¿Entretenida? Si ¿buena película? También ¿obra maestra? Para nada. La historia del caballo está muy bien armada, primero la relación con su dueño y la importancia que uno tiene sobre el otro se muestra de buena forma, lo que nos ayuda a comprender el porqué de tales lazos de amistad.

Posterior a esto vienen las andanzas del animal durante la guerra, y su andar de “mano en mano” durante el transcurso de la misma, para finalizar de forma épica en tierra de nadie. Y es que Spielberg se da a la tarea de mostrarnos la gran importancia que tuvieron estos animales durante la Primera Guerra mundial.

¿Qué se puede esperar de este director en una película? Aquí está la respuesta ¿puede aspirar a más? Claro y lo ha demostrado. A fin de cuentas él busca hacer un filme sentimental (que si lo logra o no queda en cada uno), personalmente me resulta un producto bastante fácil, una historia muy sencilla.

Lo bueno, un trasfondo antibélico por momentos algo forzado pero que no entorpece el relato, al final el director logra su cometido, un producto para la familia, con escenas de batallas bien tratadas para no herir al espectador. Evidentemente hay muertos, es la I Guerra Mundial, ¡hay trincheras!

Su duración (de poco más de dos horas) no se siente pesada en ningún momento, pero sin duda alguna bien, bien se le puede recortar algo de metraje. Pero bueno, Steven acostumbrado a hacer películas cuasi épicas no se iba a apartar de esa idea con esta cinta. Recomendada.