Haz click aquí para copiar la URL

Cocina del alma

Comedia Zinos, un griego que posee un restaurante en Hamburgo, vive momentos críticos: su novia Nadine se ha ido a trabajar a Shanghai, su revolucionario cocinero está espantando a sus clientes y, para colmo, su disparatado hermano Illias acaba de salir de la cárcel; por si esto fuera poco, Zinos debe enfrentarse a los especuladores inmobiliarios que pretenden derribar su negocio para construir viviendas. (FILMAFFINITY)
1 2 3 4 5 10 12 >>
Críticas 59
Críticas ordenadas por utilidad
1 de abril de 2010
62 de 86 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es la recompensa por no perder la esperanza. Semana tras semana voy al cine y me trago todo tipo de basuras, de diferentes nacionalidades y temática. Pero de pronto, cuando menos me lo espero y empiezo a desesperar de mi vena cinéfila, encuentro en el cine una pequeña joya como esta que me ayuda a seguir yendo al cine, y me da fuerza para aguantar los bodrios que sé me tragaré los próximos meses.
Divertida, sorprendente, entrañable, con buena música, amena, y no larga (¡¡por fin!!). Podrá gustarte o no, pero no te aburrirás.
Y ya sabes, si mi comentario te gusta ve a verla; si no te gusta, no vayas. De una forma u otra esta crítica (mejor, consejo de amiga "de andar por casa") habrá servido para algo.
tequeca
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
22 de noviembre de 2009
42 de 53 usuarios han encontrado esta crítica útil
El cineasta alemán de origen turco Fatih Akin se había decantado en su filmografía anterior por los dramas desgarrados narrados con contundencia y sin renunciar a mostrar la violencia y agresividad propias de las historias que planteaba, siempre con el telón de fondo de la inmigración turca en Alemania.

Esta vez, en 'Soul kitchen' no sólo cambia la nacionalidad del inmigrante, que ahora es griego, sino que cambia asimismo de registro para ofrecer una comedia sobre un desastrado local de comida rápida, que comparte nombre con la película, y del que se nos cuenta la odisea de su dueño por mantenerlo a flote y a salvo de las deudas y los intentos de compra de un antiguo compañero de instituto cuyo mayor pasatiempo es jugar al capitalismo y la especulación inmobiliaria.

Veremos de esta manera cómo el garito en cuestión pasa de ser un cutre establecimiento de salchichas y hamburguesas a un sibarita restaurante con platos de elaboración “ferranadriana”, o un popular pub entre la juventud más “cool” de la zona. Akin nos muestra todo esto con gracia, buen pulso narrativo y gran capacidad de observación.
Amor Perro
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
19 de noviembre de 2009
32 de 35 usuarios han encontrado esta crítica útil
Akin abandona la seriedad y el tipo de personajes de su fantástica "Al otro lado" para narrarnos la historia de una familia de hermanos en la Alemania contemporánea, utilizando como eje el restaurante de uno de ellos -que da nombre al film-, al tiempo que nos presenta los problemas que afrontan en un determinado periodo de tiempo. De forma fácil, sencilla y sin dar demasiadas vueltas, el director turco se toma su tiempo para presentarnos a unos personajes que por momentos se tornan entrañables, los dibuja dándoles virtudes y defectos, haciéndolos humanos aún cuando la historia y el cómo evoluciona tiene un poco de sobrenatural (no hay alienígenas ni dinosaurios, pero se enlazan demasiadas casualidades). Lamentablemente en el tramo final intenta solucionarlo todo demasiado rápido y la jugada sólo funciona a medias.

