Pearl

No propone novedad alguna, ni va a entrar en los Anales del Cine, pero no deja de ser una película muy bien hecha y muy completa.
La realización es impecable, buen gusto y con algunos detalles más que interesantes.
La dirección es uno de los pilares de la película, con gusto y técnica, acierta en la dirección de actores y, sobre todo al final, hace un despliegue visual muy atractivo. La única pega que se le puede poner son algunas secuencias en las que se duerme y resultan algo pesadas.
La historia tiene todos los tópicos posible, la protagonista demente que asesina con absoluta naturalidad, la madre posesiva y maltratadora, etc., está algo vista pero no quita que la trama esté bien montada y sea entretenida.
La protagonista es otro de los pilares de la película, algo exagerada en una interpretación bastante completa y acertada. La verdad es que llega a hacerse odiosa, que es lo que se pretende.

No vais a encontrar en mi un acérrimo defensor de ‘X’, la primera parte de la trilogía preparada en la cabeza de Ti West. Esa historia de porno ensombrecida de terror me gustó, pero todo me pareció que tenía un punto “extraño” con el que no llegaba a congeniar del todo.

La conclusión a la que llego tras ver ‘Pearl’ es que, quizás, debo echarle otra ojeada a aquella puesto que el festival que tenía preparado West en esta segunda parte no estaba preparado para visionarlo. Ahí vuelve a estar esa fantástica actriz, Mia Goth, capaz de aguantar el timón del invento campestre ella solita. Con una actitud encomiable, servidor la nominaría al Oscar si pudiese porque, sinceramente, pocas actrices aceptarían participar en esto y podría contar con los dedos de una mano las que saldrían airosas de aguantar, por ejemplo, el plano final con tanta honra.

‘Pearl’ es un auténtico bombazo, una película que cocina su historia y violencia a fuego lento para que, aunque sepas lo que se avecina, no puedas ni siquiera imaginar lo que te vas a encontrar. Son dos horas de película de sorpresa continua, o por los giros de guión o por las secuencias que ofrece.

Han pasado ya unos días desde que la vi y no me la quito de la cabeza. Cuando eso pasa, es que la película tiene algo. Espero ansioso el cierre final.

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"Pearl" no deja de ser una extensión de "X", con su mismo trasfondo final pero sin su explícita muestra sexual. Una historia que se divierte largo y tendido sumergiéndose en las consecuencias de una represión y un deseo encerrado al cual no se le permite salida alguna. Es una interesante película que se carga prácticamente al completo sobre los hombros de una fantástica Mia Goth, que es la encargada de enseñarnos el resultado de una mente desquiciada por las argollas que impiden el desempeño de sus sueños. Si en "X" se nos enseñaba la represión en forma de deseo carnal no satisfecho complementado con la envidia de su cumplimiento por parte del prójimo, aquí se mira desde la perspectiva de la joven que quiere volar hacia un futuro que se topará de bruces con la barrera familiar. El sueño americano no cumplido por cuestiones de falsa moral, honor y respeto a las imposiciones genealógicas.

Genial al respecto el símil del cochinillo para leer entre líneas cómo va degenerando la mente de la protagonista. Un regalo inicial recibido con enorme gratitud pero que sin embargo se topa con la barrera de la madre y por lo tanto queda abandonado a la intemperie sin poder entrar en casa, expuesto al cruel destino de la putrefacción progresiva mientras acumula larvas y gusanos hambrientos de carne porcina a la par que la mente de la protagonista se va llenando de una mierda tóxica con tendencia a oler más y peor.

