Película alocada, pero sanamente divertida y con muchos golpes buenos.
El argumento se devora a sí mismo en cada giro para dar lugar a algo nuevo hasta límites insospechados. Y la película acaba con un gag riéndose de sí misma por ello. Esa es una gran virtud de esta película. Reconoce lo que es: un entretenimiento sin pretensiones.

Guión simpático, alocado y bastante divertido. Consigue sorprenderte varias veces y con cada una de ellas te vas a reír. No es nada ñoña aunque recurra a algunos tópicos de la comedia romántica. Es más fresca, más fluida, más corrosiva. ¿Un argumento inverosímil? Por supuesto. Sólo quiere divertir y lo consigue. Misión cumplida.

Idea prestada (e invertida) de "The Game" pero aquí con cinco vueltas de tuerca. ¿Son demasiadas? Acaba la película justo a tiempo; empezaba a cansarme del mismo recurso una y otra vez.

Los diálogos son de lo mejor: ácidos, reales, contundentes y muy corrosivos. Y, en un par de casos, amargamente reales.

Los personajes están aquí mejor perfilados que en otras comedias parecidas. Una pareja de jugones (McAdams lo hace genial, la mejor) a los que les cuesta madurar, pero descritos sin caer en tópicos. El hermano triunfador. El rarito hipersensible (genialmente interpretado). Pero, ademas, le dan la vuelta al tópico del chico listo con compañía guapa y tonta (es como lo presentan al principio) para mostrar aquí a un guapo tonto acompañado de chica lista. Por último, la típica pareja acaramelada que destapa trapos sucios, aquí es más refrescante que en otros filmes.

Dirección, buena. Le imprime ritmo y tensión al film. Pese a lo acrobático de los giros de guión consigue darle mediana "seriedad" a la historia (sólo mediana, eso sí...)

Las escenas de la secuencia de entrada y de los títulos de créditos son muy originales. Merece la pena quedarse a verlas.