Las mejores adaptaciones al cine de las obras de Dahl las han hecho Tim Burton (Charlie y la fábrica de chocolate) y Danny CeVito (Matilda).

Es una película sorprendente de principio a fin, con un mensaje alentador: la lectura te evadirá de un entorno hostil y te hará más feliz.

La escuela aparece como una metáfora de la cárcel en ciertos momentos. Los adultos son unos memos pagados de sí mismos (la madre de matilda, por ejemplo, es una "Fashion victim"). A ellos se les contraponen los niños, normalmente más inteligentes, aunque sufren la soledad.

La televisión aparece como un producto que idiotiza a casi todos.

Todo eso es verdad que aparece en la novela, pero Danny DeVito ha sabido captar lo que el autor pretendía, por eso no están ausentes la ironía ni el humor negro. Además hace un uso adecuado de la estética expresionista que es muy oportuna en esta película. Porf supuesto, no falta el humor.