Visualmente mantiene la estética de "X", con ese toque contradictoriamente gore que no cabría esperar dado el tufillo a película de serie B con estética colorida y aparentemente poco seria. Se muestran escenas abiertamente desagradables, con desparrame visceral y carne en estado putrefacto, pero no me llega a transmitir la misma sensación de terror que tuve con "X", pues la sangre es servida de un modo más directo y hasta incluso predecible y esperable, sin ese aura de incertidumbre o misterio que se respiraba en aquella. A cambio de eso, "Pearl" opta por darle más fuerza a la historia personal, obviándose la aparición de personajes secundarios que desarrollar en exceso y dándole todo el protagonismo a Mia Goth. Así que esta película se convierte en una buena muestra de la evolución de un personaje, desde sus inicios hasta el descarrilamiento más absoluto que se muestra en todo su esplendor con un brutal monólogo de no sé cuántos minutos en el comedor de su casa, a plano fijo y sin escapatoria.

Sin duda alguna, si a esta película se le hubiera dedicado más esfuerzo en crear atmósferas más tenebrosas y cargadas de imprevisibilidad que se sumaran a la buena muestra de la evolución de la psique de su protagonista, por descontado entonces estaríamos hablando de una historia de mucho más peso y probablemente estaría ocupando un puesto privilegiado dentro del grupo de películas de terror de los últimos años. Pero da la impresión de no tomárselo demasiado en serio y eso se paga. Dicho lo cual y aunque a mí me gustó más "X", esta es una historia que vale la pena ver.

Película escrita como vehículo para el lucimiento de Mia Goth, que no deja pasar la oportunidad.

Todo el envoltorio de las películas de Ti West es fantástico... metacine en estado puro. Aquí la banda sonora, los créditos, vestuario, fotografía, dirección de arte en los interiores de la casa están geniales. Mia Goth... también genial.

Pero pasa una cosa más con Pearl. Es original. Muy original. No es un simple homenaje impecable en la forma y regulín en el fondo, como sucedía en anteriores películas de West (La casa del diablo). No es una cinta de terror al uso ni mucho menos (es una película de terror?). He visto en otras críticas referencias a Psicosis, que yo no pillé. Para mí en cambio, tiene ecos lejanos de Carrie, y lo digo como elogio. Está muy bien escrita, y bien interpretada. Tiene recursos cinematográficos que yo no recuerdo en otras películas, un personaje secundario de lujo en el papel de la madre de Pearl y al menos un par de escenas que rayan a un nivel altísimo. Y, como guinda del pastel, muchísimas referencias cruzadas a la trama y hechos de X. De lo más original que he visto en los últimos años, y no sólo dentro del terror.

Cercana al sobresaliente.

Esta precuela de X nos muestra el origen del vil personaje que desarrolla y se va amplificando, en este film de Ti West, la modelo y actriz británica Mia Goth que cubre una función de chapeau. Su profesionalidad y la de todo el equipo y reparto, logran persuadirnos de que a cada fotometraje vamos a ver algo novedoso y turbador, algo que alborote nuestras cabezas durante el curso del film. Todo gira en torno a Pearl, desde lo cotidiano y puramente formal, hasta que se desata la falta de razón, en un viaje rural donde se acrecenta la privación del juicio. Desde el lleno de tensiones y de conflictos del bien hasta el inevitable mal, transitará la película por cada vez mas hechos imprevistos, gradualmente hacia una psique, un corazón y una mentalidad más descarriada. Si es verdad, que la película de West es demasiada previsible en cantidad de resultados que adornan el filme y que algunos sucesos parecen de risible broma, pero eso no quita que la inquietud en Pearl no nos conmocione en porciones de tiempo o lapsos más o menos largos. Valorarla como casi perfecta sería la opción más adecuada, porque la genialidad de este cuasi clásico contemporáneo nos hace ver lo grande que es la cinematografía. MaXXXine será el cierre de esta trilogía creada por Ti West, con un mayor presupuesto y unos actores de más calibre según los rumores que circulan. Terminando con Pearl, Mia Goth interpreta un papel del que se dice tiene TEPT, un trauma que le produce pensamientos de una amenaza extrema o de proporciones catastróficas, quizás por desarrollarse la película en plena pandemia de la muerte púrpura.