Haz click aquí para copiar la URL
España España · L'Olleria ( Valencia )
Voto de Grijander:
6
Romance. Comedia Julianne Potter, una crítica gastronómica, se da cuenta de que está enamorada de su mejor amigo justo el día que él la llama para anunciarle que se va a casar con una chica de la alta sociedad. Sólo dispone de tres días para urdir un plan que le permita impedir la boda. (FILMAFFINITY)
24 de septiembre de 2013
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
La boda de mi mejor amigo es una comedia de las que da gusto ver. Una de esas que suelen llevar la etiqueta de "para todos los públicos" y que, hasta cierto punto, consigue el logro de gustar a todos.

P.J. Hogan se hizo un nombre gracias a La boda de Muriel y tres años después nos trae otra película con nupcias de por medio que no son sino un vehículo conductor para el desarrollo de las acciones de una protagonista que nos deja situaciones de humor notables, gracias a una inocente picardía que nos hace revivir travesuras pasadas, aunque en este caso se lleven al extremo. El acierto es enorme por parte de Ronald Bass, guionista y artífice de esta telaraña adulta tejida con hilos infantiles pero firmes, consiguiendo con eso que el espectador acepte la historia deste el principio. Hogan lo plasma con soltura y nos deja un producto liviano pero intenso, de vertiginoso ritmo pero de no tan notable interés real más allá del producido por las tretas de la protagonista. Mención a parte merece una excelsa banda sonora, donde destacan la preciosa The way you look tonight (recordada en voz de Frank Sinatra) un fabuloso número musical con I say a little prayer for you, canción compuesta por Burt Bacharach, popularizada por Aretha Franklin y cantada en principio por Dionne Warwick. Casi nada.

Julia Roberts protagoniza la película con esa facilidad innata que tiene para la comedia y esa dulzura que la acompaña en el género romántico. Nada complicado para una actriz de su calibre. Dermot Mulroney encabeza la lista de secundarios con un trabajo concienzudo aunque un tanto pasado de rosca en algún momento. Cameron Díaz, otra mujer con una capacidad impresionante para "bipolarizarse" en la comedia romántica y rendir de maravilla en los dos frentes nos aporta un puntito más para su personaje gracias a una naturalidad bárbara. Rupert Everett cierra el cartel de secundarios principales con un buen trabajo, bordando la maravillosa escena final y haciéndonos disfrutar con la canción en el restaurante.

Resumiendo, que es gerundio: La boda de mi mejor amigo da lo que promete. Es una comedia romántica que rinde en las dos facetas en las que se mueve y que, sobretodo, consigue mantener al espectador entretenido hasta el final sin trucos ni subiéndose al tren de los clichés en un género en el que utilizar material refrito es casi uno de los diez mandamientos. Recomendable.
Grijander
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow