Los nuevos personajes tenían que tener nuevos enemigos, no era necesario convertir a los antiguos, que eran muy amados y queridos, en seres estúpidos y sin carácter porque invalidan toda la antigua epopeya.
Las nuevas películas de la serie de Harry Potter no destrozaron la historia de Harry y sus amigos trayendo de vuelta a Voldemort y haciendo inútil toda su peripecia, respetaron esa historia y comenzaron otra distinta.
En la Tierra Media tras la derrota de Sauron, Aragorn es coronado rey y se casa con Arwen, llega la paz pero no, Sauron está vivo porque una esquirla del anillo le permite volver, Aragorn, vuelve a los bosques del norte y alli muere, Arwen se va al oeste, Legolas se queda en su bosque y languidece y Gimli en sus montañas muere de depresión tras ser arrasada su tribu por tropas de Sauron.
Pues esto más o menos es lo que hizo el inútil de Abrahams en esta película, y claro a partir de aquí ya no hay quien arregle las siguientes.
Un desastre completo que no tiene perdón.
Le pongo un 1 porque no puedo ponerle un 0.
Mantener esta trilogía como canon es un error manifiesto. Yo fui un acérrimo seguidor de esta saga, y ahora ya no me apetece ver ni siquiera las antiguas sabiendo que toda esa historia es inútil.
Los que defienden esta película y la trilogía son realmente los haters de Star Wars porque defienden la destrucción de la historia original que fue la que nos cautivó a millones de personas, supongo que los que no la vivieron no la sienten demasiado.
Los haters de la antigua son los fans de la nueva, ellos le darán la razón a la atrocidad cometida por Disney; yo ya no lo soy. Tampoco es muy grave al final, no es nada real solo es cine. O quizás si lo sea. Porque Star Wars era mitología moderna, como las historias de Perseo, Hércules, Cuchulainn, Lanzarote, Roldán, el Cid, los siete infantes de Lara o Bernardo del Carpio; era algo eterno, y ya no lo es. Solo es una producción cinematográfica para hacer dinero. Que triste.