Si exceptuamos que el guión ha quedado demasiado literario, lo cual puede no ser malo siempre pero sí a ratos, que alguno de los actores está elegido a ciegas, véase el capitán que no hay quién se crea, y que aparte de la previsibilidad del final, la intriga decae incesantemente, la película no está nada mal...
Para mi gusto, y por mucho que críticas mas formadas y culturetas se empeñen en lo contrario, una de las mejores adaptaciones ( lo cual dice bien poco, porque es bastante regular) literarias del adorado, idolatrado y excesivamente encumbrado Pérez Reverte.
Lo mejor: La Sánchez Gijón, la sirena bandida y varada más hermosa que se podía haber encontrado. Carmelo Gómez, estupendo como acostumbra.
Lo peor: Las excepciones arriba señaladas y Enrico Lo Verso, promesa que nunca llegó a lo prometido, guapo a horrores, pero malo, malo, malo. El tamaño del pedio, propio de los teleñecos en la isla del tesoro. La facilidad del hallazgo, la clave jesuita... Pero perdón, esos son fallos de la novelita.