película que decepciona desde el minuto uno hasta el final.