Farmacia de guardia (Serie de TV)

Fue una de las series más longevas y exitosas en la historia de la televisión española, lo cual no es decir mucho. Destinada al consumo familiar, sus principales alicientes eran una buena mezcla de humor fresco y elegante con drama sensiblero y la presencia de algunos actores excelentes que hacían que las blandenguerías por lo menos fueran eficaces.
Personalmente la encuentro digna de mi admiración por un detalle muy meritorio: conservó su interés sin que en ningún capítulo, que yo recuerde, se trasladara la acción fuera de los decorados de la farmacia y de su fachada.

Lo mejor: Adolfo (Carlos Larrañaga), Lourdes (Concha Cuetos) y la mayoría de los secundarios: Romerales (Cesáreo Estébanez), Paquita (Esperanza Grases), Sandra (Emma Ozores)...
Lo peor: la habitual blandenguería de Mercero; Julián González y Alicia Rozas, los niños.

Por cierto, me gustaría aclarar que no he escrito esta crítica movido por la nostalgia, pues he podido ver recientemente una reposición.

Serie que se hizo popular en Antena 3 durante principios de los 90. No tenía nada a destacar, simplemente era un entretenimiento. Eso sí, apropiado para ver con toda la familia. No había nada malsonante, así que era recomendable. Vemos jóvenes promesas como Julián González, al cual veríamos luego en series como "Menudo es mi padre" y especialmente en "Compañeros".

De chico la veía, pero en ningún momento llegó a impactarme. Destaco que cada nochebuena o nochevieja siempre ponían en su día un especial de la serie recopilando los episodios dedicados a esas fechas. Otra cosa es que al finalizar cada episodio, salía el reparto de personajes, hasta los animales ( si salía una vaca, salía en el reparto con su nombre correspondiente ). Había alguna que otra cosa graciosa como el camarero que estaba loco por la ayudante de la farmacia y luego se hizo novio de una rubia que no recuerdo qué personaje era.

Un episodio gracioso era el que salían gente disfrazada anunciando ser los de "cobros morosos". En resumen, que recomendable para ver con toda la familia durante la cena y que influya bien en los niños. Mejor que otras series españolas de ahora, que solamente hablan de sexo, sexo y más sexo. Un 6'00.

Entrañable y divertida, "Farmacia de guardia" sigue ostentando el record de ser la serie española más vista de todos los tiempos... y por algo será.

Sencilla pero cercana tanto en la puesta en escena como en los argumentos. La farmacia de Lourdes Cano se convirtió en nuestra agradable, evasiva y divertida rutina, y la rebotica en nuestra casa.

Los actores protagonistas estaban excelentes (aunque también merecen mención especial Romerales y María de la Encarnación, la secundaria e hilarante pareja de policias) destacando Concha Cuetos como farmaceútica agobiada pero carismática, y Carlos Larrañaga como el galán/cachondo mental que tan bien le sale. Los guiones mezclaban una gran comicidad con bastantes situaciones de carcajada (lo mejor de la serie), y una ternura palpable por los cuatro costados con pequeñas situaciones tiernas que pretendían la lágrima fácil.

¿Lo peor? Pues, aparte de las actuaciones de los críos (que están horribles), que su corrección política, su infantilismo e inocencia eran a veces desmedidos y demasiado cantosos como para lograr alguna situación dramática mínimamente realista.

En fin, entretenimiento ligerito y banal, con situaciones que se olvidan a los dos minutos pero que divierten y entretienen en el momento.

Lo mejor: Carlos Larrañaga y Concha Cuetos. Algunos momentos cómicos (en especial los protagonizados por Larrañaga). Que supo cuando terminar (aun estando en el apogeo de su éxito).
Lo peor: Los niños actores. Algunos momentos de drama tierno que llegan a hacerse empalagosos.

Viendo el percal de la época, sin duda destacó por que se notaba que estaba hecha con profesionalidad y mucho cariño, porque tenía buenos actores y unos guiones sin pretensiones pero amenos y no exentos de chispa. Es cierto que Merecero tiende a la sensiblería más rancia, y como siempre los niños sobran (especialmente el pelirrojo ese, al que luego odiariamos cordialmente por su participación en otras series de desigual calidad), pero los protagonistas tienen mucha gracia, caramba: las contínuas trifulcas entre la boticaria y el golfo de su marido, el padre moderno, la manceba de anatomía generosa, el policía patán... En definitiva, una serie que no se si volvería a ver pero que tiene su puntito de nostalgia y una calidad indiscutible.

Ésta es una primera serie que recuerdo haber visto en televisión, en antena 3 los sábados por la noche...¡qué tiempos! no sé si por la edad o qué, pero me encantaba ésta serie. Aunque las reposiciones me han seguido gustando.
Una mezcla de humor, temas morales, tonterías y sobretodo cosas de la vida cotidiana, y todo esto durante 4 o 5 años en un espacio que se reducía a la farmacia y sus exteriores.
Muy buena.