Justicia salvaje

El título de la película aclara el contenido: Justicia salvaje. Tampoco es que sea la acción pródiga en tiros pero la justicia se va a repartir al por mayor, nada de multas con reducción a la mitad por pronto pago.

Tenemos pues a Bronson de un justiciero apacible que sueña con momentos mágicos en su casita de la playa leyendo con luz natural hasta las 10 de la noche, pero le han matado a un amigo y se tiene que poner a trabajar. Eso son amigos. Los demás son como el que tiene un tío en Alcalá.

La viuda del amigo y el retoño de éste le acompañarán. Ella es una mujer atractiva y de sensibilidad exquisita, muy adrede para enamorarse de un tío generoso e inteligente como Bronson.

El doctor es el malo; está en prácticas y es un chapucero. Así que no tiene clientes y los tiene que buscar por distintos países con dictaduras militares plenas. A la hermana del doctor le gusta el rollo cariñoso con las jovencitas; a Bronson estas cosas le joden y lo lleva muy mal, pero se calla por su naturaleza tolerante.

La película no es buena ni mala. Es del género Bronson reparte el bacalao.

Vendida en Latinoamérica con el título de Justicia salvaje, dirigida por un ya conocido en los films de Bronson, J. Lee Thompson quien en 1984 nos presentaba dicho film, aquí Charles Bronson interpreta a un asesino a sueldo que regresa de su retiro, para vengar la muerte de su querido amigo, un periodista disidente.
Así que Holland (nombre del personaje de Bronson) decide dejar su paradisíaca isla caimán para dirigirse a Guatemala a vengar la muerte de su amigo, y a enfrentar a un sádico y cruel médico llamado el doctor interpretado por Joseph Maher, quien vende sus crueles y sádicas torturas a los gobiernos más dictatoriales y represivo de América Latina, lo demás se lo pueden imaginar Bronson en Guatemala vengado la muerte de su amigo, si se quiere decir eso es peor que matar al hijo del diablo, este es un film netamente para los fans de Bronson, olvídense que en un film de Bronson, va a estar lo diplomático por encima de la violencia, no es que el personaje interpretado por Bronson va a ir a Guatemala a denunciar la muerte de su amigo ante la embajada de los Estados unidos, o ante la ONU (La Organización de las Naciones Unidas) o la OEA (La Organización de los Estados Americanos), Bronson lo que va es directamente a repartir patadas, golpes, tiros, y hasta cuchillazos, este es uno de los mejores films de Bronson en la década de los 80, fue vendido como el regreso de Bronson y en verdad lo es, Justicia salvaje o Todo el mal que hacen los hombres, debe ser considerado como unas de las mejores colaboraciones de Bronson con J. Lee Thompson.

Aunque la película cuenta con escenas bastante crueles, (sobre todo una de esas escenas, esta en el comienzo del film), es una película que se puede disfrutar, sin ningún inconveniente, aquí los malos son bien malos, y los buenos tienen a un bueno, bien, bueno ( Bronson), pero malo con los malos, y el final del film no se queda atrás me hace recordar muchos las palabras que están escritas en la biblia "Aquellos que son humillados, serán engrandecidos, y aquellos que se engrandecen serán humillados".

En mi opinión es una muy interesante y curiosa película de acción en la que Charles Bronson, en el papel de un asesino profesional retirado que vuelve a la acción de forma desinteresada, trata de vengar a las víctimas de un torturador despiadado.

Se habla de tortura, de justicia (o venganza) y de dictaduras hispanoamericanas donde campan a sus anchas los torturadores, dictaduras como la guatemalteca, en este caso. Los Estados Unidos no salen muy favorecidos, políticamente, cosa rara en una película estadounidense, eso sí, en régimen de coproducción con México (el país que acogió el rodaje) y el Reino Unido, país de origen del director. La escena de sexo lésbico es otro valor a tener en cuenta. El habitual rol de justiciero de Bronson cobra aquí un inusual y sorprendente significado político. Esta vez, el imperturbable Bronson se moja, pero de verdad.

Sinceramente no entiendo la baja puntuación que se le otorga aquí a este film. Es una de las mejores de Bronson en su etapa de justiciero o asesino a sueldo, como en éste caso. Con una estética muy mex entre Pekinpah y el Eastwood de Ruta suicida, está bien rodada, es políticamente incorrecta, entretenida, salvaje y desvergonzada, a la altura de sus obras de arte del cine de evasión como Death Wish, Fríamente, sin motivos personales o Ciudad violenta.

Un periodista de izquierdas es torturado hasta la muerte por un "doctor" estadounidense (o al menos protegido por los estadounidenses) que se dedica a instruir en técnicas de tortura a diversas dictaduras derechistas latinoamericanas (en la película se hace referencia expresa a Surinam, Chile y Guatemala, que es donde se ambienta el grueso de la película). Por desgracia para el "doctor", para sus secuaces de mayor confianza y hasta para su hermana, el periodista al que dio para abajo era amigo de Charles Bronson, bueno, de un antiguo asesino a sueldo interpretado por Charles Bronson, que lógicamente volverá a la acción para vengar a su colegui, y lo hará sin andarse con pamplinas...

"Justicia salvaje" es una rareza: básicamente es una película ochentera de justicieros protagonizada por Charles Bronson, lo que es casi un género en sí mismo, pero combina los elementos típicos de este tipo de cine con un trasfondo político progresista, o de denuncia de las dictaduras de derechas al menos, que sorprenderá a más de uno dada la (merecida) fama de reaccionarias que suelen tener este tipo de películas. Aparte de este aspecto "político" medianamente sorprendente, "Justicia salvaje" ofrece lo que cabe de esperar de una película del amigo Charles hecha en 1984: malos muy cabrones siendo despachados de forma contundente, acción, diálogos ásperos, puesta en escena sobria, guión funcional aunque no muy profundo que digamos, bastante violencia...y un desenlace no del todo sorprendente, pero con un giro un poco "especial", que a mí personalmente me ha gustado bastante.

Debes verla si:
-Te gustan las pelis de acción pero te tiran para atrás las del tipo "Yo soy la justicia" porque son "carcas" o "fachas".
-Te gustan las pelis de justicieros del tipo "Yo soy la justicia".
-Eres admirador de Charles Bronson.
-Piensas que la diplomacia y demás mariconadas son inútiles o insuficientes para poner coto a los tiranos y torturadores.
-Crees que Pinochet y gentuza semejante merecerían haber sido matados a palos.

No se merecerá un Oscar ni será un clásico, pero yo he disfrutado mucho viéndola, y la recomiendo.