Johnny English

Vamos a ver. El grado de estupidez de la película sólo es equiparable a la belleza física de su protagonista. Pero, es que ahí reside la esencia de la película de Peter Howitt. Una película que se las da de parodia del cine de espías (o, directamente, del de Bond) y que, siendo así, cojea bastante pues resulta ramplona.

No obstante, lo que se nos sirve en bandeja de McDonalds es un claro ejemplo del 'fast food' cinematográfico made in U$A pero con cierto fundamento. Si se ve desprejuiciado y si encima Rowan Atkinson te gusta (a mí me encanta) no entiendo por qué no se puede echar el rato con la sonrisa tonta en el rostro.

No esperéis lo que no hay que esperar, y podéis encontraros con una chorrada muy 'british' que brinda algunos gags desternillantes (el entierro, jo jo) hecha al servicio de su majestad (R. Atkinson se entiende). También os toparéis con gilipolleces que os harán desear la muerte a más de uno, pero son pocas. Os lo prometo.

Este Johnny English tiene licencia... para hacer el paria. Bendita licencia.



"Está usted en el lugar más seguro de toda Inglaterra... ¡¡¡¡¡BOOOOM!!!!!" (Y el careto de Rowan para la posteridad)

Cuando Rowan apareció allá por los 80´s en “Nunca digas nunca jamás” al lado del legendario Sean Connery en un papel cómico de mensajero del servicio secreto, quien trataba de convencer al 007 de volver a la actividad, y tras caer al agua, luego ver el rostro de James Bond, jurando no volver mas a las andadas. Mientras Rowan hacía agua en la piscina y escuchamos el tema principal de la película; nos quedo la sensación de un buen sabor de boca y la certeza de que tanto 007,como Atkinson, volverían con mas diversión. En “Johnny English” vemos a Rowan parodiar al mítico agente secreto al servicio de su majestad, tratando de rescatar las joyas. Rowan se enfundo en el smoking del 007, y es verdad que resulto una caricatura aun mas desencantada que Austin Powers; pero hay que admirar el talento y el valor en el intento del comediante que tras su personaje de Mr. Bean se lanzo al espionaje sin miedo a la burla, y quien nos ha hecho pasar un momento bastante hilarante con sus ocurrencias.

Al igual que ocurriera con la primera entrega de Awstin Powers (las dos que la sucedieron no me gustaron nada), la prefiero a las últimas entregas de su modelo (esto es, a las del agente 007 interpretado por Timothy Dalton y Pierce Brosnan). Hay varias razones para ello: soy de los que se ríe con Rowan con sólo verle la cara –aunque siempre le preferiré encarnando a Mr. Bean en la televisión–; la exageración siempre queda mejor en una parodia; Natalie Imbruglia.
Es bastante previsible, aunque para mí la gracia no estuvo –generalizando, pues hay algunas situaciones buenas– en los hechos, sino en las reacciones de Rowan y su inmejorable mímica.
A pesar de todo, me pareció desaprovechada. En todo momento se me ocurrían chistes que añadir para mejorar las situaciones.

PD: Las intenciones del franchute, que no han gustado entre algunos de mis amigos, a mí me parecieron bastante graciosas. Creo que es la idea más estúpida que le he escuchado a un supervillano.

Creo que al poco de ver el desastre de película que había hecho y lo mal que había funcionado, Rowan entró en un proceso de depresión. No me extraña. A sus paisanos no les gustó nada.
Yo esperaba algo más del observador profundo de La madre de Whistler. Esta vez metió la pata hasta el fondo, hasta el fondo de las bajantes... Desagradable... No me explico como Malkovich quiso formar parte de esta tontería sin más gracia que la tontuna de siempre. Ya de por sí el guión es absurdo, como todos los personajes.
English, si te hubieras metido en un guión menos pretencioso, como los del inspector Clouseau, al menos no habrías resultado tan... patético.

Ya cuando vi los 2 últimos films de James Bond a día de hoy(20 de septiembre de 2006) supe que a sendos guiones les faltaba la chispa, el gas de las otras pelis de James Bond protagonizadas por Pierce Brosnan y parte de las protagonizadas por Roger Moore primero y Timothy Dalton después.
¿La causa?. Los responsables del argumento de ambos largometrajes: Nearl Purvis y Robert Wade( que también he de decir han escrito el nuevo 007 protagonizado por Daniel Craig), cuya imaginación no le llega a la suela de los zapatos a los guionistas precedentes, sí, aquellos que eran capaces de imaginarse una trama complicada, inteligente, mordaz a la vez y sobre todo, entretenida.
No quiero ocultar mi desprecio que sentía por ambos guionistas y ciertamente esperaba que no fueran los responsables del libreto del nuevo Bond, pero en fin... Sin embargo, tengo que admitir que ambos me soprendieron gratamente inventando a Johnny English y llevando a su personaje a la gran pantalla.
Las risas son continuas y hay una gran cantidad de gags que valen la pena realmente. Son buenos, divertidos e incluso.. pueden ser que te hagan no parar de reír en bastante tiempo... Pero bueno... en temas de películas, y más si al humor se refiere, para gustos colores... Algunos les encantará el film... otros los despreciarán...
¿Es bueno técnicamente? No. ¿ES bueno el director? No.¿Pero acaso importa?. Cuando ves una comedia lo único que importa es que ésta te haga reír... y hasta(al menos en mi caso) lo consigue con creces.
Ahora bien y volviendo a incidir en ello... estoy seguro que a otros no les hará ni la más mínima gracia.