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Demetrio Rudin rating:
8
Comedy Mortimer Brewster stops off in Brooklyn to visit his two favourite aunts Abby and Martha to tell them that he has just gotten married. However, he discovers the dotty old dears have been feeding their boarders poisoned elderberry wine, desiring only to make them happy in death. They have then convinced their mad brother who imagines he is Teddy Roosevelt to bury the thirteen bodies in the cellar. The situation becomes even crazier when ... [+]
Language of the review:
  • es
March 17, 2006
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Un famoso crítico teatral, Mortimer Brewster, se ha casado en secreto con la bella Elaine. Los dos acuden a visitar a las encantadoras tias de Mortimer, Abby y Martha, allí descubrirá con horror que las ancianas se dedican a envenenar a viejecitos abandonados a los que entierran en el sótano. En la casa está, además, un perturbado mental que cree ser Theodore Rooselvelt y, por si fuera poco, aparece Jonathan, hermano de Mortimer y peligroso asesino.

Realmente esta historia vista o oída, de esta forma, puede llevar a engaño. Hacer una síntesis de la película resulta complicado, ya que esta trama aparentemente dramática, es en realidad un cúmulo de diversión y humor, como pocas veces, ha tenido el placer de mostrar el cine. Detrás de tan engañoso guión se haya el inconfundible tacto de Philip G.Epstein que adapta una obra original de Joseph Kesselring para que sea Frank Capra el director encargado de rodar el film. Arsénico por compasión se desarrolla en un clima, tanto polvoriento, gracias a unos escenarios que cumplen a las mil maravillas su objetivo de trasladar al público a un mundo de luces de neón, que contrastan radicalmente con los calidos y poco lumínicos decorados en los que transcurre la mayor parte del metraje. El film esconde una cierta parte ideológica referida al conformismo de los individuos dentro de una sociedad corrompida y manipulada por unos pocos, este mensaje propio del cine de Capra, ya se advierte en otras magníficas obras, caso de ¡Qué bello es vivir! Esta comedia de corte negro, se llena de irónicos y enrevesados diálogos:
-¿Queréis decirme cómo murió?
-Oh, Mortimer no seas tan preguntón. Ese caballero murió porque bebió un vaso de vino que tenía veneno.
-¿Y cómo tenía veneno en el vaso?
-Se lo pusimos en el vino porque se nota menos. En el té tiene un sabor muy especial.

En cuanto a lo formal, el film se muestra eficiente. A la hora de dirigir Capra asimila la película a una obra teatral, empleando largos planos generales que anteponen lo efectivo a lo estético hasta cierto punto. Las sombras y contraluces, toman protagonismo en ciertos momentos, logrando un loable aspecto visual.Matrícula de honor para Cary Grant, el cual, dibuja de manera excelente a Mortimer Brewster, un personaje huidizo y desconcertado por los hechos que le acontecen. Los secundarios merecen también un reconocimiento especial, Raymond Massey y Peter Lorre deleitan al espectador con una lección vital de simpatía y buenas maneras. Max Steiner combina magistralmente sobre las marchas solemnes, bien sean nupciales o fúnebres. En este sentido la música gira hacia lo cómico y lo mordaz de la historia.

Notable película de marcado humor negro, que se aleja de los cánones clásicos de la alta comedia norteamericana de los años 40 y principios de los 50. Un imprescindible.
Demetrio Rudin
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