Extraordinario thriller magníficamente filmado, narrado y ambientado. Muy bien también los actores, entre los que destaca especialmente Javier Gutiérrez, del cual me alegro que por fin le llegue una ocasión seria y digna de demostrar su ya antes demostrado talento.

La ambientación en los primeros años de la todavía imberbe democracia española es estupenda, y retrata certeramente -a través de muchos detalles, ambientales y narativos- lo que era aquel país, que salía de lo que salía y en el que todavía había muchas cosas por cambiar.

Es cierto que la trama criminal que nos cuenta -más brutal de lo que pensaba- no es nada novedosa y la hemos visto ya; no aporta nada en este sentido al género, pero cuando la película se factura tan bien, y se cuenta todo con solvencia y gran talento, es muy de agradecer. Magníficos los planos cenitales del lugar donde está magistralmente localizada, que vertebran perfectamente toda la película y son muy significativos narrativamente, al margen del deleite visual que suponen.

No tengo duda de que será la mejor película española del presente año, en una temporada, por otra parte, con un nivel muy flojo en el cine nacional. Y Alberto Rodríguez, uno de los mejores cineastas de España en estos momentos, firma con este largometraje su mejor obra hasta el momento; es bastante superior a la interesante 'Grupo 7', por ejemplo.

Y nuestra Academia del Cine ha sido una cateta al meter en la terna para el Oscar a la normalucha 'El niño' en vez de esta muy superior 'La isla mínima', donde también aparece, por cierto, ese "niño".

Nota: 8,5