Clásico biopic/telefilm made in Hollywood inspirado en las vidas ejemplares de algún héroe del "Imperio del dollar", en este caso la polémica figura del excelente Truman Capote.
Aparte de que es la tercera película (que yo sepa) que se hace sobre la exitosa novela "A sangre fría", contiene todos los clichés del cine que se hace en América con afán de agradar a quien corta el bacalao. Vale que Philip Seymour Hoffman lo borda pero, sin pretender quitarle mérito, el papel de gay incomprendido de voz estridente encaja perfectamente en el repertorio de "raros" oscarizados.
La fotografía es milimétricamente limpia, los paisajes bellísimos, pero sin personalidad alguna. La puesta en escena correcta pero con escaso sentido del ritmo, de hecho tiene que echar mano de alguna que otra trampa, como la extraña escena de la sesión fotográfica a los dos reos, para captar la atención. Al final se hace lenta y deseas que acabe, y para colmo tiene varios finales.
Decepcionante.