Dirigida con cierta maña, el mayor acierto de esta entretenida obra es sin duda alguna su reparto, con unos fantásticos actores -todos ellos- ciertamente dotados para la comedia, que consiguen no hacer ridículos a sus personajes y darles bastante fuerza. También destaca el uso de la música a crear un ambientación casi onírica, donde sobreviven tanto personajes alocados como otros sobrios, presentándose además cierta evolución de los mismos a lo largo de la historia. Sin embargo, pese a que todo lo que rodea "Soul Kitchen" sobrepasa la corrección, le falta ese 'algo' que convierte una cinta amena en algo más, digamos que carece de esa chispa que si tenía, por poner otro ejemplo de "comedia gastronómica" (aunque aquí ése sólo sea un nexo), la divertidísima Estómago. "Soul Kitchen" no deslumbra, entretiene mientras dura, pero ciertas decisiones hacia el tramo final hacen que, en conjunto, se quede en un ligero primer plato en lugar de un buen postre.
Caith_Sith
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9 de abril de 2010
31 de 34 usuarios han encontrado esta crítica útil
Reconforta encontrarse de vez en cuando con una comedia ligera, a ratos alocada, con trasfondo romántico y alejada de pretensiones initelectualoides tanto como de sexo gratuito o de mamporros sin sentido. Supongo que todos hemos soñado alguna vez con montar un bar de éxito, con personalidad –la nuestra-, en la que uno trabaja a gusto horas y horas porque es un microcosmos en el que nos sentimos como en casa. Muchos personajes son grotescos, pero hay química entre ellos.

Todo eso ofrece ‘Soul Kitchen’, al menos en su primera hora. Sus personajes, su caótico argumento, su creación de ambientes, enganchan y divierten, aunque en el tercio final la película toma los derroteros de la previsibilidad y se cierra con un final de lo más convencional que chafa el gran sabor de boca del comienzo.

Sin ser un peliculón supone un agradable cambio respecto a modelos demasiado trillados. Recomendable.
Shinboneniná
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
2 de abril de 2010
20 de 24 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hacer una buena comedia es difícil. Especialmente a estas alturas de la historia en las que la deconstrucción del género lo ha llevado a territorios de los que posiblemente no haya retorno posible. Autoreferencialidad, desmontaje de los propios mecanismos de la risa, guiños autoparódicos, interlocuciones al espectador, contaminaciones con todos los géneros posibles: la comedia vive un momento complicado, en el cual lo más difícil parece ser que se tome a sí misma en serio. Fatih Akin, obviando las mutaciones y derivaciones bastardas que ha dado el género en la última década coge el tren del clasicismo en este filme, lo maquilla con un interesante cóctel de culturas entrecruzadas sobre fondo urbano y encadena con acierto escenas que beben directamente del slapstick y del screwball más tradicional para darles un pequeño retoque contemporáneo capaz de convocar la sonrisa y provocar la risa del espectador con cierta continuidad. No hay gags en el sentido estricto de la palabra, pero sí una especie de actos que giran alrededor de un motivo determinado. Todos ellos funcionan por acumulación de circunstancias que culminan en un estallido final, siguiendo un desarrollo que quizá se adivina demasiado pautado pero que resulta eficaz a nivel narrativo. Está lograda la descripción del ambiente de ese Hamburgo posindustrial en el que especulación financiera, inmigración de todo tipo y efervescencia juvenil se combinan dando lugar a una subcultura que está teniendo lugar ahora mismo, que cualquier habitante del planeta puede identificar de alguna manera.

La mirada de Akin es, en esta película, considerablemente dulce. Uno le coge cariño con rapidez a los protagonistas de la película, desea que les vaya lo mejor posible, que sus historias cruzadas se resuelvan para bien. El ambiente en el que se mueven éstos daría para otra película muy distinta si no se tomara la opción de obviar sus texturas más rugosas, sus esquinas más afiladas. Akin no mira, en esta ocasión, para los detalles más sórdidos de esa urbe que crece mugrienta a los pies de la rica Hamburgo. Esa en la que el crimen de mediano y gran tamaño, la inmigración ilegal o la explotación sexual toman las calles y definen sus propias reglas. Los temas de sus películas anteriores son, aquí, contrapuntos anecdóticos, ruido de fondo para un grupo de personajes que quieren sobrevivir a su propia circunstancia a toda costa. Y esa lucha para salir adelante está vista desde la óptica del humor, con pinceladas de amargura suavizadas por un costumbrismo amable que permite, como no, un final coherente con sus pequeñas historias de debilidades y fracasos. Un final que rubrica y sintetiza las sonrisas (y carcajadas) que previamente ha diseminado con inteligencia a lo largo del metraje.
Doctor Zaius
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 2 3 4 5 10 12 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow