Tenía unas ganas enormes de ver esta serie después de los anuncios que emitían en televisión. Cada pequeño anuncio incentivaba para que uno se pegara al televisor y poder descubrir que le pasa a ese joven americano en Roma, y como su madre lucha con cualquiera para encontrar a su hijo.
Pero esas ganas se desvanecen en apenas 15 minutos. El primer capítulo ya te expone como va a ser el ritmo de la serie, y ahí sentencias a la misma.
El ritmo que llevan los capítulos es tan vertiginoso y quieren meter tanta información, que todo resulta falso e incompleto. No me creo que los personajes sean capaces de hacer tantas cosas en tan poco tiempo, y que además acierten en todo. Todos están en el lugar preciso en el momento justo. Todos conocen a todos. Es tanta información la que quieren meter en apenas 10 capítulos, que no funciona y no resulta creíble.
Los personajes no me los creo. Sinceramente no me imagino a una ex agente de la Cía retirada desde hace 10 años, que sea capaz de manejarse de esa manera entre los bajos fondos de las ciudades. Parece más un James Bond que no se ha retirado, que una madre que lleva 10 años perteneciendo al AMPA.
Aparte de este personaje, aparecen otros que tampoco funcionan ya que no se da apenas ninguna información de ellos, y todos están interrelacionados pero no se sabe porqué. No se explica nada, y todo se debe intuir.
En fin, tremenda decepción que no atrae en prácticamente nada. Una serie que falla en prácticamente todo: desde un guión nefasto, hasta un montaje malísimo pasando por unos efectos especiales decepcionantes. Lo único que se podría salvar sería la actuación de Ashley Judd; y aun así tampoco es que resulte brillante.