Película muy mala que engaña con el título y la portada, ya que parece que vas a ver una película que gire en torno al mundo del póker, y al final resulta que apenas tiene relevancia en la historia, más allá de que hay ciertos paralelismos entre lo que sucede en la trama con lo que sucede en una partida de póker.

No le veo mucho futuro a Russell Crowe como director cuando empieza fallando en lo más básico, la elección del guion, que para más inri está co-escrito por él mismo. Alguien debería haberle avisado de que con una historia tan rebuscada, con tantos giros absurdos, tantos agujeros y tantas casualidades y comportamientos imposibles de creer, no iba a llegar a ningún sitio. Si al menos escoger un argumento tan estrambótico hubiera servido para hacer una película entretenida, tendría un pase, pero es que a los veinte minutos de empezar ya estás mirando el reloj y deseando que se acabe. Es terriblemente lenta, y para colmo los giros que va presentando la historia en lugar de sorprender te dejan totalmente indiferente.

Mala historia, personajes totalmente planos, situaciones inverosímiles, desarrollo lento... No sé bien por qué no le he puesto la nota más baja. Deber ser por la simpatía que todavía le tengo a Russell Crowe a pesar de lo mal que está llevando su carrera.