Herbie, torero

La película no tiene mucho de qué hablar, aunque sí que me parece más entretenida que las dos secuelas de HERBIE: AHÍ VA ESE BÓLIDO. Para finalizar la saga, terminamos con una aventura latinoamericana con menos Herbie y más relaciones personales. Sobraba totalmente pero se puede ver de forma entretenida y amena una tarde de fin de semana. Mención especial al guapísimo actor Stephen W. Burns que, al parecer, tuvo su gran protagonismo cinematográfico en esta única película y el cual, tristemente, falleció a la prematura edad de 35 años en 1990 víctima de la enfermedad del S. I. D.A producida por el terrorífico virus mortal del V. I. H. (R. I. P. Descansa en paz, Stephen)

Nota: se desconoce a qué corresponde el nombre con la sigla W. del actor, no hay forma de localizar fuente en google, qué triste. He pensado que podría ser Walter o William, pero ni idea.

Para empezar seria la cuarta entrega aunque, la película empieza con un agujero de guion bastante grande, es más yo creo que si esta película, la rehiciera un anti-live action (es decir convertirla en animación), igual ganaba puntos.
Aquí lo de menos es las carreras, pues solo el coche participa en una y poco más, en cambio los personajes de esta cinta son: como sacados de los dibujos animados, totalmente planos (hasta los protagonistas lo son).
Si alguien quiere echarle un vistazo y ver las (malas) costumbres y los clichés de EE..UU de los años 80 adelante.
En esta cinta se nota que la compañía del ratón quiso ir a por lo fácil y creo que les salió regular tirando a mal y es que dicha cinta no ha "envejecido" bien con el paso de los años....