Nací en 1978 y dos años y medio después experimenté una de las sensaciones más fuertes de mi vida: acababa de ver el "El imperio contraataca" en el cine. De ese visionado en concreto no recuerdo gran cosa (años después he tenido la oportunidad de ver el filme de Kershner y Lucas unas cuantas veces), pero sí de la emoción que me embargó a la salida del cine.
Ayer visioné "El caballero oscuro" y puedo decir que, por segunda vez en mi vida, experimenté dicha emoción. No quise verla antes, no quise escuchar comentarios acerca de ella; pero algo me dijo que iba a ser una gran película.
Con esto no quiero decir que en estos veintiocho años que separan ambos filmes no hayan habido películas de estreno que me hayan embriagado en una sala de cine (a bote pronto puedo citar "Sin perdón", "Desmontando a Harry", "Pulp Fiction", "Carlito's way")... pero nunca había existido ninguna que me devolviese esa sensación primaria que descubrí con el citado "El imperio contraataca". Por ello y por todo lo que contiene la cinta, no me avergüenza decir que es una obra maestra.
Nolan, que ya había realizado un excelente trabajo en la brillante primera parte, la dirige con brío y sin dejar nada al azar (más allá de las improvisaciones que pudiese efectuar el gran Heath Ledger). Las escenas de acción son magníficas y golpean con dureza; pero las que no lo son, todavía son mejores. El guión es modélico; con giros argumentales que aumentan la tensión, grandes diálogos, dilemas morales de altura, cierta complejidad estructural, una combinación de géneros exquisita y poseedor de un duelo de titanes que ya forma parte de la historia del cine.
Del reparto me ha sorprendido gratamente Aaron Eckhart; un actor al que no tenía en gran estima y que me sorprendió con su elaboración del fiscal del distrito Harvey "Dos caras" Dent. Maggie Gyllenhaal está sensacional y le da mil vueltas al Katie "caramelito de fresa" Holmes. Freeman hace de Freeman y está genial; Oldman se gana un sitio en el cielo; Bale demuestra por segunda vez que, al margen de ser un actorazo, él es Batman; y Ledger... luego está Ledger...Ledger. No hay palabras.
De Ledger sólo quiero comentar una cosa. Ojalá se le recuerde por lo gran actor que fue y ojalá se le premie póstumamente por ello; no por sentimentalismos derivados de su trágica muerte. Se lo merece. Es un grande.
Resumiendo, una obra maestra recomendable para cualquier cinéfilo más allá de que le gusten los tiros, las explosiones y las aventuras de super héroes. Lo dice alguien enamorado del cine de Alfred Hitchcock, de Serguei M. Eisenstein, de Billy Wilder, de Howard Hawks, de Fritz Lang, de Raoul Walsh, de John Ford.. vaya, que no soy el típico fan de los cómics que le pone un 10 a la película por ser la mejor del género al que pertenece.