Gabriel

Puro batiburrillo de elementos tomados de películas anteriores, en el que el protagonismo que habitualmente está en manos de vampiros, licántropos o monstruitos varios, se cede amablemente a… ¡Tachaaan! Toda la corte celestial de ángeles, arcángeles, angelitos y angelotes. Y alguna que otra angelita que muy bien podría aparecer en “CSI Las Vergas”. Oscura sí es la peli, sí; y aburrida también. Lo de las lentillas de colores está muy visto, al igual que los guardapolvos de cuero estilo “Matrix” y la iluminación a lo “Blade Runner”. Las reflexiones pseudo-filosófico-religioso-anatómico-forense son pelín patéticas, pero igual hay quien se come el tarro con ellas. A quienes disfrutasen de pestiños como “Underworld”, “Constantine” y similares, supongo que le gustará. El resto, mejor rezarle al ángel de la guarda, que falta nos hace.

A decir verdad me llamó la atención el título, la estética, y no pude evitar echarle un ojo. Pero cual fue mi sorpresa al comprobar que más que una película parecía un anuncio de colonia. Digo parecía porque al final de lo que se trata es de vender lentillas de colores super chulas. No tiene más, ni guión, ni música, ni actuación, ni nada de nada, solo estética... y os aseguro que si venden ese champú o esa colonia o esas lentillas que parecían estar vendiendo esos arcángeles y demonios los compro. Pero que Dios nos salve de películas como estas.

La película no llega a ninguna parte, el espectador nunca termina de entender a donde apunta. Esto es lo peor que puede tener una producción,generar en el espectador la sensación de estar ante algo que no pretende transmitir nada, sólo ser un rejunte de imágenes y sonidos. Es una especie de mala mezcla entre sin city , constantine, algo de matrix y la biblia. Una historia bastante inconsistente que a través del mal pretende hacernos comprender el bien, pero a la vez nos muestra que al fin y al cabo estamos sólos con nuestras propias decisiones, todo esto mezclado con la misa que da el cura el domingo.

En dos palabras...simplemente aburrida.
Una mezcla de Matrix como explican los compañeros de filmaffinity pero mala.
Además, las secuencias de acción van a cámara rápida lo que hace que más de uno se quiera fumar un porro.