Supongo que no hace falta aclararlo, pero esta película narra, ignoro con qué fidelidad a los hechos reales, los sucesos preliminares de la aparición del libro A SANGRE FRIA, de Truman Capote, entonces un escritor ya conocido por DESAYUNO EN TIFFANY'S. Un sensacional crimen múltiple llamó su atención y durante cierto tiempo se dedicó a entrevistar a los acusados, en especial a uno de ellos, en busca del material necesario para su libro. Como dije antes, no soy capaz de emitir juicio acerca de cuán exacta es esta película en relación a la verdadera historia, de la que he oído muy superficialmente versiones que difieren de ésta. Ahora, más allá de ese detalle, permanece el hecho de que Capote, tal como nos lo presenta la película, fue un personaje sumamente desagradable, y cuando llegan los títulos finales uno se queda preguntando si valía la pena ver una historia dedicada a semejante sujeto. Desde ya, la película está correctamente realizada, y es muy buena la actuación de Philip Seymour Hoffmann encarnando a Capote; de ahí el puntaje con que califico a esta película. Pero debo agregar que no volvería a verla, a menos que fuera lo más potable de la programación televisiva y yo no tuviera un programa interesante para el fin de semana. El protagonista me resulta demasiado antipático y no puedo menos que concordar con el reproche que por teléfono le hace en los instantes finales su amiga Harper Lee, la célebre autora de MATAR UN RUISEÑOR, quien también está entre los personajes.