Besos brujos

Una de las películas más famosas y exitosas de Libertad Lamarque.
Es curioso que al revés de Ayúdame a vivir, donde lo mejor, lo más fresco de la película se da al principio, para luego convertirse en melodramón rancio, en esta todo empieza con un planteo del más clásico y vetusto culebrón, con el cliché del invento de embarazo por parte de una prima del galán enamorada de este, y con la colaboración de la madre del mismo urden contra el mor de los protagonistas, para que la mujer, un cantante muy famosa, renuncie a él, el plena sale tal cuál y ella acepta un contrato en una cantina de mala muerte en un pueblo de provincia, donde luego con la complicidad del de un del local, un poderoso hacendado la secuestra y se la lleva a vivir al monte.
Todo eso es el inicio, el resto como se desenvuelve la relación entre ambos en la cabaña del monte, y sobre todo el desenlace es muy interesante, bastante atípico para ser un melodrama de los años 30.
Ferreyra da una visión muy humana del hacendado, nos va descubriendo a un hombre real, y no al ogro que se suponía al principio.
En lo demás, pues hay que decir lamentablemente en Besos Brujos, he visto la peor interpretación de Libertad Lamaque, sobreactuada como nunca, llena de gritando de forma histérica en casi todas las escenas.